Mateo Rubio es otro de los entrenadores españoles que decidió aventurarse y hacer las maletas para aterrizar en Japón. Comenzar un proyecto con los Fukui Blowinds y llevarlos a lo más alto. De momento, espectacular temporada en B3 y claros aspirantes para ascender, con un futuro muy interesante en el país nipón.
Solobasket habla con el coach, con pasado en LEB Oro, LEB Plata, LF2 o liga EBA, formando parte de la cantera del FC Barcelona como head coach del Júnior Preferente masculino y del filial. Rubio conoce a la perfección el baloncesto español, pero añade otra aventura más a su currículum, añadiendo Fukui a su etapa como seleccionador y entrenador de Uruguay, buscando crear un proyecto ganador en la prefectura de Fukui. De momento, 41-4 y victoria el fin de semana en Tokyo ante Tokyo Utd en el doble partido.
ENTREVISTA CON mateo rubio
Solobasket – Comienzo por el final. Los Blowinds han ido a ritmo de récord con un balance de 40-4. ¿Cómo se encara esta parte final de temporada y cómo se ha llegado hasta aquí?
Mateo Rubio – “Es un club de nueva creación que empieza a competir en la liga en tercera división de Japón, con el objetivo de estar en dos temporadas o en tres jugando en primera, porque todo apunta que dentro de tres años la primera división se cerrará. Será una liga cerrada y no se podrá ascender a ella, sino que los factores que te permitirán estar en ella son otros. De hecho, ya también lo son.
O sea, aquí no te sirve solo con ascender, sino que te piden unos condicionantes de presupuesto, de fans, de socios del club, de capacidad de público en tu pabellón. De hecho, el club no tiene pabellón propio. Utiliza los pabellones que hay en la ciudad de Fukui. Antes de cumplir todos estos condicionantes de budget, de presupuesto, de socios, incluso de ganancias económicas durante el año. Aquí el tema es muy serio en Japón, la organización es brutal.
Fukui es una ciudad y además es una prefectura. Sería una comunidad autónoma cuya capital es la ciudad de Fukui. El equipo es el equipo de la comunidad autónoma, aunque su base principal es la ciudad de Fukui, pero no es la única. Jugamos en otras ciudades de la prefectura también. Para llegar a jugar a B1, uno de los condicionantes es tener tu propia arena o tu propio pabellón y el club va a empezar a construirlo“.

SLB: Ritmo espectacular de juego y resultados. ¿Cuál es el análisis que hace Mateo Rubio?
M.R. – “Este año estamos invictos en casa, vamos con un balance 41-4 y nos quedan tres jornadas, que son seis partidos, porque aquí juegas sábado y domingo contra el mismo rival. Nosotros recibimos a un equipo, por ejemplo, el fin de semana pasado, estuvimos en Tokio para jugar contra el mismo equipo. Juegas dos veces y se cuenta como una victoria o derrota, igual que en Europa.
Entonces nos quedan tres jornadas, pero ya matemáticamente somos primeros. Durante nuestros tres partidos no nos jugamos nada y el Playoff es entre el primero y el octavo, cuartos de final, semifinal y final, igual que en Europa, entonces nos enfrentaremos al octavo y el formato es al mejor de tres, pero los tres partidos en casa al mejor clasificado. Por lo tanto, nos hemos asegurado al ser primeros jugar todos los partidos del Playoff en casa. Se juega sábado, domingo y lunes, el lunes sería el hipotético tercer partido, cuartos de final y semifinal. Los dos equipos que jueguen la final ya juegan por ser el campeón porque ascienden dos”.
SLB – Explícanos un poco cómo fue la confección del equipo y la manera de jugar que tiene Fukui Blowinds.
M.R. – “La valoración hasta el momento es magnífica. Un equipo completamente nuevo. Cierto es que seguramente no sé si la mejor plantilla de la liga, pero una de las cuatro mejores, seguro, con muchos jugadores con pasado en B1.
Nosotros tenemos tres jugadores no japoneses. En nuestro caso son dos americanos y un inglés. Así empezamos la temporada. Pero este jugador inglés, Benjamin Lawson, se está naturalizando japonés. Cuando termine su proceso podrá jugar como japonés. Entonces podemos tener un cuarto jugador extranjero. Pero solo dos de ellos pueden estar en pista, aunque puedas disponer de tres americanos o cuatro porque uno de ellos esté en proceso de naturalización, solo puedes tener dos a la vez en pista.
Los jugadores japoneses que tenemos, como te he dicho, muchos tienen pasado en B1. Somos 13 jugadores, de los cuales van convocados 12 a cada partido, y la verdad es que de los 12 no son todos iguales, pero tenemos una rotación mucho más larga que el resto de los equipos.
El juego en general es muy eléctrico aquí, las anotaciones suelen ser muy altas, nosotros estamos, no sé si por encima de 90 puntos de media prácticamente en los últimos dos partidos, 110 y 120 puntos me parece. Se juega muy, muy rápido, no hay mucho peso táctico, sobre todo en la B3 y la B2, en la B1 algo más. El juego es muy eléctrico, puede parecer que no se defiende, y no es cierto, sí que se defiende, pero es que las posesiones son realmente muy cortas, entonces se presiona toda la pista, el baloncesto es poco controlado, podemos decir, pero conforme va subiendo la categoría hay más control, en la B1 ya hay más control, es un baloncesto más europeo”.
—————–
第1Q終了
—————–#福井ブローウィンズ
28-22#東京ユナイテッドバスケットボールクラブ一進一退の展開の中、終盤にスコアを重ねて第1Qをリードして終了
第2QもGO BLOWINDSプレー速報はインスタグラムをチェック
https://t.co/CBoCoMODNw pic.twitter.com/cRya2q5T6u— 福井ブローウィンズ (@FUKUI_BLOWINDS) March 23, 2024
SLB – ¿Cómo surgió la opción de aterrizar en Japón y cómo es la organización en Fukui?
M.R. – “Bueno, pues cosas casualidades de la vida. Ya tuve la oportunidad de venir aquí a Japón en dos ocasiones anteriores. Una hace algo más de tiempo, tal vez 6-7 años cuando yo estaba en el Barça femenino. Pero bueno, en el pasado no se dieron del todo las circunstancias y ahora sí se han dado.
Yo tuve la posibilidad de estar en Uruguay. Y como siempre digo, aunque hay momentos duros, porque estás lejos de casa y lejos de la familia, pero tener un trabajo que te permite aprender en diferentes partes del mundo, conocer otras culturas, es siempre positivo. Si el trabajo te permite esas posibilidades, pues también, la posibilidad de conocer otras maneras de trabajar y otro estilo de vida, pues es algo que me llamaba la atención”.
SLB – ¿Qué le puede deparar el futuro a Mateo Rubio?
M.R. – “En el futuro no lo sé. Yo tengo contrato un año más aquí. Pero bueno, tampoco lo he pensado. Es decir, ya veremos, ya he aprendido un poco a ir de año en año, a disfrutar año a año, no pensar mucho más. Y ya veremos qué pasa el año que viene”.
SLB – El juego es diferente a Europa, pero ¿hay tanta diferencia entre la liga japonesa con el Viejo Continente?
M.R. – “Respecto a las diferencias, bueno, la organización, mira, nuestro equipo en B3, aunque ya te digo que es un equipo pensado para jugar en B1. De hecho los amistosos que jugamos en pretemporada fueron contra B2 y B1 y ganamos todos. La organización del club, te podría contar muchas anécdotas. Ya en el partido, el show prepartido, el público está dos horas antes en el pabellón. Lo que rodea el pabellón, las foodtrucks, las actividades, el tema de la animación, de las cheerleaders, la presentación, bueno, es una cosa que yo he visto pocas veces en ACB.
Luego, la organización interna, tanto del equipo como del club es alto nivel. La movilidad, sea en tren bala, sea en autobús, sea en avión, en los hoteles, la profesionalidad de todo el staff, -somos 10 personas de staff- es muy alta. El potencial económico de los clubes aquí es alto. Considero que a nivel organizativo hay muy pocos clubes en España con la capacidad de moverse a un nivel tan alto,
El nivel de cantidad de gente que trabaja en torno al equipo, en la organización del club, en merchandising, en prensa, es brutal. O sea, aquí todo el dinero no va a la pista, como es algo que pasa bastante en España. Aquí el dinero va a la organización, al club, y el club crece en todos sus vértices, a nivel social, a nivel marketing, a nivel evento, a nivel show, a nivel deportivo, a nivel prevención, a nivel médico. Es un crecimiento circular, es decir, en todas las direcciones, para mí esa es la principal diferencia”.
SLB – ¿Y a nivel deportivo?
M.R. – “Y nivel deportivo, los extracomunitarios son nivel EuroCup, incluso en la primera edición, nivel Euroleague, jugadores muy importantes aquí. Y el jugador japonés, bueno, es un jugador que le falta tamaño, con una capacidad técnica muy alta. La parte táctica o de táctica individual la tienen menos desarrollada, pero lo están mejorando. Japón y su selección nacional, pues mira, hace unas semanas, creo, en las ventanas ganó a China, cosa que no había pasado en muchos años, cada vez están compitiendo mejor, lo vimos en el último Mundial, se ha clasificado para los JJOO, en el baloncesto femenino, pues, también lo sabemos todos los éxitos que están consiguiendo, hace poco también ganaron a España, con un baloncesto muy atractivo, de muchos puntos, de mucho tiro de tres, o sea, creo que es un baloncesto que está en crecimiento absolutamente”.

SLB – ¿Cómo es vivir en Japón y en Fukui? ¿Hay mucha diferencia en organización y manera de jugar entre España y el país asiático?
M.R. – “Fukui es una gran ciudad. En extensión es muy grande, pero es cierto que tiene edificios muy altos. Es un poco más una ciudad… Está ubicada en un valle entre montañas. Está en la costa oeste de Japón, más o menos en el centro de Japón. Se encuentra a una hora y media de Kioto. Es una ciudad con mucho crecimiento, pero es una ciudad muy tranquila. Está bien para mí, debido a mi personalidad, está bien para mí. Entonces, mi día a día es entrenar. Aquí entrenas mucho. No sé si es más o menos que en otros sitios, pero si entrenas… El jugador japonés es muy trabajador. Llega mucho antes a los entrenamientos. Permanece mucho después del entrenamiento. Cuida bien su cuerpo. Él trabaja mucho las acciones individuales, técnica individual. Con los ayudantes se realiza trabajo individual.
Con el paso de los meses conozco un poco el país. Cuando viajamos para jugar, tengo un poco de tiempo para ir visitando. He podido ir a Kioto, Osaka, intentar empaparme de la cultura. Ya tuve la oportunidad de estar en Uruguay. También he hablado con otros entrenadores españoles que están aquí en Japón o que han estado aquí. Y todos lo vemos un poco igual. Hay un mundo fuera de España. Hay un mundo fuera de Europa. Y además… realmente te abre la mente para ir a otro lado. No se trata solamente de aprender baloncesto o compartir baloncesto u ofrecer baloncesto. No es solo la diferencia cultural entre la sociedad japonesa y la nuestra lo que es brutal. Es encontrarte cara a cara porque hay cosas que realmente te sorprenden y te das cuenta de que se pueden hacer mucho mejor de lo que estamos acostumbrados a hacer”.
SLB – ¿Alguna diferencia más entre estilos de vida?
M.R. – “Hay un problema, hay una barrera idiomática. En general, sobre todo fuera de Tokio, Kioto y Osaka la gente no habla inglés. En general, no hablan inglés, y puedes pasar que en hoteles no hablan inglés. Entonces en el equipo tenemos un traductor, y ahí no hay problema, y los jugadores la terminología de baloncesto, pues, evidentemente en inglés ya la dominan. Pero a nivel día a día, de ir al súper, de ir a cortarte el pelo, de ir a tal, pues es una barrera grande.
Pero, por otro lado, pues también es divertido. Es decir, yo ya estoy haciendo mis pequeños pinitos con el japonés, pero bueno, es una parte de la experiencia, aprender a comunicarte, aprender a expresarte, y luego, bueno, pues la sociedad japonesa es una sociedad muy respetuosa, mega organizada, muy limpia, no ves un papel en el suelo. En ciudades pequeñas, ahí es donde ves realmente el Japón real, tradicional, silencioso, muy de puestas para adentro, algunas personas con ese respeto tan grande que se tienen y ese sentido del deber, pues les impide socializar un poco, pero luego en cuanto pueden te ayudan. Yo me he sentido muy acogido, la verdad, siempre, por el resto del staff, por el club y por mi entorno de mi barrio, evidentemente no son como nosotros, que nos tocamos, nos abrazamos, ellos no, ellos mantienen una distancia personal grande, pero realmente es una sociedad digna de admiración, o al menos es como yo lo siento así, como lo estoy viviendo, y muy contento de tener la oportunidad de vivirla en un día a día y no solo de vacaciones, siempre la sensación es muy buena”.

SLB – Formaste parte del Barça femenino y de la cantera del Barça masculino, conociendo bien la Masia. ¿Cómo ves actualmente la organización azulgrana y los jóvenes?
M.R. – “Bueno, respecto al tema de la cantera del Barça, durante tres años que estuve allí, tanto en Junior como en el filial, conseguimos ascender a LEB Oro, y luego, por decisión del club, decidimos renunciar a esta plaza de LEB Oro para salir en EBA. Fue una lástima, porque creo que teníamos un grupo de jugadores jóvenes para poder seguir desarrollándose en LEB Oro, pero el club, por temas económicos, tuvo que tomar otras decisiones y otra dirección.
La verdad es que tengo muchos amigos, compartir mucho baloncesto, poder entrenar a buenos jugadores, intentar aportar mi granito de arena para su crecimiento, y ahora muy contento de poder seguirles a muchos de ellos como Juani Marcos, que lo está haciendo excelente en Girona, o a Michael Caicedo. He estado en contacto con alguno de ellos también y la verdad es que la cantera no la puedes seguir mucho. Sí que sigo mucho la Euroliga y sigo mucho la Liga ACB, aunque no es nada fácil ver la Liga ACB desde Japón. Es muy complicado. A ver cuando llegue a España, si consigo informarme de alguna manera. Y también siguiendo las primeras ligas europeas que puedo y poca cosa más. Pero en general, los años míos en el Barça son recuerdos muy bonitos”.