Marc Gasol sacó a relucir su categoría mundial en el momento adecuado: No estaba siendo este Mundial el mejor torneo de Marc Gasol con la selección, quizás injustamente criticado en ocasiones, pues si bien no estaba acertado en ataque, ha seguido siendo capital en la defensa y en la circulación de balón de España. Ni siquiera estaba siendo su mejor partido hoy, acumulando solo 4 puntos producto de 4 tiros libres al descanso. Pero a la vuelta del vestuario, el pívot campeón de la NBA con los Raptors ha dado un auténtico recital de fundamentos ofensivos (triples, juego al poste, palmeos) y defensivos (cierre del rebote, tapones, intimidación). Al final, 33 puntos, 11 de ellos entre las dos prórrogas, y una seguridad de que con él en pista España siempre va a competir.

Australia, un durísimo y correoso rival: los hombres de Andrejs Lejmanis han completado un excelente partido, y solo una hipercompetitiva España les ha podido apartar de la final, en la que es su primera derrota del campeonato. Los australianos dominaron desde el segundo cuarto hasta prácticamente el final de los 40 minutos reglamentarios, con otra gran actuación de Mills (34 puntos), Nick Kay (18 y 11 rebotes) y el veterano Bogut (12 y 9 rebotes). Ya compitieron muy bien en los Juegos de Río, y son aspirantes a medalla, sin ninguna duda, en los Juegos de Tokio.

El increíble Llull apareció: es sin duda uno de los mejores jugadores de Europa con el Real Madrid, pero se le acusaba de no ser el mismo con la selección española. Hoy tuvo uno de esos partidos que se le recordará al final de su carrera. 17 puntos, 6 asistencias, una gran defensa sobre Patty Mills y dos triples en la segunda prórroga. Junto a la gran actuación de Ricky (19 puntos y 12 asistencias), y a la gran defensa de Rudy sobre Ingles (le dejó en 4 puntos), grandes responsables de que España juegue la final del domingo.

Tanto Australia como España comenzaron el choque confirmando algo que les caracteriza: su fuerte volumen de lanzamientos triples. Ricky y Juancho por parte española, Goulding y Dellavedova por parte australiana, anotaron desde el perímetro y demostraron desde el inicio que éste iba a ser un partido igualado (13-12, min 6). El cambio de pívots del entrenador australiano Lejmanis, de Bogut por Baynes, permitió a Marc Gasol jugar más interior en la zona, pero más acertado fue el cambio de Scariolo de meter a Llull por Rudy. El escolta del Madrid anotó 5 puntos al final del primer cuarto, incluyendo un triple sobre la bocina del cuarto, al más puro estilo Llull, para dejar a España por delante al final del cuarto (22-21).

No funcionó bien España en ataque en el segundo cuarto. Tiros mal ejecutados y abuso del triple, unidos a una buena racha de Patty Mills con varias entradas a canasta consecutivas, permitieron a Australia situarse con su primer colchón relativamente importante (24-32, min 14). España estaba atascada, y solo conseguía anotar mediante tiros de media distancia de Ricky Rubio. Al menos, la zona ordenada por Scariolo detuvo la producción anotadora de Australia, pero los pobres registros en ataque (diez puntos en el segundo cuarto) llevaron a Australia a llegar al descanso por delante (32-37). Mills lideraba a los aussies con 11 puntos al descanso.

A la salida de vestuarios, ambos equipos mejoraron sus prestaciones en ataque, lo cual beneficiaba a Australia, que iba por delante. Marc Gasol anotaba de dos y de tres, mientras Patty Mills seguía metiendo, y acumulaba 17 puntos tras los 3 primeros minutos del tercer cuarto (39-46 para Australia, min 24). El infortunio se cebaba con el pívot de Toronto Raptors, que anotaba en su propia canasta al tratar de taponar, y los de Lejmanis alcanzaban su máxima ventaja (39-50, min 26). Era un momento ciertamente crítico para España. A los de Scariolo les costaba horrores anotar, y no porque los tiros fueran malos, pues la circulación de balón era buena, pero el acierto no acompañaba. Aun así, la defensa seguía manteniendo en partido a España (49-54, min 29), y a pesar de una técnica a Ricky Rubio, el base de El Masnou volvía a anotar un tiro de media distancia para poner a 4 a España a falta de 10 minutos (51-55). Máximo sufrimiento hasta el final. 

Costaba sangre anotar, en un partido de poco acierto y extraordinariamente intenso. Los árbitros perdonaron una clara antideportiva de Bogut a Ricky, que seguía sumando desde la personal, pero los españoles no conseguían recortar debido al tremendo trabajo del australiano Nick Kay bajo la pintura (55-63, min 33). Así con todo, la aparición de Marc Gasol en ataque, un triple de Ribas y una penetración de Llull pusieron a España a dos puntos (65-67, min 36). Y en medio de polémicas decisiones arbitrales, el final del partido fue, como se esperaba, de auténtico infarto. Con una canasta de Ricky y otra de Marc, España entró en el último cuarto a un punto (69-70). Ni España ni Australia conseguían anotar, hasta que Bogut hizo falta sobre Marc, con dos tiros libres para el de los Raptors. El pívot español anotó los dos, poniendo a España por delante por primera vez desde el final del primer cuarto (71-70). Quedaban 8 segundos. Mills, la gran estrella de Australia, no conseguía anotar, pero recibía la falta de Claver. Dos nuevos tiros libres. Solo metió el primero. Ricky estuvo a punto de anotar el tiro de la victoria, pero rebotó en el aro, por lo que España y Australia se fueron a la prórroga. Cinco minutos más de thriller.

Ya en el tiempo extra, ninguna de las dos selecciones conseguía sobreponerse a la otra. España obtenía cinco de ventaja tras un triple de Marc, pero Mills volvía a anotar de tres, y el omnipresente Nick Kay empataba de nuevo el partido (76-76). Con empate a 78 se entró en el último minuto, y de nuevo con Patty Mills en la línea de tiros libres. Esta no vez falló, colocando el 78-80 en el marcador, con 14 segundos y posesión para España. Y en la posesión española, nueva falta, esta vez de Dellavedova sobre Marc. Y dos nuevos tiros libres anotados por el catalán. Empate a 80. Segunda prórroga. El thriller no tiene fin.

En el segundo tiempo extra, España volvió a salir mejor. Apareció Llull, un jugador acostumbrado a ser decisivo en los momentos finales en el Real Madrid, confirmaba su mejor partido con España con dos triples que, unidos a una canasta de Marc Gasol (inmenso con 33 puntos), pusieron a España 8 arriba (93-85). Los australianos comenzaron a fallar, y a España ya no se le escaparía el partido. 95-88, y segunda final mundialista en la historia de España. Un grupo de guerreros que el domingo luchará por su segunda Copa del Mundo.