En las últimas competiciones de carácter internacional, España parece haber cogido el mal hábito de comenzar sus participaciones con derrota o, al menos, con susto y ofreciendo una pobre imagen. En el presente Eurobasket se mantiene la tónica. Lo que tenia que haber sido un plácido inicio, con victoria fácil ante Polonia, se complicó y mucho. Tuvieron que salir al rescate los veterano Juan Carlos Navarro (23 puntos y 3 rebotes) y Pau Gasol (29 puntos y 7 rebotes) para tirar de galones y confirmar la victoria hispana por un ajustado 83-78.
España sacó de inicio su quinteto de gala (Calderón, Navarro, Rudy y los Gasol en la zona) lo que denotaba que Scariolo se tomaba muy en serio su estreno en este Eurobasket. El objetivo de inicio parecía claro: cargar el juego interior para acabar con la vía rápida con la resistencia polaca. Y funcionó: Simon Szewczyk, el hombre alto más fiable en el cuadro polaco, ya sumaba 3 faltas personales en tan solo 5 minutos de juego y no podía co un bailarín de claqué llamado Pau Gasol, que firmaba, sin pestañear, 11 puntos al final del primer periodo. Con el rival desgastado, se iba al final del primer periodo con victoria parcial español por 22-15.
La entrada de la segunda unidad en pista no sentó bien al conjunto español, que veía como Polonia iba recortando la ventaja (22-19, min. 11). En esto salió Victor Sada, sustituyendo a Ricky Rubio, que parecía tener molestias físicas, y el juego volvió a fluir. Su dinamismo (está en todas partes) contagió a los suyos, Navarro se unió con sus puntos y las distancias se fueron agrandando hasta el 44-31 que reflejaba el marcador al descanso.
A la vuelta de vestuarios el partido se tornó anodino. España jugaba al tran-tran, con espesura en ataque. Los polacos tampoco eran demasiada amenaza para la no muy intensa defensa de los de Scariolo. Al final del tercer periodo, los polacos lograban bajar de los diez de desventaja y apretar minimamente las clavijas al conjunto español de cara a la fase final del partido (61-52). En los primeros instantes del último periodo España empezó a notar el aliento del rival en su nuca (63-57, min. 32). Polonia se venía arriba sin que los de Scariolo supieran reaccionar. La renta iba disminuyendo y el rival tenía opciones de dar la sorpresa (Polonia se puso dentro del último minuto a tan solo 2 puntos de España, 80-78). En esos momentos, la selección tuvo que echar mano de los de siempre, de los que nunca fallan: los veteranos líderes Juan Carlos Navarro y Pau Gasol. Ambos mantuvieron la calma y permitieron lo más importante, que España saliese airosa del apuro y acabar venciendo por 83-78.
Como se suele decir, lo mejor del partido fue la victoria sumada. Mal en defensa los españoles, poca tensión y, por momentos, poca fluidez ofensiva. Esta selección es mucho más que Pau & Navarro y eso se debe notar en la pista. Además del buen hacer de la pareja estelar española, a destacar los 16 puntos y 7 rebotes de Marc Gasol. Entre los tres jugadores citados anotaron el 82% de los puntos de España, siendo el siguiente máximo anotador Ibaka con 7 tantos. Entre los tres bases (Calderón, Ricky y Sada), Llull y Claver, 0 puntos y 0/10 en tiros de campo. Muestras evidentes que el colectivo no funcionó y si la enorme calidad de las principales estrellas hispanas. Mal también en el tiro exterior, con 3/16 en triples. Pero, en fin, habrá que tener paciencia. Esto no ha hecho más que empezar. Mencionar que Rudy Fernández tan solo disputó 9 minutos de juego por un ataque alérgico sufrido en el inicio del encuentro.
Por parte polaca, poco talento y plantilla justa, pero estuvieron en el partido hasta el final, luchando lo indecible. Elegante y eficaz, como siempre, Thomas Kelati (18 puntos, 3 rebotes y 7 asistencias) y grandes últimos minutos del partido del base Lukasz Koszarek (19 puntos, 2 rebotes y 2 asistencias).
Resumen del encuentro: