Final (Madrid)

USA 129 – Serbia 92

LA CRÓNICA:

Djordjevic lo decía tras el encuentro de semifinales, los milagros existen y ya se habían producido… pero no sería esta noche. Serbia salió sin reservas al parquet conscientes de que la empresa no sería fácil. Aunque Faried anotó la primera canasta del encuentro Serbia se encontró cómodo en los primeros minutos con un mate de Kalinic y una penetración de Teodosic, que comenzaba entonado el encuentro. Harden con un dos más logró el 5-4 pero Raduljica primero y dos canastas consecutivas de Bjelica ponían a los balcánicos cinco arriba. Para entonces Anthony Davis ya se había ido al banquillo con dos faltas y Teodosic seguía ampliando la renta. Para hasta allí llegarían los problemas para USA, al menos de momento. Harden e Irving se pusieron el mono de trabajo para recortar las diferencias. Entre los dos anotaron 24 puntos en el cuarto para dar la vuelta al partido con mención especial a los 15 de Irving que estuvo imparable. El tiempo muerto de Coach K. cambió completamente la dinámica del choque. La agresividad de Serbia de las primeras defensas no se sostenía ante los triples y los unos contra unos de Irving y USA cerraba el primer periodo con un parcial favorable de 28-6 en los últimos seis minutos para poner el 35-21. Sencillamente brutal.

Si Serbia quería volver a meterse en el partido no podía esperar para reaccionar, pero USA quería rematar la final lo antes posible para demostrar su superioridad a todo el mundo. Con un triple de Klay Thompson la diferencia ya era de 17 puntos y aunque Teodosic respondió con un nuevo lanzamiento de tres, Faried y Cousins castigaron dentro para equilibrar el juego de los Estados Unidos y poner más puntos de por medio. Los triples en el bando norteamericano se seguían sucediendo de las manos de Irving y Harden que querían disputarse el MVP del torneo. Los de Djordjevic sólo sumaban en acciones aisladas y la renta a favor de USA alcanzaba los 30 puntos. Un triple de Kalinic sobre la bocina dejó al descanso la diferencia en 26 pero el partido ya estaba roto. USA nos había privado de emoción en la final.

Con la medalla de oro ya colgada en los cuellos de los jugadores estadouniendes la única emoción del encuentro residió en la segunda parte en saber qué jugador se llevaría el premio de MVP del torneo. Aunque Faried había hecho méritos más que suficientes durante el campeonato y las votaciones de los periodistas se habían abierto tras la finalización de las semifinales, Harden e Irving competían por llevarse los últimos votos que podían enviarse hasta acabar el tercer cuarto. Por ello los dos siguieron anotando una y otra vez mientras que Serbia seguía resistiendo como podían tratando de que la diferencia no se fuese más alla de los 30 puntos. En Serbia los puntos de Teodosic y Kalinic habían dado paso a Bjelica y Bogdanovic, que también querían su dosis de protagonismo. Con 26 puntos para el de los Cavaliers y 23 puntos para el de los Rockets se acabó el periodo. Coach K. dio entrada a Derozan para que se luciese con siete puntos seguidos y los 100 puntos pronto se sobrepasaron con un asombroso 106-67 al finalizar el cuarto.

El último periodo sirvió para que Sasha Djordjevic rindiese homenaje a los jugadores titulares de Serbia aprovechando cualquier parón en los últimos cinco minutos para sustituirles uno a uno. Fue momento para el espectáculo para uno y otro equipo con sucesión de alley oops y todo tipo de jugadas espectaculares. Kalinic brilló por parte de los balcánicos con mucha energía en cada acción y acabando con 18 puntos mientras que en USA los miembros del equipo estadounidense se repartían la anotación alcanzado hasta ocho jugadores diferentes los dobles dígitos. USA había demostrado que hoy por hoy, ningún equipo del mundo es capaz de plantarles cara. El 129-92 final evidenciaba la diferencia entre los Estados Unidos y el resto de conjuntos del mundo.

LAS CLAVES:

  1. 5 minutos de igualdad. Se antojaba una final más igualada pero por desgracia no fue así. Serbia llegó a estar por delante 5-12 en el macador, siete puntos arriba pero a partir de ese momento la superioridad de Estados Unidos fue evidente. Al final del primer cuarto ya vencían los norteamericanos 35-21 con un parcial final de 26-8 que finiquitaron el partido.
  2. Carrera por ser el mejor jugador del partido. Irving y Harden pelearon todo el partido para acabar como máximos anotadores. El de los Cavaliers acabó con 26 puntos y 4 asistencias con un inmaculado 6 de 6 en triples mientras que el de los Rockets se quedó en 23 puntos. El MVP fue a parar finalmente en Irving.
  3. Los lanzamientos de tres, decisivos. Hasta 15 triples anotó USA de 30 intentos. Un porcentaje muy alto para una final que les sirvió para no tener problemas para marcharse en el encuentro. Irving con 6 de 6 y Harden con 3 de 5 fueron los mejores también en este apartado.
  4. Mayor rotación de la habitual en Serbia. Será porque Djordjevic vio el partido perdido muy pronto pero lo cierto es que a diferencia de lo ocurrido en los encuentros de octavos, cuartos y semifinales el técnico dio entrada ya en el primer cuarto a jugadores como Simonovic o Bircevic que habían tenido poca trascendencia en los anteriores encuentros.
  5. En la pintura también fueron superiores. Cousins y Faried hicieron mucho daño en la pintura a Serbia. Con un Anthony Davis con problemas de faltas el pívot de los Kings ganó en protagonismo logrando 11 puntos y 9 rebotes y 2 tapones en solo 16 minutos de partido.

ASÍ LO VIERON:

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