La vuelta de Colton Iverson al Principado no pudo ser mejor. Para él, claro: a los 8 minutos de juego ya había anotado 4 puntos y había capturado 6 rebotes –acabó el cuarto con 16 de valoración-. Iberostar Tenerife golpeó primero, con el pívot americano y Abromaitis fijando la máxima ventaja del partido al final del primer cuarto (11-23). A MoraBanc Andorra no le entraron los tiros y en defensa no estuvo nada compacto.
No obstante, en el inicio del segundo periodo, con un Diagne activo en ambos lados de la cancha -5 puntos en este tramo-, los andorranos recortaron distancias en un visto y no visto (20-25, min. 12). Dato curioso: Andorra metió casi los mismos puntos en el primer cuarto que el los dos primeros minutos del segundo periodo. La vuelta a pista del dúo Abromaitis-Iverson no sirivió para que un Diagne desatado continuara su show y colocara a 2 a su equipo con un gran mate (26-28, min. 16). Sí, los de Vidorreta resistieron el embite; sí, de nuevo Iverson entró en escena, pero la aprición de Whittington volvió a igualar el encuentro (35-38 al descanso).

Un parcial de 5-0 puso a los de Ibon Navarron por delante al poco tiempo de reanudarse el encuentro (40-38), pero ¿quíen apareció entonces? Exacto: Colton Iverson. En esos minutos, los isleños jugaron como equipo y jugadores como San Miguel y Beirán contribuyeron para tomar aire (40-49, min. 25). Antes del final del tercer periodo, hubo un “momento Ennis”, pero fue insuficiente dado que el americano no estuvo tan enchufado como otros días.
El último cuarto fue el más emocionante, puesto que estuvo apretado y los andorranos creyeron más que nunca en la remontada, pero dos triples consecutivos de Staiger volvían a echar por tierra las ilusiones del Poliesportiu del Molt Ilustre Govern (75-83, min. 37). Los rugidos de mediados de periodo se convirtieron en silencio y los ánimos fueron disminuyendo hasta un final cuyo resultado fue más contundente del que se vio en la cancha (81-96).