D’or Fischer pasó como un vendaval por el SAR de Santiago de Compostela. El pívot de Gescrap Bizkaia se hizo dueño de la pintura sin que ningún jugador de BluSens Monbús pudiera pararlo. Totalizó 23 puntos y 11 rebotes para ser nombrado MVP de la Jornada 17 de la Liga Endesa. Uno de los datos que refleja su espectacular dominio en la zona son los 6 mates que totalizó en el encuentro. Media docena de vuelos para hundirla de forma espectacular y hacer temblar el pabellón. Una cifra inusual que ya tuvo un antecedente previo esta misma temporada de la mano del jugador del FIATC Joventut Latavious Williams (6 mates ante Lucentum en la J14) y que sirve como excusa para bucear en la historia de la Liga ACB en busca de las actuaciones "matadoras" más prolíficas.

Los datos estadísticas sobre mates en la máxima categoría del basket español no se recogen hasta la década de los ’90, por lo que no podemos acceder a los datos de voladores como David Russell, los primeros años del bestial Anicet Lavrodama o los preACB Essie Hollis y Nate Davis. Atendiendo a los datos recopilados desde la temporada 1990-91 en adelante, la marca histórica en mates logrados en un solo encuentro corresponde a un jugador recordado por su capacidad para colgarse del aro. Se trata de Ricky Winslow, un matador tan estético como contundente y prolífico. El mítico jugador de Estudiantes logró nada menos que 9 mates en un encuentro de playoff disputado ante el Joventut el 8 de mayo de 1995. Los estudiantiles vencieron por 89-78 con Winslow firmando 26 puntos y 10 rebotes, con un perfecto 11/11 en tiros de 2.

Concurso de mates de la ACB en 1990 con Ricky Winslow entre los participantes:

Si tenemos en cuenta únicamente la fase regular, encontramos a dos jugadores que comparte el récord establecido en 8 mates en un encuentro. El primero de ellos también escribió su nombre en la historia de la liga por su espectacularidad, a pesar de que su paso por ACB fuera efímero. Se trata de Maceo Baston, un jugador con unas condiciones físicas y atléticas únicas para el arte del mate. Durante su paso por Badalona realizó nada menos que 133 mates en 50 partidos, a 2.7 por actuación. Su récord matador lo estableció un 24 de febrero de 2002 ante, curiosamente, Estudiantes, en un partido que acabó con victoria estudiantil por 73-86, pese a los 32 puntos y 10 rebotes de nuestro protagonista.

El otro jugador poseedor de la marca de 8 mates es un hombre olvidado o desconocido por la gran mayoría de aficionados al basket español. Se trata de Marlon Maxey, un ala pívot de 2.03 que defendió la camiseta de Breogán y Lucentum en dos pasos esporádicos por la ACB. Maxey era un jugador muy aficionado al mate que realizaba con extraordinaria facilidad, al menos en su primer paso por nuestro país, gracias a su dominio del balón a una mano. Defendiendo los colores del Breogán, hundió el balón en la canasta hasta en 8 ocasiones un 18 de marzo de 1995 en la pista del Coren Ourense, en partido ganado por los lucenses por 89-95, con 27 puntos y 9 rebotes sumados por el jugador norteamericano. En 17 partido en Lugo, totalizó 51 mates, nada menos que a 3 por encuentro.

Tras estas marcas, encontramos otros recordados saltarines con 7 mates realizados en un mismo encuentro; se trata del añorado Kenny Green (Baskonia, 18-11-1995), el animal Ken Bannister (Baskonia, 14-04-1994) o Chandler Thompson (Ourense 1-10-1994). El propio Maxey sumaría 7 mates en su época en Lugo, concretamente el 21 de abril de 1995 en el playout disputado por los Breogán ante Valvi Girona. Más recientemente, Boniface NDong también logró esta misma marca de 7 mates defendiendo la camiseta de Unicaja en un encuentro ante Grupo Capitol Valladolid (23-03-2008).

Maceo Baston, un matador para el recuerdo: