Va para clásico
Bilbao Basket es casi un recién llegado a la elite del baloncesto. Nacido en el año 2000, logró un meteórico ascenso a la ACB en 2004. Y parece haber encontrado su lugar en la elite. Pasito a pasito, ha ido logrando nuevos objetivos; primero la permanencia, luego estabilizarse en la zona media de la tabla, más tarde vendrían la clasificación para la Copa del Rey (llegando hasta semifinales), los primeros Playoff de la ACB y su primera y brillantísima participación en competición europea (semifinalistas de la presente Eurocup). Asentado en la ACB, sus duelos regionales con el Tau Cerámica Baskonia, por derecho propio, uno de los grandes de Europa, ya tienen carácter de clásico en la ACB.
Los partido entre ambos conjuntos siempre son tremendamente disputados y con un gran ambiente en las gradas. Incluso, muchas veces estos duelos son alimentados con ciertas gotas de morbo y polémica que nunca deberían superar los límites de lo tolerable en el deporte (cosa que hoy no ha ocurrido con cierto sector de los denominados Indar Baskonia, que han protagonizado un incidente a la salida del pabellón con algunos aficionados y jugadores de iurbentia Bilbao Basket).
En estos encuentros, los baskonistas siempre parten como favoritos, pero los bilbaínos ya han demostrado ser capaces de darles un serio disgusto (han ganado en 2 ocasiones en el Bizkaia Arena, además de dar la gran sorpresa la temporada pasada, venciendo en el Buesa Arena).
En el partido de hoy han estado realmente muy cerca de dar la campanada. Solamente la veteranía y la calidad individual de hombres como Rakocevic (18 puntos) y Pete Mickeal (16 puntos y 5 rebotes) han desnivelado la balanza a favor de Tau Cerámica Baskonia. Todo ello, en un encuentro de los que hacen afición, con todos los ingredientes que hacen de este deporte algo especial: emoción, grandes individualidades, variantes tácticas de 1º nivel y mucho calor y color en las gradas.
10 minutos de absoluta perfección
En el comienzo de partido, la calidad individual de Tau Cerámica Baskonia se ha impuesto a un iurbentia Bilbao Basket que se apoyaba en exceso en el acierto de Marko Banic (14 puntos y 5 rebotes). Los baskonistas lograban una ventaja de 10 puntos a favor cerca del final de 1º periodo (23-13), lo que lleva a algunos a pensar que la victoria local iba a ser más plácida de lo previsto. Nada más lejos de la realidad.
Tras un 0-5 de parcial, los de Vidorreta llegaban al final del 1º periodo 5 puntos abajo (23-18). Volvían a meterse en el partido, ¡vaya si lo iban a hacer! De la mano de un magistral Javi Salgado (13 puntos, 3 rebotes y 9 asistencias), los hombres de Vidorreta completaban un cuarto absolutamente perfecto. Anotaban 38 puntos a un equipo y una afición vitoriana que no se podían creer lo que veían en la cancha. Pasalic (15 puntos y 5 rebotes) se disfrazaba de Markota, Recker (15 puntos, 5 de 9 en triples) volvía a ser el de siempre y Guardia (15 puntos y 5 rebotes) era el rey de las zonas. Ivanovic se veía completamente desbordado por el acierto de los jugadores bilbaínos. Vidorreta se imponía, una vez más, en el duelo técnico-táctico con sus ayudas en defensa, sus pívot jugando abiertos… una nueva lección del entrenador bilbaíno.
Así se llegaba al descanso con un sorprendente 43-56.
El despertar baskonista y el coraje bilbaíno
La bronca de Ivanovic a los suyos debe haberse escuchado en toda Vitoria. Sus jugadores habían sido un auténtico coladero en defensa y se habían visto superados claramente por sus oponentes. Sea como fuere, los jugadores de Tau Cerámica Baskonia han salido a la cancha con la lección bien aprendida.
Los baskonistas, cargando mucho el rebote ofensivo e imponiendo la evidente superioridad de kilos y altura en la zona (Splitter, 15 puntos, 10 rebotes y 5 asistencias, por fin dominaba la pintura), recortaron pronto las diferencias en el marcador. De esta forma, y tras un parcial de 21-5, llegaban a los últimos minutos del 3º cuarto con 3 puntos a su favor (64-61). El juego de Bilbao Basket tocaba fondo y parecía ser incapaz de recuperarse del varapalo recibido. Sin embargo, a los jugadores de Txus Vidorreta les sobró coraje para volver a meterse en el partido y llegar, incluso, con 3 puntos de ventaja al periodo definitivo (64-67).
En los 10 últimos diez minutos ha reinado la emoción. Tau Cerámica Baskonia parecía llevar la voz cantante y se presumía que, cerca del final, los de Vidorreta, ya extenuados, iban a sucumbir ante un rival de tanta entidad como el vitoriano. Los bilbaínos han defendido sus opciones hasta el último momento. Solamente un par de acciones desafortunadas en ataque y el acierto de Rakocevic y Mickeal (ha querido, con su actuación, hacer olvidar el triste affaire de su, por lo que parece, falso pasaporte búlgaro) en los minutos clave impidieron a Bilbao Basket dar la sorpresa. Al final, 90-86. Todo un gran espectáculo.