Partido pleno de igualdad en un primer cuarto vibrante en el que las onubenses salieron – como ya pronosticara su técnico en la rueda de prensa posterior a la semifinal contra Spar Citylift Girona, dispuestas a no hacer prisioneros en el bando salmantino.
Comenzaron las de Alberto Miranda insistiendo en su patrón de juego habitual cargando balones interiores. Las de Gabriel Carrasco en modo concentración en defensa, dando la batalla en el rebote para lanzar rápidas transiciones que -aun en ocasiones pecando de cierta precipitación, fructificaban con una ventaja de 12-15 a 1:52 del final del primer período. Momento en el que tras fulgurante transición culminada fácilmente por las onubenses bajo aro, Miranda decide para el partido y llamar a capítulo a sus pupilas. Las perfumeras no se encontraban nada cómodas ante la defensa individual de las onubenses, y tampoco excesivamente acertadas en el tiro exterior. Prueba de ello es que Miranda puso en cancha a la paraguaya Paola Ferrari en un intento de descerrajar la férrea defensa onubense desde el exterior. Con una cesta de Angelica Robinson bajo aro ganando la línea de fondo, Perfumerías Avenida cerraba el marcador del primer asalto en desventaja, 17-18. Hasta ahora, todo discurría según el guión previsto por el técnico onubense Gabriel Carrasco.
Por similares derroteros continuó la segunda manga del encuentro, con las onubenses llevando la delantera en el electrónico y forzando pérdidas en las salmantinas gracias a su concentración defensiva y su intensidad (hasta 5 llegaron a acumular las charras en el primer parcial por una en el bando andaluz). De nuevo una canasta de Robinson culmina un parcial de 7-2 favorable a las perfumeras, que obliga a Carrasco a solicitar tiempo muerto y poner ideas en el ataque de sus pupilas (25-22, min 6:47). Tan fácil como jugar poste alto-poste bajo, una buena defensa y a correr para recuperar la delantera en el electrónico, sólo para verse superadas de nuevo por la actividad en la pintura de una incombustible Robinson (¿quién recuerda la de improperios que recogió en sus primeros meses en Salamanca en los que le costó aclimatarse al gameplan de Víctor Lapeña?). La final había entrado entonces en eso que los americanos llaman el “see-saw”, es decir, el columpio “uno arriba-uno abajo”. Miranda, para apretar un cuarto de vuelta la tuerca, saca a su segunda línea de exteriores para acrecentar la presión a media cancha e incomodar la circulación de las de Carrasco introduciendo a Mariona Ortíz y Leonor Rodríguez. Con 1:33 por jugarse hasta el descanso Carrasco da un minuto de oxígeno a sus jugadoras, pensando sobre todo en que las perfumeras no acrecienten la exigua renta que llevan en el marcador (35-33). Pero una contra culminada por Marta Fernández a velocidad terminal de vértigo cerraría la primera parte del combate con el 37-33 favorable a las salmantinas y dejando al personal con ganas de más. Escasa renta azulona teniendo en cuenta su claro dominio del rebote (27-17) y su poderío interior (Robinson 10 pts, 5 rebs-Rezan 11 rebs) aunque compensado por sus 8 pérdidas de balón y su escaso acierto desde el 6’75 (2/8, 25%). Las onubenses, en su línea de juego coral repartiendo anotación y responsabilidades y con sólo 3 balones extraviados (Lucila Pascua, 6 pts 4 rebs, Chelsea Davis 7 pts, Asurmendi 5 pts, 3 reb, 3 as). Y CB Conquero estaba llevando la iniciativa en el juego exterior.
Golpe a golpe, canasta a canasta va transcurriendo el tercer cuarto, continuando con esa dinámica del columpio (see-saw) hasta que con el empate en el marcador a 43, se produce un tiempo muerto (5:00). Con el juego exterior perfumero sin conseguir carburar del todo, Miranda introduce de nuevo a su segunda unidad de backcourt (Ortíz-Rodríguez) mientras las onubenses acumulan ya un parcial de 0-8 que las pone por delante con un +6 (43-49) que hace bramar al sector onubense de la grada a 1:56 de final 3Q. Ventaja que sumaría un punto más a favor de las onubenses a final de cuarto 46-53 una vez colapsado el juego interior salmantino gracias a las excelentes segundas y terceras ayudas de las de Carrasco en el pintura para cerrar a Robinson.
La acumulación de pérdidas de las de Miranda alcanza las 14 y el técnico de las perfumeras decide poner orden en sus filas con un tiempo muerto a 8:35 del final del cuarto – quién sabe si del partido – mientras la temperatura sube variuos grados tanto en la grada como en el parquet. Nervios, imprecisiones, tiros con dudas… el marcador se mueve ahora lentamente, aunque siempre en el casillero perfumero, que suma un 6-0 de parcial propiciado por una mayor actividad defensiva que depara una nueva igualdad de guarismos (53-53, 5:45). Dos malas decisiones onubenses en ataque y una contra culminada entre Marta Fernández y Shay Murphy – desaparecida hasta entonces la californiana, tomó el mando de las operaciones ofensivas de su equipo a partir de ese momento para acabar con 12 pts, 9 rebs, 15 val – ponen por delante 57-56 a las azulonas, con el sector salmantino de la grada en plena efervescencia como si de Wurzburg se tratara. Intercambio de canastas de bellísima factura el que se produce en los tres últimos minutos del tiempo reglamentario hasta llegar hasta un último minuto en el que entramos con ventaja perfumera +4 tras dos tiros libres anotados por Marija Rezan (66-62). Obligado el tiempo muerto onubense, no fructifica en un triple fallido de Aja Parham ni en un tiro forzado de Chelsea Davis bajo aro salmantino que dejan a Perfumerías Avenida como campeón de la Copa de la Reina 2015.
Además de Asurmendi, muy notable dirección la suya durante toda la Copa, por parte onubense destacadas actuaciones de Luci Pascua (8 pts, 7 rebs 12 val), Adaora Elonu (14 pts, 4 rebs 145 val) y Chelsea Davis (15 pts, pero sólo 3 rebs, 10 val).