El expresidente soviético Mijaíl Gorbachov falleció durante el día de ayer a la edad de 91 años. Se trata de uno de los grandes personajes de la historia del siglo XX y fue el último líder la Unión Soviética antes de disolverse, gobernando como secretario general el Partido Comunista de la Unión Soviética desde 1985 hasta 1991 y siendo el único presidente del país en los últimos meses del mandato. Gorbachov puso en marcha reformas radicales, que llevaron a una serie de eventos no deseados, firmando tratados internacionales importantes en la historia, abriendo relaciones con Occidente y Estados Unidos, siendo también algo más transparente y concediendo algo más de libertad en el país, con el glasnost como política y la reforma económica de la perestroika. Se puso fin a la Guerra Fría y en 1989 cayó el Muro de Berlín.

Pero el que fuera presidente de una de las grandes potencias mundiales también tuvo momentos y capítulos relacionados con el mundo de la canasta, siendo uno de los primeros en 1987, cuando la selección de la Unión Soviética visitó Milwaukee para enfrentarse a los Bucks. Era un evento deportivo que levantó mucho interés y hubo muchas conversaciones sobre la Guerra Fría, cogiendo como ejemplo la escena del Centro de Convenciones de Milwaukee explicando así Sports Illustrated: “Aunque los soviéticos no se deleitaron exactamente con la atención que les prestaron los promotores y la prensa, tampoco lo encontraron desagradable. Extraño, tal vez, pero no desagradable. Después de su práctica una mañana, tomaron el centro del frenesí de alimentación obligatoria en McDonald’s y luego visitaron Kohl’s, la tienda por departamentos propiedad del propietario de Bucks, Herb Kohl. Allí se les dieron sudaderas, rojas, por supuesto, chaquetas de jeans y osos de peluche (Gomelsky rechazó cortésmente el suyo). Esa noche vieron Fatal Attraction en el cine de West Point”.

Gomelsky era el seleccionador soviético de aspecto sombrío. El entrenador de Bucks en aquel momento era Del Harris. Antes del partido, el seleccionador le presentó una pancarta conmemorativa, un acto de diplomacia que no sería correspondido en la pista. El partido se enmarcaba en un nuevo torneo internacional de clubes llamado Open McDonald’s. El resultado final del partido entre Bucks y la URSS fue de 127-100 para los locales.

Este partido abrió la primera puerta dos años después a la llegada de Sarunas Marciulonis a la NBA. Sería el primer jugador soviético en firmar con un equipo de la liga estadounidense, firmando contrato con Golden State Warriors, para ver después a Alexander Volkov jugar un par de años en Atlanta Hawks.

En 1988 fue otro momento clave cuando Atlanta Hawks se convirtió en el primer equipo NBA en visitar la URSS. La franquicia de Georgia estaba dirigida por Mike Fratello y fueron durante dos semanas en una gira de exhibición. El 25 de julio emprendieron el viaje y jugaron tres partidos en Tbilisi, Vilnius y Moscú.

Llegaron al aeropuerto de Sujumi en un enorme avión IL-86, con poca idea de lo que vendría después del aterrizaje. El primer elemento es que no era un vuelo charter y volaban con otros civiles y animales vivos y no incluía servicios. Los Hawks viajaron con jugadores, personal del equipo, medios de comunicación, amigos y familiares. Volkov, ucraniano de 24 años, era uno de los jugadores de la expedición y quiso explicar que no vendrían a hacer buceo o grandes actividades. Junto al jugador soviético, estaban Kevin Willis, Doc Rivers o la gran estrella, Dominique Wilkins. 

La liga aprobó esto porque fue realmente el comienzo de David Stern mirando la globalidad de la NBA. Uno de los primeros pasos tuvo que ser los jugadores de Europa del Este“, dice Kim Bohuny, que ayudó a correr el viaje para TBS y ahora es el vicepresidente de operaciones de baloncesto internacional de la NBA.

Sabes, soñamos con la NBA, pero no se lo dije a la gente, traté de no parecer estúpido. Con la situación en el mundo, con la Unión Soviética, todas esas cosas sucediendo… dentro, pensé que sí, parecía que había una oportunidad“, comentó Volkov.

Hawks ganó el primer partido por 84-85 ante 10.000 personas en Tbilisi; en Vilnius volvió a ganar 110-105 y en el último, la URSS ganó en Moscú por 132-123 con Volkov anotando 35 y Marciulonis 23. Los soviéticos ganaron el oro en Seúl en septiembre, y a Marciulionis y Volkov se les permitió jugar en los Estados Unidos en el 89, el primero se unió a los Warriors y el segundo a los Hawks por fin. Ocho meses después de la derrota de la medalla de oro, a los jugadores de la NBA se les permitió jugar en competiciones internacionales.

Toda aquella zona de la extinta URSS que se dividió en tantos países se convirtió posteriormente en un constante aterrizaje de jugadores que pusieron rumbo a la NBA, sobresaliendo casos más contemporáneos como Kirilenko, Porzinigis, Domantas Sabonis.

Otros momentos que siempre quedarán para la historia fue la foto tomada en el Kremlin en 1989, cuando Arvydas Sabonis pidió permiso para poder salir de la URSS y fichar por algún club extranjero. Gorbachov se lo permitió y pudo fichar por el Forum Valladolid jugando durante tres cursos para recalar posteriormente en el Real Madrid y su carrera posterior fue de leyenda, llegando a los 31 años a la NBA y jugar con los Blazers. Su historia tuvo un capítulo previo, cuando en 1986 el entrenador de la universidad de LSU, la estatal de Louisina, escribió a Gorbachov para que autorizase a Sabonis unirse al equipo, incluso ofreció hacer giras por la URSS con la universidad, pero no aceptó el ofrecimiento. 

El 12 de enero de 1989 el Maccabi Tel-Aviv derrotó al equipo del Ejército Rojo del CSKA de Moscú por 97-92 en un partido de baloncesto celebrado en Moscú. El juego es el primero en el que los atletas israelíes compiten en la Unión Soviética desde que la URSS rompió las relaciones con Israel después de la Guerra de los Seis Días de junio de 1967. Entre el cese de las relaciones diplomáticas de 1967 y el partido del 12 de enero, los eventos deportivos entre equipos de los dos países se celebraron en territorio neutral.

Ese mismo año de 1989 se transmitió por primera vez un partido de NBA en la televisión soviética. En 1990, Gorbachov ganó el Premio Noble de la Paz por su papel en el fin de la Guerra Fría. Nacido en Privolnoe, fue testigo de muchos de los horrores de la era Stalin, prometiendo en su momento liberar a su país de ese panorama político.