Si afirmamos que el FC Barcelona Lassa no está teniendo la mejor temporada del último lustro, no estaríamos equivocados. De momento, al menos. El conjunto que dirige Giorgos Bartzokas se ha visto damnificado por las lesiones, pero su juego tampoco ha dado síntomas de equipo firme en lo que va de temporada. El triunfo ante el Real Madrid en la Supercopa Endesa es un aliciente al que se aferran para seguir creyendo que no todo está perdido. En Euroliga, en ningún momento se ha reconocido ese "ADN Barça", incluso se escucharon muchos silbidos durante la dura derrota en el Palau Blaugrana ante Baskonia por 79-93. Bartzokas resolvió este mal trago de la mejor forma posible: puso a los más jóvenes en cancha (Vezenkov, Diagné, Eriksson…), y rindieron hasta tal punto que fueron aplaudidos por el empeño y el esfuerzo que demostraron. Desde un punto de vista analítico, reducirlo todo a unas frases tan simple como "el equipo se tiene que adaptar" o "las bajas nos han hecho mucho daño" no explica a ciencia cierta qué ha ocurrido en Barcelona estos últimos meses. Por ello, en este artículo analizamos varios puntos que tienen que ver con la mala racha del equipo.

1. FALTA DE LIDERAZGO

O de ímpetu, o de garra, o de orgullo, o de corazón, o de agresividad, o de mentalidad, o de confianza, o de tantas otras cosas de las que carece este Barça. En este apartado se podría incluir la escasa presencia de la cantera en este equipo, y es que -salvo Navarro-, ningún jugador ha pasado por la cantera del FC Barcelona. Vale, sí, Eriksson y Peno han estado presentes en las etapas de formación, pero ¿cuál es el peso de estos dos jugadores dentro del esquema táctico de Barzokas? Es difícil ver hoy en día algún jugador que personifique el orgullo blaugrana, y eso no se hace, con eso se nace. 

Por un lado, está Juan Carlos Navarro: líder dentro y fuera del vestuario, ha perdido peso en cuanto a importancia, y eso ha hecho que las nuevas incorporaciones lo tomen más como un mito -que lo es- antes que como un líder en pista. Las limitaciones físicas y las lesiones no han ayudado a que el escolta de Sant Feliu siga siendo el jugador que, con su muñeca, incitara al público a sumarse a la fiesta. En la entrevista para EL PERIODICO, el capitán azulgrana aseguró este jueves que les hace falta intensidad, confianza y mentalidad. Por otro lado, Ante Tomic, que podría ser perfectamente ese abanderado que busca el FC Barcelona Lassa: tiene calidad y lleva mucho tiempo en Can Barça, pero aún no ha dado ese paso hacia delante. Suele ser uno de los más criticados cuando juega mal, pero si nos acogemos a la estadística, observamos un dato revelador: Tomic ha sido el más valorado del FC Barcelona durante 4 años seguidos en la Liga Endesa. Los 15'5, 14'3, 17'3 y 21'7 de valoración en las últimas 4 campañas hablan muy bien de un hombre que siempre ha estado en el ojo del huracán. Y por último, Rice, que está resolviendo partidos. A veces sale cara y a veces sale cruz, pero no pueden depender solo de él: no es un líder institucional; es un anotador compulsivo cuando se siente con confianza. Pese al impacto decisivo que parece tener en los partidos, solo promedia 10.6 de valoración en Liga Endesa.

Y por liderazgo no se debe entender solo que se levante el público porque un jugador dé una asistencia por detrás de la espalda o realice un mate espectacular. No, liderazgo es mucho más que eso. Liderazgo es inculcar a los nuevos que ningún partido está perdido hasta que se acabe; liderazgo es, en resumidas cuentas, entusiasmar y hacer creer que todo es posible en un club como el FC Barcelona.

2. LAS LESIONES

Sí, las lesiones. No son una excusa, son un motivo. Eso mismo: un motivo, no "EL" motivo. Resulta curioso que, tras la marcha de Toni Bové, haya empezado una plaga de lesiones sin precedentes en Barcelona: Ribas, Navarro, Perperoglou, Doellman, Claver, Renfroe… La lista se hace demasiado extensa. De hecho, en 5 meses han intervenido nada más y nada menos que 19 jugadores con el FC Barcelona Lassa -20 si contamos a Munford, que todavía no ha debutado-. Si nos fijamos en temporadas anteriores, podemos ver que la cantidad de jugadores utilizados por Xavi Pascual no sobrepasaba los 15-16 jugadores por temporada -en parte, porque tampoco caían lesionados tantos jugadores-.

No es ningún secreto que, si en la plantilla se producen lesiones constantemente, el propio jugador del equipo vaya con ciertas precauciones y con cierto miedo porque le puede pasar a él. Y a su vez, esta pérdida continua de jugadores genera desconfianza en el grupo, que ve imposible cuadrar un buen núcleo y adaptarse a un esquema de juego definido. Además, el hecho de no competir y de ver los encuentros desde el banquillo hace que a los jugadores lesionados les cueste entrar a nivel mental con la exigencia que se les pide, que no es poca tal y como está el panorama.

Siempre se dice que después de la tormenta siempre llega la calma, y en esas está todo el organigrama del FC Barcelona Lassa. Esperando que lleguen tiempos mejores, intentando que se consolide un grupo de fantásticos jugadores. 

3. LOS FICHAJES

En el partido al que antes se ha hecho mención, el que enfrentó al Barça contra el Baskonia, hubo pañuelos en forma de protesta dirigidos a la directiva. Ahí estaba Rodrigo de la Fuente. ¿Culpable? De momento, no. La gestión hasta el momento ha sido, por decirlo así, correcta, aunque las lesiones le han obligado a trabajar de manera rápida y eficaz para conseguir jugadores que suplieran momentáneamente a los lesionados, actividad que no había sucedido en cursos anteriores. Se le puede criticar por haber tomado alguna que otra decisión errónea, pero haber traído a Rice y a Claver es un acierto, independientemente del rendimiento esperado o de la adaptación a los esquemas de Bartzokas. A nivel técnico, son dos jugadores muy cotizados a nivel europeo y haber conseguido sendos fichajes habla bastante bien de su eficiencia como director técnico. Pero claro, fichar a buenos jugadores no equivale a la consecución de títulos, porque a veces no existe ese bloque indispensable para lograr triunfos. 

8 fichajes esta temporada -sin contar el retorno de Diagné-. Bartzokas, Rice, Koponen, Claver, Holmes, Renfroe, Faverani y Munford. Es muy difícil emprender un proyecto con un entrenador nuevo y 7 fichajes más -algunos temporeros-. Es realmente complicado que el equipo funcione desde el primer partido con tantas caras nuevas siendo tan protagonistas. De hecho, el quinteto titular de la mayoría de partidos lo han formado 2 recién llegados: Rice y Claver, además de la intermitente presencia en el cinco inicial de Koponen. Uno de los fichajes, el técnico Bartzokas, también ha sido criticado por múltiples motivos: desde no cambiar a sus hombres titulares cuando no lo estaban dando todo hasta no contar con jugadores como Vezenkov o Eriksson -el primero ha tenido más oportunidades y las ha aprovechado de manera notable-. Ayer mismo, según desvelaba Catalunya Ràdio, el coach del Barça habría pedido que se multara a la plantilla -él inclusive- por los malos resultados del equipo. Este gesto es una declaración de intenciones por parte del heleno hacia sus pupilos: no quiere tirar la temporada estando en el mes de febrero todavía.

Con estos condicionantes, se antoja un año complicado en Can Barça, aunque es hora de hacerse la pregunta más importante: ¿está todo perdido?

¿ESTÁ TODO PERDIDO?

Rotundamente, no. Puede que los aficionados vean futuro o no en este proyecto, pero a día de hoy es imposible decir que el Barça está tocado y hundido. Y no hace falta basarse en especulaciones, sino en el mero formato de las competiciones que disputa. Por un lado, la más cercana: la Copa del Rey. Aun habiéndose clasificado como octavo, tendría las mismas opciones que el primero de llevarse este trofeo, por lo que sigue vivo como cualquier otro equipo que dispute la Copa.

Por otro lado, en Euroliga, este año ha cambiado la dinámica y el todos contra todos ha derivado en una liga regular que premia, como el propio nombre indica, la regularidad. Así que los de Bartzokas pueden haber jugado estrepitosamente mal, que con clasificarse como octavos ya les vale para estar entre los 8 mejores. Otro tema es qué rival les toque. Por último, los Play Off de la Liga Endesa, cuyo formato es por todos conocido.

Como dato a añadir, el FC Barcelona Lassa solo lidera una clasificación como equipo -el porcentaje en tiros de 2, un 60'5- de las múltiples clasificaciones que hay: mejor ataque, mejor defensa, rebotes, asistencias, recuperaciones, faltas recibidas, y un largo etcétera. Por ahí podrían surgir otras claves que darían de que hablar: las pocas asistencias que se reparten, las malas defensas que realizan en numerosos partidos o la mala selección de triples lanzados en un encuentro. También se debe hacer referencia al nivel que están demostrando jugadores como Perperoglou, quien ha pasado de ser un hombre por momentos decisivos a costarle entrar en su rol anterior. Pero el problema no surge por un jugador en particular o por el entrenador, el problema es que a veces parece que no sean capaces de remontar partidos, y calidad tienen de sobra. La última palabra la tiene este núcleo de jugadores que debe encontrar ya la tecla para convertirse en candidatos a todo lo que se les ponga por delante.