La gran sensación de esta temporada para Movistar Estudiantes, al menos en su inicio, es Sylven Landesberg. El exterior de Queens está destacando por encima del resto en la vuelta del Estu a Europa, pero sobre todo traspasa la atmósfera del equipo el dominio que está ejerciendo en la Liga ACB. Con 18,3 lidera actualmente en puntos la competición nacional española.

La comparativa con Edwin Jackson, por la referencia que suponen para el equipo, por el modo en que le buscan en ataque, es difícil de calibrar. Maldonado lo dejó claro antes de comenzar la temporada: "No buscamos un nuevo Jackson". Se hicieron con Landesberg, que inevitablemente cubre una parte de esa parcela que dejó vacía el francés, pero el plan era integrar más al resto de compañeros.

Las exhibiciones de Landesberg han ayudado en gran medida a derrotar en Liga Endesa al Barça (13 puntos en el 3º cuarto) y al Betis (26 puntos en la 2ª parte), además de contribuir también con grandes partidos ante San Pablo Burgos (ACB) y AEK (BCL).

La afición colegial está rendida al '15'. Pero, ¿quién es Sylven Landesberg?

youtube://v/vN0cwtHEyXU

Israel, su todo

Nacido en Nueva York, en el barrio de Queens, la mayor parte de la maduración de Sylven como persona pasa por Israel. Su madre es de Trinidad y Tobago, pero su padre es judío y fue el que le impulsó a abrazar el país hebreo como forma de vida. Allí es donde se hizo un nombre.

Estudió en Nueva York hasta la etapa de high-school, tras la que cambió de aires. Sus padres y él decidieron trasladar al chico a la Universidad de Virginia, que según ellos tenía más nivel que la de St. John's. Destacó a nivel nacional tanto en instituto como en universidad, pero su sueño de llegar a la NBA no se cumplió.

En 2010, con 20 años, se quedó fuera del draft. Era momento de cambiar. El que su padre sea judío le otorga automáticamente la nacionalidad israelí, lo que hizo más fácil que saltara a Oriente Próximo para comenzar su andadura profesional. Fue en el Maccabi Haifa.

El soldado

Aquel año, mientras España celebraba el Mundial de fútbol, Landesberg se iniciaba en el Aliyah (proceso legal para que se te conceda la nacionalidad israelí).

Comenzaba "toda una experiencia de vida, de la real", como él mismo define. A su edad, debía pasar las pruebas paramilitares para poder acceder a la ciudadanía, era parte del proceso. "En aquel momento tenía sentido hacerlo", asegura.

Una de las últimas misiones para la Fuerza de Defensa de Israel fue una excursión al bosque. Estuvo cuatro días en los que sólo fue una vez al baño. "Nos enseñaron a abrir una lata de atún con la correa del perro, a disparar el arma… Fue de locos. Cuando volvía a casa, les dije a mis amigos que no hubieran sobrevivido", indica.

Tras completar el procedimiento básico de seis semanas, se enroló en la FDI. Ya era soldado de facto. Su carrera podía continuar ya sin esa presión.

Se acabó la infrautilización

La verbena en la que se ha convertido Maccabi Tel Aviv en los últimos años es de calado internacional. Un clásico que busca encontrarse a sí mismo. De este equipo se desvinculó Sylven Landesberg este verano para recalar en Estudiantes. Tenía contrato en vigor, pero la falta de oportunidades le hacían creer que podría progresar más en otro sitio. Y así está siendo.

Pese a destacar en el uno contra uno, del que saca ventajas tanto en cuerpeo como en velocidad, en Tel Aviv le dejaban como tirador especialista. A una esquina y a tirar. Su mecánica es cartesiana, pero dejarle solo para ese menester era desaprovechar un talento.

Zan Tabak (que le entrenó en Israel) explicaba en el Estudiantes-Barça, para el que era comentarista de Movistar+, lo versátil que es: "Es un jugador con muchos recursos: desde fuera, en transición, en poste bajo… Tiene una facilidad importante para llegar a canasta".

youtube://v/KdTYMGwTtdA

Acierto en el Estu

En Estudiantes quiere lo máximo. Es su primera vez fuera de Estados Unidos o Israel y está como un niño con zapatos nuevos. Maldonado sí le está utilizando como debe, dándole protagonismo para que lidere los ataques.

Su vida en Madrid se reduce a no separarse de Omar Cook, referente por leyendas neoyorquinas y apoyo en el club, aprender a conducir por la ciudad y disfrutar de una nueva liga, la ACB, donde ya está brillando. "Yo voy a jugar con coraje e intensidad", admitía en pretemporada. Y lo está haciendo, pero también acompaña la calidad que atesora.

Si tanto él como el cuerpo técnico consiguen que la situación actual no se ligue a una "Landesberg-dependencia", Movistar Estudiantes tiene (como apostó Cook) a uno de los candidatos a MVP de la Temporada en la Liga Endesa.