Nacieron en 1980. Los dos han tenido pasado ACB habiendo dominado nuestra liga con autoridad y los dos están en el Top 5 de valoración por partido (Efficiency) en este inicio de temporada en la NBA. Aunque la carrera de Pau Gasol y Luis Scola tiene tantos paralelismos como diferencias, ambos jugadores dominan en la actualidad la mejor competición del mundo y son los grandes referentes de sus seleccíones. Están en la madurez de sus carreras deportivas. En ese punto donde la experiencia acumulada comienza a ser determinante sin que la edad aún sea un impedimiento para rendir al mayor nivel. Noche tras noche y partido tras partido los dos interiores dominan todos los aspectos del juego haciendo gala de un grado de conocimiento del baloncesto que pocos estadounidenses poseen.

Pau Gasol además está en el mejor equipo de la NBA y tras conseguir los dos últimos anillos está siendo el primer referente en ataque de unos Lakers invictos en este inicio de temporada y que están jugando aún mejor que cabe que el pasado año. El de Sant Boi está logrando sus mejores estadísticas individuales desde que llegara a la NBA. Promedia más de 24 puntos por partido, casi 11 rebotes y 5 asistencias en los siete encuentros que ha disputado hasta ahora y ya ha sido nombrado mejor jugador de la primera semana de la competición en la Conferencia Oeste. Aunque es muy pronto para realizar comparaciones esos números contrastan con sus estadísticas de otras campañas. En su última temporada en Memphis antes de que fuera traspasado a Los Ángeles y cambiara la historia reciente de la NBA, Pau Gasol promedió 20.8 puntos por partido, casi cuatro puntos por debajo que este año aunque en el apartado reboteador aún no ha alcanzado las 11.3 capturas con las que acabó la pasada temporada. Además ninguna temporada ha alcanzado 5 asistencias por encuentro como este año aunque estos guarismos son en parte producto de su último gran partido ante los Portland Trail Blazers donde ha conseguido su cuarto triple doble de su carrera con 20 puntos, 14 rebotes y 10 asistencias en sólo 34 minutos. Además el de Sant Boi lidera el apartado estadístico denominado Efficiency (similar a la valoración en la NBA), lo que demuestra que en lo que llevamos de liga ha sido el jugador más completo de toda la NBA. No se trata de mirarse el ombligo si no de datos objetivos que demuestran que un jugador nacido en Sant Boi de Llobregat es el jugador más en forma de la NBA.

Luis Scola por su parte no puede estar tan contento en el apartado colectivo a pesar de que esta madrugada han conseguido por fin su primera victoria en los seis encuentros que llevan disputados ante uno de los conjuntos llamados a volver a estar de nuevo en lo más bajo de la clasificación, los Minnesota Timberwolves. Aún así, los números del ala pívot argentino son de jugador All Star. 22.5 puntos y 12.3 rebotes por partido para mejorar con creces sus números de pasadas temporadas y consagrarse como uno de los mejores jugadores interiores de la NBA. Tras haber realizado un grandísimo Mundial con la Selección Argentina, Luis Scola quiere luchar por estar entre los jugadores más valorados de la NBA a pesar de no contar con el apoyo mediático de otros jugadores. Los números de su equipo tampoco ayudan pero como también hemos dicho con Gasol, el inicio de temporada puede ser sólo el impulso para su consagración en la NBA. A sus grandes movimientos en el poste Scola posee un tiro de media distancia cada vez más efectivo y sigue siendo un gran reboteador a pesar de que sus 2.06 compiten contra jugadores más altos y corpulentos

En el único partido que les ha enfrentado hasta ahora los Lakers vencieron en un apasionante encuentro (112-110) con protagonismo de Scola y Gasol en los minutos decisivos y acabando los dos con un doble-doble. El catalán se fue a los 29 puntos y 11 rebotes mientras que el jugador nacido en Buenos Aires consiguió 18 puntos y 16 rebotes. El próximo duelo entre ambos "hispanos" será el próximo 1 de diciembre y será una nueva oportunidad para ver en acción frente a frente a dos dos de los mejores extranjeros de la competición estadounidense.