Hablamos con Javier Saurin, licenciado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, entrenador personal en Virgin Active y Entrenar.me, y que entre otros, ha llevado la preparación física de El Pilar de Valencia.

Como entrenador personal y que está habituado a trabajar individualmente o colectivamente con profesionales del mundo del deporte, ¿qué reticencias suelen mostrar sus clientes? ¿A qué están dispuestos y a qué no?

Normalmente están dispuestos a todo lo que les propongas, ya que saben que es positivo para mejorar su rendimiento. Sin embargo, siempre hay ejercicios con los que disfrutan más que con otros durante el entrenamiento. En general, el trabajo de resistencia es el menos gratificante para ellos.

Sabemos que acumula una larga experiencia como preparador físico especializado en baloncesto, ¿qué tipo de trabajo se prepara específicamente en este deporte y que difiere de otros deportes?

En mi opinión, lo más importante en el baloncesto es la resistencia a esfuerzos de alta intensidad, ya que la gran mayoría de las acciones del juego se realizan de forma muy rápida y explosiva, con poco tiempo de recuperación mientras el balón está en juego.

En otros deportes con espacios de juego más grandes, o en los que los ataques posicionales son más estáticos y los tiempos más largos, no se da esta característica de forma tan importante.

El jugador de baloncesto, por la propia dinámica del juego, suele forzar mucho las articulaciones tanto del pié como de la rodilla ¿qué tipo de entreno debe llevarse para evitar las sobrecargas, las lesiones tendinosas y por supuesto los esguinces? ¿Cómo desde la formación de un entrenador puede hacerse una prevención de este tipo de lesiones?

Existen muchas acciones durante el juego que provocan cargas articulares importantes, como los saltos, las arrancadas, las frenadas y los desplazamientos laterales.

Para evitar y prevenir lesiones, es muy importante trabajar estas acciones con seguridad, evitando malas posturas en rodilla y tobillo principalmente, ya que son las articulaciones más castigadas. La inestabilidad de rodilla y una limitada flexión dorsal de pie son una de las principales causas de lesión en el baloncesto.

Los entrenadores deberían de prestar una mayor atención a esto, ya que no se suelen preocupar de que la ejecución de los ejercicios se realice sin riesgo para la salud del deportista, la mayoría de veces por desconocimiento del peligro.

Incluir talleres de prevención de lesiones en los cursos de entrenador puede ser una buena opción para que los entrenadores vayan tomando conciencia de la importancia sobre este aspecto del deporte.

Los entrenadores personales forman parte del grupo de  trabajo que puede comportar la optimización del rendimiento de un atleta, jugador o deportista ¿existe una tabla de ejercicios, un patrón concreto que permita lograr los objetivos buscados? ¿Qué importancia, aunque parezca una incongruencia, tiene el descanso en la preparación física?

Actualmente la individualización es la clave del éxito. Cada deportista tiene unas necesidades diferentes, por su propia anatomía y morfología, y nuestro trabajo es hallarlas y explotarlas al máximo, para mejorar su rendimiento. Por ello no se puede trabajar con tablas de ejercicios o patrones generalizados, ya que no siempre serán una garantía de éxito.

El descanso, el entrenamiento y la alimentación son los tres pilares del éxito deportivo. Sin un buen descanso la musculatura no llega a adaptarse al entrenamiento de forma adecuada, disminuyendo las mejoras, y provocando en el peor de los casos estrés y síntomas de fatiga nerviosa o sobreentrenamiento.

Y el gimnasio, ¿es un complemento, un aliado, o bien un sustituto o competencia? ¿Qué aporta trabajar al aire libre?

En un deporte como el baloncesto, de tanta exigencia física, tener una musculatura capaz de soportar tantos impactos y cargas externas ayudará a prevenir lesiones y a mejorar el rendimiento. Sin duda, el gimnasio es un gran aliado que nos ayuda a complementar el trabajo de pista, con el trabajo de fuerza más específico, aunque es muy importante cuadrar las cargas de trabajo para que no tenga efectos adversos.

Acerca del entrenamiento al aire libre, me parece muy oportuno en algunas sesiones de pretemporada, o cuando hay mucha tensión acumulada por estrés competitivo u otros motivos. Ayuda a relajar a los jugadores, ya que cambian su entorno, acostumbrados siempre a trabajar dentro de una instalación deportiva.

Las lesiones y también el entorno familiar o de amistades han sido muchas veces causa de que grandes promesas del mundo del deporte no pasaran simplemente de eso, promesas, ¿Cómo enfocan ustedes el aspecto motivacional en adolescentes y jóvenes? ¿Se trabaja diferente?

Pienso que el aspecto motivacional tiene que venir desde la propia práctica deportiva, disfrutarla. Básicamente es lo que se intenta transmitir, en todas las edades.

Cuanto más intrínseca sea la motivación más difícil será que se vea afectada por factores externos.

La hidratación y la nutrición aún hoy en día parecen los hermanos menores de todos aquellos componentes propios para el éxito deportivo, ¿aparte de la exigente preparación física, entre sus labores también está la de divulgar aquellos aspectos que forman parte de la salud, ya sea el tema alimentación, psicología, calzado, etc…?

Sí, aunque es una pelea difícil de ganar. Continuamente veo malos hábitos en niños y adolescentes, ya que generalmente consumen cantidades desorbitadas de azúcar, y apenas comen frutas y verduras, esenciales para una buena alimentación. Es una parte de la educación a la que no se le está dando la importancia necesaria.

Respecto a la hidratación suele haber más conciencia en la sociedad, y no se observan casos tan alarmantes de malos hábitos.

¿Cómo se mide la progresión de la persona a entrenar, del deportista? ¿En qué punto se acaba la progresión y debe hacerse un trabajo de mantenimiento?

Normalmente la evolución se mide mediante la evaluación del rendimiento en el juego, con registros estadísticos, porcentajes, observación, plantillas de datos, etc. La condición física se evalúa con tests físicos adaptados al deporte.

Usted, que juega ocasionalmente al baloncesto y ha entrenado a varios equipos, sabe que la vida cotidiana no está pensada para personas tan altas (lavabos, duchas, luces, puertas, camas, coches, escobas, máquinas de refrescos, etc. ¿preparan ustedes físicamente a estos deportistas para evitar dolores lumbares o dorsales por culpa de esa altura contraria a los objetos cotidianos?

Una buena higiene postural en las actividades cotidianas puede prevenir más de un problema, sobretodo en la zona lumbar, que suele ser la que más se carga con flexiones de tronco innecesarias.

La posición para dormir también es de gran importancia, ya que afecta a la calidad del descanso, y una posición nociva durante unas 7-8 horas diarias provoca molestias y la aparición  de posibles lesiones evitables.

Sobre este tema doy consejos habitualmente, e incido mucho en la correcta técnica del SQUAT o sentadilla, ya que es muy útil para prevenir carga lumbar en la gran mayoría de gestos cotidianos y además trabaja la musculatura de muslos, caderas y glúteos.