Clubes que desaparecen, el mítico Aleksandr Volkov en paradero desconocido, éxodo de jugadores norteamericanos, equipos que deben disputar sus compromisos europeos fuera de su país … la crisis política que vive Ucrania está teniendo dramáticas consencuencias sobre el basket de aquel país. El último efecto nocivo de la inestabilidad social y del clima prebélico que vive este Estado que formaba parte de la extinta Unión Soviética es la posibilidad de que la FIBA decide trasladar el Eurobasket 2015, del que Ucrania iba a ser su anfitrión, a otro país. Una cita clave, ya que en este evento se repartirán las plazas correspondientes al viejo continente de cara a los JJOO de Río 2016.

FIBA Europa se reunirá el próximo mes para analizar la situación y tomar una decisión en torno al cambio de sede de este Eurobasket 2015. El problema es que Ucrania ya ha desembolsado alrededor de la mitad de la cuota por organizar este evento (dos de los alrededor de 4 millones de euros) y esta cantidad debería ser devuelta en caso de cambio de escenario. De momento, ya han surgido "novias" para poder coger el testigo de Ucrania. Entre ellas, destaca Polonia. En declaraciones a medios de aquel país, el Presidente de la Federación polaca de baloncesto, Grzegorz Bachanski, ha sugerido la posibilidad de coorganizar junto con la República Checa y Ucrania este Eurobasket, dejando en manos del país originariamente anfitrión acoger uno de los grupos en liza. Tal y como señala la web Sportando, Francia, Alemania, Austria y Croacia habrían mostrado también su interés en participar en la organización.