ACTUALIZACIÓN: SASHA DJORDJEVIC, DESTITUIDO COMO ENTRENADOR DEL PANATHINAIKOS.
O A K A Z O 2.0: Dícese de cómo el Baskonia vuelve a clasificarse para una Final Four, ocho años después, volviendo a ganar al Panathinaikos en su cancha de Atenas repitiendo la épica de diez años antes y siendo el denominador común de ambos hitos el nombre del entrenador azulgrana, Velimir Perasovic.
Si la gloria tiene un sabor, ese es sin duda el que Mike, Mamadou, Fabien, Darko, Adam, Ioannis, Jaka, Ilimane, Kim, Darius, Alberto, Davos y Tornike están saboreando esta noche en sus bocas. Un equipo por el que nadie daba un duro en septiembre ha revolucionado el panorama de la Euroliga. Por si salvar el grupo de la muerte del Top16 en segundo lugar no era suficiente, un 3-0 en el Top8, con victoria en el Oaka de Atenas incluida, es la guinda del pastel. "Peras" ha construido un equipo, un grupo humano, mentalmente indestructible; ese es su mérito. El plantel liderado por un Bourousis al que casi todos dábamos por medio jubilado y una dupla de bases, Adams y James, que creaban más dudas que esperanza, no solo ha dado un paso adelante, si no que ha pasado a la historia del Baskonia con letras mayúsculas. El próximo reto, Berlín. El 13 de mayo será, para todos los baskonistas, un día para disfrutar y seguir soñando.

Ahora mismo, para cualquier seguidor gasteiztarra, el partido vivido en Grecia es lo menos. Curiosamente, el choque comenzaba con una canasta de quien sería su ejecutor final, Darius Adams. Tras el enceste inicial Panathinaikos mostraría su mejor cara reaccionando con un 8-0. Sería uno de los pocos momentos en los que el cuadro de Djorjevic apretará de verdad. Porque todo sea dicho, el Baskonia ha jugado la mayoría de los minutos con cierta calma. Ni el PAO ha mordido tanto, ni el Oaka se ha mostrado tan fiero como antaño. Con mucha paciencia, clave en el planteamiento de Perasovic durante todo el partido, Baskonia no ha perdido la cara al partido y, tras ponerse delante de nuevo 13-15 a falta de 2:30 para final del cuarto gracias a una canasta de Adams, ha cerrado el cuarto con su máxima ventaja hasta ese instante tras un triple de Bertans: 17-20. El primer paso para cerrar la eliminatoria estaba dado.

El segundo cuarto empezaba con un paso adelante del veterano Fotsis. Dos canastas suyas daban la vuelta al marcador en lo que terminaría siendo un espejismo. Tras abrir su parcial con una canasta de James, Laboral Kutxa tomaría el control del partido hasta lograr los 10 puntos de ventaja a 3:20 del descanso, 28-38. Dos tiros libres de Bertans parecían romper definitivamente el encuentro y predecían una victoria azulgrana en Atenas. Aun así, un mito viviente del baloncesto europeo aun no había dicho su última palabra. En el que a la postre sería su último partido de Euroliga, Diamantidis ha vuelto a echarse a su equipo a la espalda. Un triple suyo ha sido el que ha dado esperanzas a la hinchada local al reducir a cinco la desventaja al final del segundo cuarto: 37-42. Baskonia seguía acariciando la gloria, pero aun quedaba mucho por jugarse.

El tercer cuarto ha sido el más disputado. En menos de tres minutos, PAO empataba el partido de la mano de su estrella Elliot Williams: 44-44. Fueron los minutos más duros del encuentro. Los seguidores griegos volvían a creer en la victoria e impregnaban al equipo de una intensidad que no terminaban de mostrar. Aun así, los de Djorjevic no consiguieron ponerse delante en el marcador más que en dos ocasiones, e incluso no fueron capaces de irse delante al final del cuarto. Cuatro puntos seguidos de un bregador Planinic dejaban a los gasteiztarras arriba en el marcador a falta de diez minutos: 55-56.

El último cuarto fue la hecatombe. 28 puntos, 7 triples y una victoria para la historia. Tres triples de Adams, dos de James y sendos triples de Bourousis y Corbacho (17 minutos hoy, con 6 puntos y 2 rebotes para 8 de valoración y, sobre todo, una labor defensiva llena de intensidad) han destrozado al Panathinaikos. Djorjevic no ha sabido parar a Adams y James en toda la eliminatoria y esa ha sido su tumba. 44 puntos, 10 rebotes, 5 asistencias, 7 triples y 50 de valoración entre ambos al finalizar el encuentro: 24 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias para 27 de valoración Darius Adams y 20 puntos, 6 rebotes y 2 asistencias para 23 de valoración Mike James. Ellos han revolucionado, maniatado y destrozado el encuentro en el último cuarto. Triple a triple, la moral del PAO ha quedado reducida a cenizas hasta el punto de que el último minuto (al que se ha llegado con el casi definitivo 73-84) ha sido más un homenaje a Diamantidis que una lucha real por el partido. Al final, 75-84 y una nueva Final Four para el Laboral Kutxa Baskonia. ¡A la quinta va la vencida!