Nadie duda del ilimitado talento de Nemanja Bjelica (2.08/27 años), el jugador serbio de la eterna cara de póker y de la sonrisa inexistente. Sin embargo, pasaban los años y parecía que el balcánico era incapaz de explotar como jugador de primer nivel, capaz de reinar en Europa. Tras darse a conocer en el Estrella Roja, pasó por nuestro baloncesto defendiendo la camiseta de Laboral Kutxa (2010-13). En Vitoria-Gasteiz dejó un sabor agridulce, siempre a la espera de su eclosión final. El curso pasado fue traspasado al Fenerbahce, equipo en el que, en su segundo año, ha alcanzado ese nivel de excelencia que distingue a las estrellas de los grandes jugadores.
De la mano maestra de Zelkjo Obradovic, Nemanja Bjelica ha madurado en su juego, convirtiéndose en el mejor cuatro abierto de toda Europa. Con sus 11.9 puntos, 8.6 rebotes, 1.9 asistencias y 1.3 robos de balón en la presente campaña, ha sido merecedor del MVP de la Euroliga, por delante del resto de jugadores integrantes del Quinteto Ideal de la competición, nada menos que Milos Teodosic, Vassilis Spanoulis, Felipe Reyes y Boban Marjanovic.