El partido arrancaba como los buenos combates de boxeo, con mucha tensión y ambos rivales midiéndose mucho. Los nervios y lo trabado del encuentro dejaban el marcador sin estrenar más de dos minutos hasta que Moussa Diagne arrancaba los dos primeros tantos en la pintura, una acción que le daría buenos resultados ante la mala defensa interior de San Pablo Burgos.

Precisamente fue Diagne el factor diferencial entre dos equipos con muy malos porcentajes de tiro y excesivos fallos en ataque, con una anotación tan baja que cada punto valía oro: hasta 4 minutos tardó San Pablo Burgos en estrenar su marcador, pero Morabanc Andorra apenas había conseguido 4 puntos.

El partido estaba muy trabado, tanto por los errores como por circunstancias del partido que detuvieron el ritmo, como el mate de Reggie Upshaw tras el que se cayó mal y necesitó unos minutos para reicorporarse al partido. Bruno Fitipaldo conseguía anotar de 3 y dar la primera ventaja a los locales (7-6).

Morabanc consiguió remontar el vuelo buscando puntos fáciles y con un triple de Michele Vitali que supuso el 7-14 en el marcador, una enorme ventaja teniendo en cuenta el ritmo del encuentro. Finalmente, Paul Zipser anotaba un mate bajo canasta a pase de Dominique Sutton para dejar el definitivo 9-14, con un San Pablo Burgos que salió vivo del cuarto a pesar de su 20% de acierto en tiros de campo… y 11% (1/9) en triples. Por parte de Morabanc, los 9 puntos de Diagne compensaban las 5 pérdidas del conjunto andorrano.

En el segundo cuarto, San Pablo Burgos parecía decidido a corregir errores. La defensa interior mejoró bastante y el juego que intentaba Álex López, ahora a los mandos, era más fácil. Sin embargo, pese a la mejoría, los puntos seguían sin llegar y Vitali recogió el testigo de referente ofensivo.

16-22 llegó a reflejar el electrónico del Coliseum Burgos hasta que Goran Huskic volvió a cancha para cambiar el signo del partido. Jugando muy concentrado y aprovechando su movilidad, organizó al equipo, anotó y logró sacar varias faltas a sus defensores: Jerome Jordan acabó la primera mitad con 3 y Moussa Diagne con 2.

Ante el ritmo de Huskic, los de Ibon Navarro comenzaron a ponerse nerviosos y cometer algunos errores, como faltas en ataque innecesarias o una falta sobre Dominique Sutton en una presión a toda cancha en la que Rafa Luz se excedió demasiado.

Poco a poco, San Pablo Burgos mejoraba sus sensaciones en ataque y cerraba el cuarto con 30-24, quizá una ventaja excesiva atendiendo a su juego, pero que hablaba del cambio que había sufrido el partido.

La segunda parte trajo consigo la consolidación de San Pablo Burgos como dominador del marcador, con un excelso Goran Huskic, que llegó a anotar dos triples, pero con la misma tónica por parte de ambos conjuntos: las pérdidas de Morabanc Andorra compensaban los fallos en el lanzamiento de los locales. 

Sin embargo, Ibon Navarro encontró en Andrew Albicy el clavo al que sostener a sus jugadores frente a un marcador que podía ser definitivo. El francés anotó los dos tiros libres de una antideportiva que cometió Bruno Fitipaldo y después castigó desde el triple. Esos 5 puntos en apenas unos segundos metieron en el partido a los andorranos con 45-35 en el marcador.

Comenzaba a despertar Morabanc Andorra y a reducir la diferencia mediante tiros libres y pérdidas del San Pablo Burgos. Con 45-39, Vitor Benite anotaba un triple imposible, acrobático y sobre la bocina para a los pocos segundos anotar otro tras agotar el tiempo restante para el cuarto, tras un gran mate de Jerome Jordan. El marcador: 51-41 pero todo por decidir en el último cuarto.

Y este último cuarto fue el de apagar fuegos para San Pablo Burgos… con un Morabanc Andorra que no se rendía en ningún momento. Los de Navarro salieron a jugar muy rápido, con posesiones cortas y presionando la línea de pase de los locales.

Rafa Luz anotaba  desde fuera para después volver a ver canasta con una bandeja a aro pasado, aumentando la presión sobre los burgaleses. 9-0 de parcial para ellos, con Jerome Jordan mandando con autoridad en la pintura y acudiendo con regularidad a la línea de tiros libres.

Los burgaleses trataban de poner calma al juego, pero Reggie Upshaw no se lo iba a poner tan fácil: triple y marcador a una canasta de distancia (56-53). Los azulones seguían manteniendo la distancia y un triple de Fitipaldo a 2 minutos parecía frenar las acometidas de los andorranos, seguido de otro de Cancar.

Sin embargo, Albicy y, de nuevo, Upshaw, reducían distancias. El estadounidense salía de la nada para recoger en el aire un triple fallado por Vitali y hacer un mate espectacular a falta de 24 segundos. 64-62 y bola para Burgos.

Branden Frazier forzaba una falta a la carrera y anotaba los que serían los últimos puntos del encuentro. Con 20 segundos, los de Navarro intentaron anotar pero les fue imposible mover el 66-62 que fue definitivo, con una revisión por un fuera de fondo incluído.

Marcador justo, que refleja la igualdad de ambos conjuntos sobre la cancha, con un San Pablo Burgos que supo reponerse del mal juego inicial y un Morabanc Andorra que no encuentra premio a pesar de no darse nunca por vencido.