Jornada de contrastes en la ACB. Pocas horas después de que CB Granada certificará su descenso a la Adecco Oro, Menorca Básquet ha logrado seguir manteniendo la esperanza de la salvación tras vencer por 71-65 a Assignia Manresa en un partido tenso y duro. Ahora todas las esperanzas de los de Paco Olmos pasan por vencer en los dos partidos de fase regular que restan y esperar que Assignia Manresa pinche en sus compromisos.

Esta fue la victoria del colectivo (5 hombres por encima de los 10 puntos anotados en Menorca Básquet). Más que nunca, los de Paco Olmos completaron una gran labor de equipo, realizando cada pieza su función en la cancha. 

Las cosas no empezaron bien para los locales (0-10 de parcial inicial para los manresanos). Los nervios y la tensión podían con los jugadores de Menorca Básquet. Sin embargo, el aumento de la intensidad defensiva y varios triples igualaron el marcador, que reflejaba un empate a 18 al final del 1º periodo.

Según pasaban los minutos, los locales se venían arriba y los manresanos, cuesta abajo. El 2º periodo tuvo un claro colo menorquín. Así, Menorca Básquet se iba al descanso con un esperanzador 34-25.

Durante la segunda parte, los locales amenazaron con romper el partido en varias ocasiones, pero la resistencia del mejor Román Montañez de la temporada (26 puntos y 3 rebotes) lo impedía. Los catalanes incluso se llegaron a poner a 3 puntos cerca del final del choque (62-59, min. 38). Se presentaba un final de partido de alta tensión, que se cerró definitivamente con una falta antideportiva de Sergiy Gladyr sobre el gladiador Urko Otegi (10 puntos y 6 rebotes), que supuso el fin de las esperanzas de victoria de su equipo y certificó la victoria local.