Buen ritmo anotador en los primeros compases del choque, con puntos a través de bandejas y canastas de media distancia y sin anotación exterior. El Granca con los problemas ofensivos que arrastra desde la pretemporada, que se traducen en demasiadas pérdidas (6 en los primeros 7 minutos) y tiros sin ventaja. Los ajustes defensivos, la entrada de las segundas unidades y estos errores en ataque, provocaron que el ritmo anotador decreciese. Andorra estaba por delante por su mejor selección de tiro porque en el apartado que afecta al control del balón tampoco estaban precisos (14 a 19).

Un par de transiciones rápidas y el primer triple del partido (Costello) dieron al Granca una mínima ventaja, después de endosarle a su rival un parcial de 8 a 0, con Cook distribuyendo mejor el juego. Andorra basaba todo su juego ofensivo en Hannah y Todorovic y estaban pasando por su peor momento, también por la mejora defensiva del Herbalife. El parcial era ya de 17 a 2 y el Granca estaba jugando a su mejor nivel de la temporada. Ibon Navarro no encontraba una referencia ofensiva y tuvieron innumerables problemas para atacar a la sólida defensa local (38 a 33).

Dos triples (Shurna y Harper) y la sequía anotadora de Andorra provocaron que la ventaja del Granca siguiera aumentando (52 a 39). El tiempo muerto de Ibon Navarro en el ecuador del cuarto acabó con tres cambios (entraron Hannah, Jelinek y Todorovic) que dieron otro aire al ataque andorrano, recompensado con un parcial de 0 a 13. Ahora era el Herbalife al que no le salía nada en ataque, coincidiendo con un quinteto de suplentes y una sucesión de ataques deslavazados (54 a 52).

La dupla Harper / Burjanadze apareció, en el peor momento ofensivo de su equipo y lanzó de nuevo a un Herbalife, que había visto recortada su ventaja en el último tramo del tercer cuarto. El georgiano, con catorce puntos y gran intensidad defensiva fue el líder de la reacción amarilla, coincidiendo con la presencia de Radicevic en la dirección de juego y Bourousis en el cinco. Andorra no supo como igualar la intensidad del rival, en este momento complicado y los amarillos aprovecharon la inercia para arrollar.