Sucedió hace dos temporadas, pero queda lejísimos. Los entonces Bobcats de Larry Brown conseguían por primera vez en su historia clasificarse para los playoffs tras conseguir, también, su primer balance ganador de su corta historia (44-38). Gerald Wallace, Stephen Jackson, Tyson Chandler o Raymond Felton jugaron a un gran nivel. Dos temporadas después ya no queda ninguno de ellos y el nefasto presente, con un balance de 7-43, vuelve a sembrar de dudas el futuro.

Con todo perdido y con un pequeño margen por ganar, Paul Silas ha tomado una decisión cuanto menos sensata y que tal vez podía haber adoptado con anterioridad. A partir de ya, los jóvenes tendrán todo el protagonismo en la plantilla, como se desprende de unas declaraciones a la agencia AP, recogidas por el portal sport.yahoo.com. "Lo que quiero ahora mismo es ver cómo juegan estos chicos".

Los grandes beneficiados serán:

  • Kemba Walker (rookie): 12 puntos, 4.2 asistencias, 3.3 rebotes y 26 minutos por partido.
  • Byron Mullens (3 temporadas): 9 puntos, 4.5 rebotes, 0.8 tapones y 20 minutos por partido.
  • Bismack Biyombo (rookie): 4.6 puntos, 5.6 rebotes, 1.8 tapones y 20 minutos por partido.
  • Reggie Williams (3 temporadas): 8.9 puntos, 2.9 rebotes, 2 asistencias y 23 minutos por partido.
  • Derrick Brown (2 temporadas): 7 puntos, 3 rebotes, 1 asistencia y 20 minutos por partido.

Algunos como el ex jugador del Fuenlabrada, Bismack Biyombo y el ex del Baskonia, Reggie Williams, han ido creciendo en número de minutos. Otros, como Byron Mullens, tuvieron un inicio muy esperanzador que se fue diluyendo conforme transcurrían las frenéticas jornadas sin casi descanso.

Actualmente el equipo atraviesa por la segunda peor racha de la temporada (7 derrotas consecutivas), lejos, eso sí, de los 16 partidos sin ganar que acumularon entre enero y febrero. Son el equipo que pierden por un margen más amplio en esta liga (13.1), el segundo peor de la historia sólo superado por los Dallas Mavericks de la temporada 92-93. En aquel equipo -que arrojó un balance de 11-71- jugaban Mike Iuzzolino, Terry Davis, Sean Rooks, Randy White…Todavía no había llegado Popeye Jones, que aterrizaría la temporada siguiente.

Con este panorama el trabajo se antoja tan duro que esta decisión adoptada por Silas puede quedarse en una mera anécdota.

La política, que todavía sigue sin dar sus frutos, seguirá siendo el reclutamiento de jóvenes valores vía draft ya que no han conseguido atraer a ninguna gran estrella. Este verano volverán a intentarlo.

Jordan no quiere vender

El propietario de los Bobcats negó los rumores aparecidos recientemente en el periódico  New York Daily News donde se especulaba con la posibilidad de que Jordan vendiera la franquicia. A pesar de su terrorífico balance, Michael Jordan aclaró de que está al ciento por ciento seguro de que no venderá la franquicia. El ex jugador de Bulls y Wizards cada vez está más integrado en la vida social de la ciudad y parece ser que la intención es consolidar a los Bobcats como una fuerza dentro del desarrollo social de la ciudad. La franquicia, sin embargo, pierde unos 10 millones de dólares cada año, según reveló un informe de la revista Forbes.