La noticia del fallecimiento de Craig Sager ha sacudido la NBA desde sus cimientos, el carismático y dicharachero periodista de TNT había perdido su batalla contra la leucemia, y a los 65 años de edad decía adiós a la vida.
Craig Sager fue durante 30 años uno de los rostros más reconocidos de la NBA, sus mordaces entrevistas, y su siempre divertida vestimenta, llenaban de momentos únicos sus apariciones. En 2014 se conoció su enfermedad, y el comienzo de su incansable lucha contra el cáncer. Ya entonces, el impacto de la noticia dio la vuelta al mundo y la NBA en pleno se volcó en mostrarle su apoyo.
Aquel anuncio, en abril de 2014, y el posterior comienzo con el tratamiento, le mantuvo alejado de las canchas durante casi una temporada entera. Los médicos le auguraban de 3 a 6 meses de vida, pero su mensaje fue claro: “Les pregunté a los médicos qué opciones tenía, cuánto iba a vivir, cuánto me quedaba, si había cura… Me dijeron que cada persona es totalmente diferente, que con la leucemia no se podía establecer un patrón. Entonces les dije que sabía todo eso pero que tenían que decirme cuánto tiempo me quedaba realmente, y me contestaron que lo normal era que de tres a seis meses. Quiero ser el primero que venza esas estadísticas. Les dije que iba a hacer historia en medicina, que me quedaba mucho por hacer y que yo sería ese tipo que viviría cinco años”
El tratamiento con células madre y los cuidados que había recibido parecían haber hecho remitir la enfermedad. Y Sager, todo él positivismo, volvió a enfundarse una de sus locas chaquetas y otra de sus coloridas corbatas, y volvió a la NBA para volver a llenar de color la mejor liga de baloncesto del planeta.
A su vuelta a las canchas, los mensajes de apoyo no dejaron de crecer, estrellas como Kobe Bryant, Lebron James o Kevin Durant, entre otros, quisieron mostrar su apoyo y cariño al periodista. Pero sin duda, la reacción que más sorprendió fue la de Gregg Popovic, el entrenador de los San Antonio Spurs es conocido por su mala relación con los medios de comunicación, y sin embargo dejó una escena que emocionó a muchos.
Oh, ha muerto Craig Sager
Recuerdo el año pasado sacándole una sonrisa (y una respuesta!)a Popovich cuando volvía de otra convalecencia pic.twitter.com/b1PGWfcAYT
— Chin (@kikechin) 16 de diciembre de 2016
Sin embargo, el pasado marzo la noticia volvía a sacudir los cimientos de la liga, la leucemia había vuelto, más virulenta y cruenta que antes. Sager no se hundió, no entraba en sus planes, tocaba luchar de nuevo, ésta vez con más ahínco. Pero ésta vez el cáncer no iba a darle otra oportunidad, y en el día de ayer el mundo fue consciente de su adiós definitivo.
"Craig fue tan esencial para la NBA como los jugadores y entrenadores", destacó en un comunicado el comisionado de la NBA, Adam Silver. "Se nos ha ido un gran amigo y un excelente profesional".
Las muestras de cariño en el día de ayer no se hicieron esperar, y una de las frases que representaban su filosofía de vida se viralizó:
“Time is simply how live your life”
Hoy, mientras el mundo llora su pérdida, merece la pena destacar su figura, y hacerlo desde el punto de vista de un guerrero indomable e inconformista, que con su sonrisa y su actitud estaba dispuesto a dar una lección al mundo. ¡Y vaya si la ha dado!
En su vuelta a las canchas tras el primer tratamiento, Sager dejó unas palabras que deberían conservarse a fuego en la retina de todos aquellos que están luchando contra el cáncer. En Chicago, la ciudad que le acogió durante su tratamiento: “Tengo mucho amor por mis Chicago Bulls. Normalmente no muestras mucho favoritismo por uno u otro equipo, pero ya que Chicago significa tanto para mí y estar de vuelta aquí, he tenido que mostrar mi cariño a los Bulls y a Chicago.” Poco después, un pequeño discurso plagado de esperanza caló hondo en los corazones de quienes le prestaron atención: “Nunca he tenido un mal día mentalmente, nunca. Fui siempre muy optimista, positivo, creí en mis doctores. Algunos días fueron peores que otro físicamente, pero siempre sentí que si hacía lo que me decían estaría bien. Ha tomado más tiempo del que pensé, porque tuve una infección muy grande y acabé con neumonía y cuando combinas neumonía con leucemia la gente empieza a hablar de probabilidad de muerte. No presté ninguna atención a eso. A lo mejor fui un poco ingenuo, pero no quería pensar en cosas negativas. Solo dije, ‘quiero volver’”
Sager perdió su batalla, pero su ejemplo de lucha quedará vívido para todos. Su talante, su saber estar y su manera de afrontar la batalla contra el cáncer deben ser ejemplo para todos. Hoy toca despedirse de Craig Sager, pero que su paradigma de combate no sea olvidado nunca.
Sager Strong.
Siempre recordaremos a un tipo tan peculiar como entrañable. Hasta siempre, Craig Sager. #Minuto0 pic.twitter.com/yJnTzmKOqk
— NBA en Movistar+ (@nbaplus) 16 de diciembre de 2016