New York Knicks es, desde hace más de una década, la franquicia más esquizofrénica de toda la NBA. En eterno estado de deriva, los jugadores vienen y van, las inversiones millonarios fracasan una y otra vez, sin que los resultados en la cancha no pasen de mediocres. La actual temporada no está siendo una excepción. A pesar de la adición de Tyson Chandler al dueto estelar Anthony-Stoudemire, el balance de los de la Gran Manzana es de 9-15. Los de D’antoni ofrecen una imagen realmente mala noche tras noche y la ansiada llegada de Baron Davis no parece que vaya a ser la solución para obrar el milagro y cambiar la tendencia.

En este panorama oscuro, no todo son malas noticias en el seno de los Knicks. En la victoria de los neoyorkinos ante los Nets (99-92) sobresalió un protagonisto inesperada, un jugador que no pasa desapercibido por sus características e historial. Nos referimos a Jeremy Lin, que firmó su mejor actuación como jugador NBA con 25 puntos, 5 rebotes y 7 asistencias

La gran actuación de Lin ante Nets:

Lin no es un jugador cualquiera. Jeremy Shu-How Lin (1.91/23 años) nació en Palo Alto (California), pero sus progenitores son chinos que emigraron, procedentes de Taiwan, a EE.UU. Desde joven destacó por sus habilidades como jugador de baloncesto, pero también por su capacidad intelectual. Por ello no es de extrañar que fuera aceptado en la prestigiosa Universidad de Harvard, centro que forma con las universidades de Brown, Columbia, Cornell, Darthmouth, Pennsylvania, Princeton y Yale, la Ivy League, conferencia de la NCAA cuyos participantes destacan por la excelencia académica y elitismo de sus estudiantes. Durante su carrera universitaria (2006-10), coincidiendo con el ex Breogán y Manresa Brian Cusworth, destacaría por sus prestaciones deportivas; base-escolta eléctrico de grandes condiciones que acabaría con unos promedios de 16.4 puntos, 4.4 rebotes y 4.5 asistencias en su año senior. Además, lograría el título universitario en Ciencias Económicas con una excelente nota media de notable.

Highlights de Lin en Harvard:

Los jugadores procedentes de la Ivy League son una auténtica rara avis en la NBA. El último jugador procedente de estas elitistas universidades que fue drafteado es nada menos que el ex baskonista Jerome Allen (Pennsylvania) en 1995 y el último jugador en disputar un encuentro de la NBA fue el center Chris Dudley (Yale) en 2003. Además, pocos de ellos han destacado en la mejor liga del mundo, siendo, seguramente, el mejor de todos, Bill Bradley, campeón de la NBA en dos ocasiones con los Knicks en los ’70 y con una posterior y exitosa carrera como política en el Partido Demócrata. Si nos ceñimos únicamente a Harvard, el último jugador procedente de esta famosa universidad fue Ed Smith, que llegó a la NBA nada menos que en ¡1953!

Los precedentes no eran precisamente halagueños para Li. Su futuro profesional fuera del deporte estaba asegurado, pero el sueño de ser, más de medio siglo después, el siguiente jugador formada en Harvard en jugar en la NBA estaba presente. El no haber sido drafteado no fue óbice para que nuestro protagonista lo intentara en las summer leagues. Sus buenas prestaciones en las mismas hicieron que se ganase varias ofertas de entre las cuales eligió la de los Golden State Warriors, jugaría prácticamente en casa. Su llegada a la franquicia de Oakland creó muchas expectación en la amplia comunidad asiática de la zona, convirtiéndose en uno de los jugadores más mediáticos de los Warriors. Sin embargo, su temporada rookie estuvo lleno de altibajos. Disputaría en total 29 encuentros (a 10 minutos de media en pista en cada uno de ellos)  firmando 2.6 puntos, 1.2 rebotes y 1.4 asistencias por actuación. Alternaría su presencia en los Warriors con pasos por la NBDL (Reno Bighorns). En la liga de expansión jugaría la D-League Showcase, siendo incluído en el primer quinteto del evento.

Las malas noticias para Lin llegarían  poco después de anunciarse el fin del lockout. El 9 de diciembre de 2011 los Warriors anunciarían que cortaban al jugador de origen asiático. A los pocos días, era llamado por los Rockets, que decidían no quedarse con él en el día de nochebuena. La inoportuna lesión de Ima Shumpert en los Knicks obligaría a la franquicia a buscarle un sustituto temporal y en la Gran Manzana se fijarían en Lin, que sería contratado el 27 de diciembre. Curiosamente debutaría con los Knicks en Oakland. Tras unos pocos partidos en los que sus minutos serían muy limitados, sería enviado de nuevo a la NBDL con el regreso de Shumpert. Los Erie Bayhawks sería su nuevo destino, con cuya camiseta lograría un meritorio triple-doble ante los Mayne Red Clows el 20 de enero del presente año (28 puntos, 11 rebotes y 12 asistencias). Mientras tanto, las aguar seguían corriendo muy turbulentas en los Knicks. Las lesiones, el mal juego y el retraso en la recuperación del nuevo mesías Baron Davis obligaron al cuerpo técnico a volver a llamar a Jeremy Lin. Y esta vez nuestro protagonista no está dispuesto a desaprovechar la oportunidad. Y es que va a ser difícil encontrar a un jugador con su basketball IQ en la pista. No es un base al uso, pero su conocimiento del juego le hace ser un hombre que puede aportar más rigor al juego ofensivo de los Knicks que jugadores como Shumpert o Douglas. Veremos si tiene continuidad en el camarote de los hermanos Marx que representan los Knicks. Pondrá el rigor en el frenopático neoyorkino.

 Divertido video de Jeremy Lin ejerciendo de Gafapasta: