Son el equipo de moda, y no parece que vaya a ser pasajera. Hablamos de Philadelphia 76ers y del gran bloque que han construido con una base de jóvenes muy talentosos y que pueden marcar una época en la liga. Con un récord de 52-30 han devuelto la ilusión y las victorias a una franquicia histórica como esta.
Pero han tenido que pasar una larga travesía por el desierto para llegar hasta aquí. Analizamos el origen de los actuales Sixers y el importante papel de Sam Hinkie en este camino.
Trust the Process. Ese es el famosísimo lema de Joel Embiid y por extensión de sus Sixers desde bastantes meses antes de que llegara el pívot camerunés. Ya inmersos en los playoffs de la temporada 2012/13, el GM de Philadelphia, Sam Hinkie ya hablaba de proceso -y no resultado- para tratar de tomar las mejores decisiones en el futuro.
Nos remontamos a la noche del Draft de 2013, Philadelphia iniciaba el proceso, al fin y al cabo, de reconstrucción traspasando a su buque insignia de ese equipo, Jrue Holiday (además de una segunda ronda de ese draft) por Nerlens Noel y la primera ronda de New Orleans del año siguiente además de draftear a Michael Carter-Williams en la posición n°11. Mientras Hinkie ideaba un plan maestro, gran parte de la grada sixer se le echaba encima por traspasar a un jugador All-Star a cambio de un pick n°6 y una primera ronda.
Así comenzaba el proceso, confiando en uno de los numerosos discípulos que Gregg Popovich tuvo como entrenador asistente en sus Spurs y acabó como Head Coach en una franquicia de la NBA, en este caso, Brett Brown. Además, con un equipo muy joven en el que Spencer Hawes y Thaddeus Young eran los jugadores más experimentados afrontando su sexta temporada en septiembre de 2013.
2013/14: La temporada se puede resumir en una palabra, tanking. Fue desastrosa y, con un récord de 19-63, el único dato positivo fue el premio a Rookie del año que recibió el base Carter-Williams que por lo visto hasta el momento no ha sido capaz de evolucionar sobremanera en su juego durante los siguientes años. Por suerte, obtuvieron el número 3 del draft en el que eligieron a JoJo Embiid. Además de la reacción de Embiid captada por la televisión en el momento de su elección, el pívot procedente de Kansas era una opción muy arriesgada por sus problemas de lesiones a pesar de ser el jugador con mayor potencial de ese draft.
Por otra parte, en el número 12 draftearon a Dario Saric a sabiendas de que iban a tener que esperar dos años para que recalara en la franquicia de la Costa Este. Con Embiid lesionado para toda la temporada, ninguna de sus dos elecciones de 1ªronda iba a jugar ni un solo minuto en la próxima temporada. Pero Hinkie con una fe ciega en el proceso de reconstrucción, estaba dispuesto a esperar.
2014/15: En agosto, dos meses antes del comienzo de la temporada, traspasaban a Thaddeus Young -en el famoso traspaso a tres bandas que enviaba a Kevin Love a Cleveland y a Andrew Wiggins a Minnesota- y a cambio recibían a Luc Mbah a Moute y Alexey Shved y otra 1ª ronda de 2016.
Llegaba septiembre de 2014 para comenzar una nueva temporada en Philly con unas expectativas para nada halagüeñas. Ya sin Evan Turner en sus filas y con una plantilla de muy bajo nivel se confirmaban esas expectativas con 17 derrotas en sus primeros 17 partidos. No ganaron un partido hasta el 3 de diciembre, ante Minnesota. Desde sus despachos empezaron a mover a las pocas piezas interesantes que tenían en aquella temporada y el 19 de febrero decidían traspasar a Michael Carter-Williams en un intercambio a tres bandas con Phoenix Suns y Milwaukee Bucks en el que sacarían de botín la 1ª ronda de este año de Los Angeles Lakers procedente de los Suns.
Otra temporada para olvidar en la que solo se lograron 18 victorias y 64 derrotas y en la que pretendían conseguir de nuevo una posición alta en el draft de 2015.
Y lo consiguieron. En el sorteo pudieron elegir en la 3ª posición al pívot procedente de Duke, Jahlil Okafor. Probablemente uno de los mejores juegos de pies al poste de la liga y que, desgraciadamente, coincidió con la explotación del juego desde el perímetro y la devaluación del juego al poste. También seleccionaron a Richaun Holmes en la 2ª ronda con el número 37.
2015/16: En pleno verano, Sam Hinkie, en su última jugada maestra, enviaría dos segundas rondas de ese draft (Gudaitis y Mitrovic que no han llegado a debutar) con dirección a la costa oeste, a los Kings de Sacramento. Estos, buscando espacio salarial para atraer a alguna estrella en la agencia libre, se deshicieron de Jason Thompson, Carl Landry, Nik Stauskas, su 1ª ronda de 2019 y el derecho por parte de Philadelphia a intercambiar picks en el draft de 2017. En abril de esta temporada, Hinkie decidiría dejar por elección propia su puesto de GM -le sustituiría Bryan Colangelo- y vería la consecución de su obra desde un puesto de menos peso.
En lo puramente deportivo, sin ninguna duda, en este nuevo curso caerían al abismo de la NBA incluso a nivel histórico, dándole un valor pésimo a la victoria. 10. Ese es el número de victorias que lograrían los sixers en toda la temporada, en 82 partidos. El tanking había llegado a tales cotas que no estuvieron dispuestos a traspasar a Noel o a Okafor que gozaban de un buen cartel en aquella época debido también al temor a un nuevo “Greg Oden” en la figura de Embiid que se quedaba en blanco por segunda temporada consecutiva. Sorprendente cuanto menos es que el mejor jugador de ese equipo -en números- fuera el base Ish Smith que promedió 14 pts- 7ast durante ese año.
Afortunadamente para ellos, fueron “recompensados” con el n°1 del Draft de 2016, puesto asegurado para una de sus piezas angulares actualmente, Ben Simmons, además del francés Luwawu-Cabarrot y del turco Furkan Korkmaz -ambos drafteados al final de primera ronda-.
2016/17: Todo proceso llega a un fin para convertirse en una realidad y esta era la temporada destinada a ello. De nuevo, empezaba mal, con Ben Simmons sufriendo una lesión en el pie que le haría perderse toda la temporada. Nada nuevo bajo el sol para la franquicia que avistaba como Embiid veía la luz al final del túnel y por fin podría hacer su debut esta temporada.
Una temporada que tuvo acento español con el regreso de Sergio Rodríguez. El Chacho no tuvo suerte en su vuelta a pesar de ser titular indiscutible en los primeros meses de la temporada.Otra gran noticia fue la ansiada llegada de Dario Saric procedente también del Viejo Continente para apuntalar una plantilla que empezaba a ser ilusionante.
Con un récord de 28-54, la temporada era fructífera por la monstruosa aparición de Embiid en 31 partidos -con restricciones de minutos y partidos- promediando 20 puntos y casi 8 rebotes en tan solo 25 minutos de juego por partido que incluso le hizo ser candidato al ROY apoyado por el hype suscitado en redes sociales y medios de comunicación. Casi con toda certeza, el final del proceso llega con otro n°1, repleto de dudas por sus lesiones pero con un talento desorbitado para jugar al baloncesto como es el caso de la elección de Markelle Fultz en el pasado draft. Sacramento obtuvo el pick n°3 y tuvo que cambiarlo por el pick n°5 de Philadelphia gracias al bueno de Sam. Con Ainge y los Celtics de por medio optaron al n°1 en un trade por todos conocido.
Por todo ello, los aficionados de los Sixers tienen mucho que agradecer a Sam Hinkie, por el proceso que llevó a cabo para levantar a una franquicia como la de Philadelphia. Muchos de ellos han recordado también a todos los jugadores que fueron parte del proceso recopilados en este vídeo: