Según el periodista Adrian Wojnawoski, Serge Ibaka ha llegado a un acuerdo que prolongará su vinculación con Oklahoma otros 4 años años tras finalizar el próximo junio su contrato en la escala salarial de novatos, por unas cantidades próximas a los 48 millones de dólares (en un principio se anunciaba una cuantía de 40 millones por el propio Wojnarowski)
Con una extraordinaria capacidad atlética, rápidamente destacó en los Thunder por sus aptitudes a la hora de taponar ganando paulatinamente minutos en la rotación y estableciéndose como titular tras el traspaso que llevó a Green y Krstic hacia Boston, como pareja interior de Kendrick Perkins. Junto a su agilidad e intensidad en las ayudas defensivas ha ido desarrollando un efectivo tiro en suspensión desde la media distancia, llegando así al momento actual: probablemente el cuarto jugador más importante del actual finalista de la NBA.
Con este acuerdo, el GM Sam Presti afianza un proyecto con el que pretende llevar a su franquicia hacia el anillo y despeja alguna de las incógnitas habituales al hablar de su equipo.
Antes incluso de disputar las pasadas finales ante Miami, era habitual leer o escuchar la posibilidad de que Oklahoma debiese renunciar a mantener el armazón principal de su equipo debido a los elevados gastos y a no estar en uno de los principales mercados estadounidenses, alejado de los ingresos que conjuntos como Lakers o Knicks tienen a su alcance, planteándose la alternativa de renunciar a las renovaciones de todas sus jóvenes estrellas.
Con Kevin Durant como máximo referente y renovado hasta el 2016 por las máximas cantidades disponibles para un jugador de su experiencia -más de 20 millones cobrará en su última temporada-, Russell Westbrook fue el siguiente y también amplió otros 5 años su contrato, empezando su nueva vinculación hace apenas unas semanas una vez se iniciaba el nuevo curso, tras haber llegado a un acuerdo ya en enero por la cuantía máxima que le correspondía.
Con la renovación de Ibaka, en los próximos días el futuro de James Harden será uno de los principales titulares alrededor de la NBA, pues él también se encontraba en las mismas condiciones que Ibaka a la hora de poder ampliar su contrato, teniendo la posibilidad de tantear el mercado el próximo mes de julio y con los Thunder en condiciones de igualar cualquier oferta recibida por el jugador.
¿Qué pasará con Harden? Es difícil decirlo. Hace escasa fechas "se dejaba querer" al declarar en Arizona que le encantaría firmar por los Suns en el futuro. Cabe la posibilidad de que un traspaso se produzca, en busca de no elevar en exceso la cantidad en salarios y estar obligado a un pago excesivo al superar la barrera del impuesto de lujo en el futuro cercano.
Sin embargo, hay también bastantes motivos para mantener que Harden seguirá en Oklahoma, puesto que hablamos de un conjunto que acaba de disputar las finales cuando sus 4 principales referentes -todos ellos finalistas olímpicos en Londres hace apenas unos días- aún no han cumplido los 24 años de edad, lo que idea del enorme margen de mejora que aún tienen a la hora de disputar el anillo, unido al hecho de lo sucedido en los últimos tiempos cuando una estrella de la liga consideraba que su gerencia reducía gastos que alejaban las posibilidades de luchar por el anillo -como Carmelo Anthony o Chris Paul– o que no tomaba decisiones acertadas -como Dwight Howard-, lo que equivalía a un adiós prematuro.
¿Qué postura tomará Presti? El futuro más o menos inmediato nos lo dirá, pero todo hace indicar que Serge Ibaka será una pieza fundamental de ese futuro, además del presente.