Cita ineludible con uno de los mejores entrenadores en la historia de la NBA. Después de participar en el Clínic Internacional Mahón 09 (organizado por la AEEB), George Karl pasaba sus últimas horas en España en un lujoso hotel madrileño. Hasta allí nos desplazamos para hablar en exclusiva con el entrenador de los Nuggets, algo que no ha hecho ningún otro medio en España.

Bueno, una vez mas en Madrid, una ciudad que le trae recuerdos de todo tipo. ¿Como se siente uno volviendo casi veinte años después?

Mi trayectoria aquí fue difícil, aunque al mismo tiempo fue una experiencia positiva. He aprovechado estos días para verme con algunos de mis antiguos jugadores y con mis entrenadores de entonces y pensaba en lo rápido que pasa el tiempo, ya que me fui de Madrid hace casi dieciséis años. Como te decía, creo que mi estancia en España fue positiva a pesar de no haber conseguido el título de la ACB: creo que eso me ayudó al fin y al cabo a ser mejor entrenador, a pulir mis defectos para volver a la NBA.

Veinte años después, es otro Karl el que llega a España: ¿Que ha hablado con su hijo Coby sobre la ACB y su estancia en Badalona durante este curso?

Coby ama la ACB, pero se ha quedado con la sensación de que podría haber jugado mucho más. Se ha quedado prendado del talento y de la fuerza de algunos equipos y de la intensidad con la que la gente vive el deporte, pero su experiencia tiene ese gran “pero”, el hecho de no haber jugado tanto. Por lo pronto ahora está preparando las Summer Leagues: arrancará este año jugando con Boston y luego existe la posibilidad de que lo haga con Cleveland o con nosotros en Las Vegas y, a partir de ahí, tomará una decisión. Por lo pronto, si él quiere volver a jugar en Europa y piensa que es el camino que quiere seguir, es una buena decisión.

Esta semana ha compartido clínic en Mahón con Ettore Messina. Aquí en Europa siempre se ha dicho que sería uno de los pocos entrenadores capaces de llevar las riendas de un equipo NBA. Ahora que los jugadores europeos están marcando diferencias en la Liga, ¿ve la posibilidad de que un entrenador pueda hacer lo mismo?

Cuando me encontré con Ettore estos días le pregunté “¿cuando te vienes con nosotros?”, porque en los Estados Unidos también se habla de él en los mismos términos. De todos modos, hay que tener una cosa clara: no estamos ante dos ligas iguales. En la NBA tenemos cuatro partidos a la semana, y a veces pasamos días sin entrenar en serio entre tanto viaje; eso es realmente frustrante cuando eres nuevo en la Liga y aunque tengas experiencia entrenando en otras ligas siempre lo pagas caro. No sólo Ettore podría dar ese salto: hay otros tres o cuatro grandes entrenadores a nivel mundial capaces de dar el salto a la Liga, pero depende mucho de donde podrían llegar, a que equipos y en que condiciones. Veo a algunos de ellos y pienso “pues encajaría bien en este equipo”.

Hablemos de los Denver Nuggets. Después de cinco años, esta ha sido la temporada de la consolidación: campeones en la Northwest, finalistas de la Conferencia Oeste y, en lo particular, la victoria número 900 como entrenador en la NBA…

Fue un año para disfrutar, algo que no es normal en la NBA. Cuando tu entrenas allí pasas por constantes estados de frustración, confusión, rabia… pero tuvimos un año muy bueno. Todo el mundo pensaba que íbamos a hacer una mala temporada y demostramos que esos análisis se quedaron desfasados.

¿La influencia del traspaso que planteasteis con los Detroit Pistons es la gran clave de ese cambio?

Nos habíamos convertimos en un equipo de un corte mas defensivo que ofensivo en una Conferencia claramente anotadora. Con Chauncey (Billups) con nosotros, teníamos que cambiar la manera de jugar y hacerlo bien. Es un ganador nato y encima juega con la ventaja de que es de Denver, así que todo iba encadenado a que él liderara ese cambio. De todos modos, no solo hay que pensar en Billups: la labor de JR Smith, Chris Andersen o Nené también tiene su mérito porque, siendo jugadores que no suelen disfrutar de muchos minutos, durante este curso nos han ayudado muchísimo. Nene estuvo muy cerca de ser All-Star este año tras superar un cáncer, JR Smith debería de haber sido, para mi, el mejor sexto hombre de la NBA y que decir de Chris Andersen, que regresó después de dos años de suspensión. Hay muchas historias positivas detrás de este equipo, mucha capacidad de lucha y superación y todo esto ha sido lo que nos ha llevado arriba.

Ese primer gran viaje con Denver se acabó en la final de Conferencia contra los Lakers; sin embargo, hubo momentos de la serie que nos hicieron pensar en una victoria final de los Nuggets. ¿Que hizo falta entonces para tumbar al campeón y que hace falta ahora de cara al próximo curso?

Una de las claves es la experiencia: tenemos tres jugadores menores de 25 años (Carmelo Anthony, JR Smith y Nené) y ellos deben seguir creciendo en este equipo. Por otro lado, veo necesario que renovemos a Chris Andersen después de lo que ha demostrado este curso. Pero en definitiva, todo va relacionado con ser mejores: no somos un equipo viejo, tenemos gente joven que puede y debe mejorar y a partir de ahí todo es trabajar.

Toda esta vorágine de traspasos de estos últimos días nos ha pillado a todos de improviso. Sin embargo, la tendencia en todos ellos es la de mover a las grandes estrellas a la Conferencia Este. Todavía queda verano y habrá mas movimientos, ¿pero como se trabaja en esta situación?

Creo que todo el mundo quiere mejorar, eso es algo que debemos tener claro… pero siempre me río de todo esto porque en Estados Unidos los analistas se pasan el verano anunciando grandes cambios, cuando al fin y al cabo traspasos como estos no son mas que cambios pequeños. Ahora mismo, más allá de los Lakers, el Oeste no se está moviendo: Phoenix baja enteros claramente, pero todavía queda mucho verano. Hay muchos jugadores interesantes en el mercado, como por ejemplo Grant Hill: San Antonio le ha tanteado, Boston también y a mí es un jugador que me gustaría tener en los Nuggets.

La mayoría de analistas coinciden en lo mismo: ahora mismo los Nuggets necesitan a un interior consistente y un exterior que ayude en las rotaciones, a poder ser un base...

A mi me gustaría mas traer a un buen veterano. La influencia de Chauncey Billups en el vestuario este año fue muy positiva y me gustaría tener a otro jugador que me ayudara a mantener a la gente en esta línea. Por eso te digo que Grant Hill sería un hombre ideal para los Nuggets.

“Volvería a Europa para entrenar a mi hijo”

La charla con el técnico se extendió unos minutos mas de forma distendida. En esos momentos, Karl nos confesó uno de sus objetivos para los próximos años: “Me gustaría entrenar a mi hijo Coby. Lo he hablado con mucha gente y puede que de aquí a un par de años, si al final no lo consigo en la NBA, pueda volver a Europa si él sigue jugando aquí y plantear mi retirada cumpliendo ese sueño. Quien sabe, igual hay algún equipo interesado en pillar el paquete completo”.

Pocos días antes, durante la presentación del clínic que la AEEB dio en Mahón, Karl tuvo buenas palabras para el eterno rival madrileño, el Estudiantes y para uno de sus símbolos: “Pepu Hernández es de esos entrenadores que nunca ha tenido el mejor equipo pero que siempre lo ha hecho bien. Creo que es un entrenador ideal porque en Europa muchas veces perder o ganar depende mas de a quien dirijas que el como lo hagas. Aquí uno puede encontrar buenos entrenadores en la cima y en el fondo también, existe cierta paciencia. En la NBA hay equipos que están cortando a entrenadores con 50 victorias”.

Una de las cosas por las que se mostró sorprendido Karl fue por la cantidad de veces que le han planteado en estos días el dilema de Ricky Rubio. Como ex entrenador del Real Madrid, todo el mundo esperaba conseguir una exclusiva sobre el salto del crack del DKV Joventut a la NBA o al conjunto blanco, pero hasta desconocía las cifras que se están manejando de cara a posibles traspasos: “De todos modos, prefiero a Ty Lawson (jugador al que consiguieron en la noche del draft a través de un intercambio con los Minnesota Timberwolves); le veo mejor preparado que a Rubio para dar el salto”.