El encuentro disputado ayer entre Francia y Grecia lo tenía todo para ser uno los partidos que más expectación han creado en lo que llevamos de Eurobasket. Ambas selecciones se disputaban el primer puesto del Grupo E. Y no faltó emoción, no. Pero el final del partido tuvo un cierto tono grotesco.
A falta de 8 segundos para el final, y con el resultado de 69-66 a favor de los franceses en el marcador, Spanoulis logró un triple desde muy lejos … pero lanzado de forma cómoda ante la relajada defensa de Turiaf que lo estaba flotando claramente. Con empate en el marcador, Nando de Colo, en brillante jugada personal y sobre la bocina, anotaba la canasta que daba la victoria a Francia por 71-69, además de garantizar el primer puesto del Grupo. ¿Hubo una explosión de alegría por parte de los jugadores franceses? No precisamente. Podíamos observar a los jugadores de ambos equipos dándose la mano y retirándose a los vestuarios como si de una pachanga se hubiera tratado. ¿Y el héroe del partido? Con cara de poker, nos imaginamos que pensando algo así como "¿Qué he hecho?". Realmente surrealista lo vivido en estos últimos segundos.
Daba la impresión que nadie quería ganar el partido. ¿La razón? Sospechamos que era la posibilidad de enfrentarse a España (si vence a Polonia, claro está) en cuartos quedando primeros de grupo.
Video de la canasta de De Colo. Contrasta la pasión con la que vive el final el comentarista televisivo con la frialdad de los jugadores:
