No había ganado nunca el Zalgiris Kaunas al FC Barcelona en su casa y la historia volvió a repetirse. Pese a una entrada en partido muy acertada, los lituanos fueron poco a poco cayendo bajo el dominio de los blaugranas, que hicieron valer su calidad para alzarse con su tercer triunfo consecutivo. Liderados por Ante Tomic (18 puntos y 8 rebotes para 22 de valoración), el Barça encontró en Pau Ribas (7 puntos en el segundo cuarto) y Juan Carlos Navarro (10 puntos en el tercer cuarto) los ayudantes perfectos. El Zalgiris Kaunas vendió cara su derrota pero fue inevitable. Su horrible noche desde la línea de tres puntos (3/15, 20%) contrastó con la del cuadro de Xavi Pascual, que acabó con 9 triple de 19 intentos (47,4%). Esa falta de acierto hicieron baldíos los esfuerzos de Paulius Jankunas (17 puntos y 4 rebotes para 21 de valoración), del pívot griego Ian Vougioukas (16 puntos y 9 rebotes para 19 de valoración) y de Renaldas Seibutis (18 puntos y 3 asistencias para 20 de valoración).

Si bien el choque comenzó con una canasta de Carlos Arroyo, el Zalgiris Kaunas se hizo rápidamente con el control del choque a través de la buena labor ofensiva de Vougioukas y Jankunas. Curiosamente, la primera canasta de los lituanos fue un triple a cargo de Seibutis, triple que sería el único del partido hasta bien entrado el último arranque de cuarto (5 puntos con el 11-6), y en estos parámetros transcurrirían estos diez primeros minutos. Con un Ante Tomic que dominaba en ataque, el Barcelona conseguía que el Zalgiris no abriese hueco en el marcador y eso le permitió recuperar terreno antes del primer descanso. Un tiro librado del estadounidense Hanlan permitiría a los de Kaunas irse hasta los 6 puntos de ventaja (23-17) a falta de menos de dos minutos, pero un triple de Perperoglou sumado a una bonita canasta de Justin Doellman minimizarían la ventaja local al final del primer cuarto (23-22).

Dos canastas de Javtokas abrían el segundo cuarto volviendo a permitir al Zalgiris abrir hueco (27-22), aunque la alegría duraría poco para los locales. Dos pérdidas seguidas bien castigadas por el Barcelona (contraataque de Satoransky y triple de Abrines) igualaba el encuentro a 27. A partir de aquí, máxima igualdad en el marcador en un tramo donde las defensas se imponían a los ataques. Mucha intensidad defensiva, sobre todo entre los catalanes, que parecían llevar al encuentro a una baja anotación. Pero en esas apareció Pau Ribas. Tras un tiempo muerto solicitado por el técnico blaugrana, Xavi Pascual, el badalonés (7 puntos consecutivos) se aliaba con Ante Tomic para abrir brecha en el marcador. Un palmeo del joven Vezenkov, a triple fallado por Satoransky, en el último segundo de la primera parte permitía al FC Barcelona Lassa irse al descanso con su máxima ventaja hasta ese momento, 6 puntos (39-45).

La vuelta de vestuarios dio paso a un "déjà vu". El retorno, aunque solo fuese en este cuarto, de un genio: Juan Carlos Navarro. Anotando sus diez puntos finales en este cuarto, el escolta catalán recordó por momentos a su mejor versión. Un triple suyo fue el que abrió el marcador ampliando la ventaja a los nueve puntos. Aunque bien respondido por dos canasta de Vougioukas, el Barcelona Lassa no se vino abajo. Navarro, Tomic y la defensa blaugrana se convirtieron en la pesadilla lituana. Canasta a canasta la ventaja de los catalanes seguía subiendo: un triple de Satoransky ponía los 10 puntos de ventaja, un 2+1 de Tomic los 11, otro triple de Navarro los 12 y una canasta de Samuels la máxima del partido a favor de los blaugranas: 14 puntos arriba, 53-67. Sólo en el último minuto del cuarto el Zalgiris Kaunas consiguió parar un poco la embestida de los visitantes, y con una canasta de Lekavicius y un mate de Ulanovas recortaba el marcador hasta los 10 puntos de diferencia (57-67).

Poca historia tuvo el último cuarto. El arranque en tromba del Zalgiris, culminado con un mate de Seibutis, recortaba aun más la ventaja de los catalanes (63-69). Pero todo se quedaba en un esfuerzo baldío con la combinación de triple, robo y contraataque que llevaba a cabo Carlos Arroyo, que devolvía la diferencia a los dobles dígitos (63-74). Tras conseguir nuevamente el Barcelona Lassa su máxima ventaja de 14 puntos gracias a un nuevo triple de Arroyo, ni siquiera el retorno del acierto desde el 6,75 para los lituanos sirvió para darle emoción al encuentro (consiguieron dos triples casi seguidos anotados por Kalnietis y Seibutis tras más de 30 minutos sin acertar). El juego colectivo y una, por momentos, asfixiante defensa del Barça hicieron que la victoria no peligrara. En el último minuto, cuatro tiros libres consecutivos de Jankunas cerraron un partido que perdió su emoción en el momento en el que los blaugranas abrieron hueco en el segundo cuarto. Un 78-85 final que cumplía con la historia: tras diez encuentros en Kaunas entre ambos equipos, el Zalgiris sigue sin ser capaz de derrotar al FC Barcelona en casa.