El baloncesto balcánico siempre ha desatado pasiones y críticas. Generaciones enteras de aficionados al baloncesto se han enamorado del talento de estos jugadores aunque muchos han llegado a odiarlos por la visceralidad y prepotencia de algunos de estos genios. Pero el debate de hoy no es ese. Queremos que nos digáis si creéis que los jugadores balcánicos en la actualidad están sobrevalorados y viven muchos de ellos de la fama de sus antecesores o si por el contrario siguen siendo una fábrica de grandes jugadores que nutren a los principales equipos europeos.

@JRSanchis

Vs.

@Fernandogordosb

Antonio Arroyo   Fernando Gordo

Sí, están sobrevalorados

No les esconderé que me ha visitado el pánico escénico antes de defender una postura que puede ser considerada por muchos como antipopular. Me atrevería a afirmar que incluso sacrílega, para los más puristas del universo balcánico, paraíso baloncestístico ubicado en un espacio terrenal desde el cual algunos semidioses parece ser que decidieron inventar otro tipo de baloncesto diferente al del creador Naishmith.

En 1996 los Sacramento Kings eligen en primera ronda del draft a Pedja Stojakovic, un mocetón al que parece que le sobra Europa. Los buenos precedentes de Divac, Kukoc, Radja, Danilovic y, sobre todo, Petrovic animan a volverlo a intentar pese a unos años de sequía. El atrevimiento funciona y el serbio marca una bonita época en la NBA que precede al bajón definitivo de calidad que marca la competición en los últimos años (exceptuando los cuatro gatos y un segundo nivel que mantiene al resto).

Lo mismo le ha sucedido a la gran escuela balcánica, que sigue creando prospects como churros, pero cuyo nivel generalizado no supera, por ejemplo, al ofrecido por otros baloncestos. En el 2003 Darko Milicic, Zarko Cabarkapa, Aleksandar, Pavlovic y Zoran Planinic fueron primera ronda del drat y en segunda les acompañaron Slavko Branes, Sani Becirovic y Nedzad Sinanovic. Fue el colmo del timo del toco mocho. Perdonen tan exagerada expresión, pero hay que acercar la luz al que todavía vive entre tinieblas.

Marcó el fin de la fiabilidad del producto balcánico, al menos en la NBA. En Europa hay equipos que siguen pinchando, sobrepagando a estos jugadores. Erre que erre. También los hay productivos. No lo vamos a negar, pero la alabada escuela yugoslava y sus afamados técnicos duchos en un efectivo pero poco bello estilo debe ser bajada del pedestal.

Eso sí, los intereses no han dejado de colocar, al menos, a una futura estrella balcánica en cada draft. Funcionen o no (que es la mayoría de las veces). Aunque sea en segunda ronda, donde habitan los Chukwudiebere Maduabum, una especie rarísima que nunca se extingue. Mercado.

 

No, aún son ejemplo

No creas JR, tu posición no es tan impopular, créeme. Muchos aprovecharán este debate para tratar de menospreciar un baloncesto que ha dado a nuestro continente algunos de los mayores talentos que hemos conocido en nuestro deporte.

No negaré que no han vuelto a aparecer jugadores semejantes a los grandes mitos surgidos de los Balcanes en los años 80 pero sigue siendo uno de los mayores hervidores de baloncesto del mundo.

Has querido centrar tus críticas al baloncesto “yugoslavo” en la poca presencia e importancia de jugadores de esta zona geográfica en la NBA pero son muchos menos habitantes que en nuestro país y aún así, cuentan con siete representantes. Y algunos de ellos son jugadores de primer nivel como Goran Dragic, Nikola Pekovic, Nikola Vucevic o Beno Udrih, además de otros con menos pesos en sus equipos como Radmanovic, Milicic (que no ha jugado), Teletovic o Pavlovic.

Pero para defender la importancia de los Balcanes aún en el baloncesto europeo quiero repasar los líderes estadísticos de la Euroleague. De los 50 jugadores que más han valorado en términos absolutos esta temporada en la mejor competición continental, encontramos 14 de los balcanes. Krstic, Tomic, Teodosic, Planinic, Zoric, Bogdanovic, Nachbar, Savanovic, Bjelica, Popovic, Lorbek, Ukic, Markota y Vidmar. Y no he querido meter a Mirotic en la lista porque entiendo que su formación en España influyó en que haya llegado a ser el gran jugador que es.

Por si te preguntas cuantos jugadores seleccionables estaban en esta lista de 50 primeros, te lo soluciono rápido. Sólo cuatro. Rudy, Navarro, San Emeterio y el propio Mirotic. Y no se trata de compararnos con ellos menos aún cuando nuestra Selección está en el mejor momento de su historia pero sí debemos ser conscientes de que sacan muchos más jugadores de primer nivel. Así que yo les mantendré en el pedestal todo el tiempo que sea necesario aunque ya no aparezcan los grandes cracks que nos alumbraron en los 80.

Y tú… ¿crees que los jugadores balcánicos están hoy sobrevalorados?

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