• Valencia Basket salvó la eliminatoria con un parcial de 23-11 en el último cuarto
  • Luke Harangody fue el líder de la reacción con 10 puntos seguidos
  • Rice, el mejor de Khimki con 27 puntos
  • Carles Duran: "Hoy, el arbitraje no nos ha respetado en algunos momentos siendo el campeón de la Eurocup"

Valencia Basket y Khimki Moscú abrieron las eliminatorias de cuartos de final de la Eurocup en un partido vital para los intereses taronja. El jugar en la Fonteta primero obligaba a los de Carles Duran a sacar un resultado holgado como ocurrió ante Bayern de Múnich, aunque hoy iba a ser más complicado. La precipitación se hizo presa de los jugadores de Valencia Basket al inicio, que solo encontraban a Bojan Dubljevic en los primeros ataques. Mientras, Khimki Moscú aprovechaba su superioridad interior y el acierto exterior de Petteri Koponen. Con el ataque de los dos equipos estacando y sin ideas (5 pérdidas de Valencia, 6 de Khimki), el marcador solo presentaba tres puntos de diferencia al final del primer cuarto gracias al despertar de Sam Van Rossom (20-17).

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Foto: JM Casares

Pero en el segundo cuarto iba a llegar el momento de Tyrese Rice. El base norteamericano lideró un parcial de 1-9 para los rusos que se terminó alargando hasta el 5-15. Rice, que solo había anotado 2 puntos en el primer parcial, se fue al descanso con 15 puntos. El partido estaba en sus manos y Khimki tomaba la máxima diferencia (+9). Valencia Basket estaba perdido en ataque, abusando del triple y viviendo de las individuales de Sam Van Rossom. Aún así, no le iba a salir mal del todo la jugada. Con el belga como líder, Valencia Basket consiguió volver al partido justo antes del descanso con un parcial de 8-0. Pero de nuevo las pérdidas iban a lastrar a los de Carles Duran. Un triple de Koponen frenó el despertar taronja, que se iba a parar más todavía con una pérdida de Sam Van Rossom y el posterior mate de espaldas de Paul Davis que volvía a dar ventaja a Khimki (35-41). El parcial del segundo cuarto fue de 15-24. El partido se empezaba a romper y Valencia Basket tendría que dar un paso adelante en su defensa para acercarse en el marcador.

Subió la intensidad defensiva en los primeros minutos de segunda parte el equipo taronja. A Khimki le costaba anotar, hasta que apareció Tyler Honeycutt. Honeycutt voló para hundir el balón a dos manos sobre un Pablo Aguilar que fue un espectador de lujo. Motivados por la acción, los rumos volvieron a sumar y a estirar la diferencia en el marcador. Y es que Valencia Basket seguía sin organizar sus ataques jugando a los triples de Pau Ribas. Ribas tomaba la responsabilidad ofensiva al no encontrar a Dubljevic en la pintura y al haber perdido la inspiración de Van Rossom. Pero solo con Ribas no era suficiente. Además, a cada golpe de Valencia Basket, reacción rusa. Un alleyoop de Vladimir Lucic pareció devolver a Valencia Basket al partido, pero Koponen castigaba desde el 6,75. La diferencia, +10. Y entre Koponen y Rice terminaron de hundir la moral de Valencia Basket con un triple al final del cuarto (52-65).

La eliminatoria estaba en peligro y Valencia Basket intentó remontar con una defensa en zona cuyas vergüenzas destaparon Rice y Vyaltsev con una asistencia de ensueño para Augustine y Paul Davis. Parecía que el encuentro había finalizado, pero el espírito de Luke Harangody devolvió la ilusión a Valencia Basket. Harangody colocó un tapón a Paul Davis y luego completó un 2+1 que dejaba la diferencia en solo 6 puntos. Harangody se había convertido en el líder taronja con 10 puntos consecutivos. Después de todo, Valencia Basket estaba en partido y en la eliminatoria. A falta de 21,8 segundos, Rice paró el crono con una canasta que ponía el 73-76 y le daba la última bola a Valencia Basket. La posesión cayó en manos de Vladimir Lucic, que recibió falta en su lanzamiento de tres. En la línea de tiros libres, Lucic anotó solo dos y los taronja terminaron cayendo, aunque dejándolo todo abierto (75-76). Pese a la derrota, Valencia Basket salió del partido de ida con sensaciones más que positivas después de cómo había transcurrido el partido. Todo por decidir en Moscú.

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Foto: JM Casares

Tras el partido, Rimas Kurtinaitis reconoció que no terminó contento con el cierre del partido: “Estoy contento por haber ganado, pero no por los últimos minutos de partido. Ahora, la vuelta será un cero a cero y un partido muy bonito”. Mientras tanto, Carles Duran lamentó la primera parte de Valencia Basket aunque destacó la ambición final: “La primera parte ha sido la clave, sobre todo el segundo cuarto. Dentro de nuestros errores defensivos hemos perdido balones en los contraataques. Ofensivamente nos hemos quedado sin ideas y perdiendo balones sin sentido y hemos dejado de defender. Hemos estado más preocupados de anotar que de defender. En el último cuarto, la ambición ha sido la de luchar hasta el final. Parecía que estábamos muertos y ahora tenemos que ganar de dos en Rusia”. Además, Duran lanzó un dardo a los árbitros: "Hoy, el arbitraje no nos ha respetado en algunos momentos siendo el campeón de la Eurocup".

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Imagen de CarlosMartinez Carlos Martínez@Carl_MartinezPeriodista. Deporte autonómico en YoSoyNoticia y ACB en Cadena COPE.
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Comentarios

Carles Durán habla muy mal del tercer cuarto de su equipo, pero que yo recuerde sólo pidió un tiempo muerto en ese periodo, cuando los rusos ya se habían marchado en el marcador. Tarde. No es la primera vez Carles, espabila.

Y la reacción, como bien dice el coach hubiese podido salir cara o cruz. Esta vez salió cara gracias a que los rusos fallaron todo tipo de triples absolutamente solos, en condiciones normales hubieran cerrado la eliminatoria y hasta un resultado escandaloso.

La posibilidad de pasar es más que factible ... aunque yo no lo veo nada claro.

Pues yo ya estaba viendo muy mal las opciones del Valencia, el Kimkhi estaba enchufadísimo y Rice imparable, muy negro estaba pasar a semis. Menos mal que al final mordisco en cara ha aparecido y a base de entrega, lucha y coraje más que otra cosa ha conseguido ponerse a uno. A ver como llegan la semana que viene a Kimkhi, donde no habrá un ambientazo pero el viaje largo y jugando domingo puede pasar muy caro

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