TAU
Quintento inicial: Calderón (16), Macijauskas (13), Hansen (13), David (4) y Scola (21).
También jugaron: Prigioni, Vidal (5), Splitter (6), Gabini y Betts.

Maccabi
Quintento inicial: Jasikevicius (22), Burstein (8), Parker (12), Baston (18) y Vujcic (13).
También jugaron: Kommatos (13), Sharp, Halperin (2), Shelef, Green y Dotan (2).

Árbitros: Brazauskas, Jungebrand y Cazzaro

De nuevo retraso en el partido del Baskonia, esta vez debido a las dos prórrogas necesarias para la victoria del Panathinaikos sobre el CSKA. El encuentro se inició con 37 minutos de retraso, con aproximadamente 7000 aficionados del Maccabi en las gradas (3000 más que en la semifinal del viernes), y problemas en una de las canastas, la que correspondía al calentamiento del Baskonia, una vez más la organización rusa fue un desastre.

Las dos primeras posesiones obtuvieron su premio, Vujcic en el poste bajo para los macabeos y Scola por parte del Baskonia, que sumada a un dos más uno de Macijauskas estableció un parcial de 5-0. Sin embargo, tras un inicio de aciertos ofensivos, las defensa del equipo de Tel-Aviv comenzó a imponerse, y Calderón cometía su segunda falta personal en el minuto 2 (aunque un error en la estadística le otorgaba 3 durante algunos minutos).

Un triple de Saras precedido por otro de Bursteincolocaba el 5-12 en el luminoso (parcial de 0-10). Prigioni sustituyó al hoy base titular del TAU para poner orden en un ataque demasiado impulsivo (falta en ataque de Hansen en una contra), mientras que el Maccabi optaba por ataques rápidos y efectivos (7-14). Fue entonces cuando Scola entró en juego y comenzó a jugarse sus opciones, evitando que el Maccabi consiguiera una diferencia inalcanzable.

Hansen cometía su tercera falta personal, esta vez sobre Baston, que colocaba el 11-19 desde la línea de tiro libre. Kommatos con un triple hacía que la ventaja superara la barrera de los 10 puntos, y el Baskonia solo conseguía puntos con sus jugadores interiores (Splitter comezó anotando nada mas entrar por Scola). El cuarto finalizó con 15-26 para los israelíes y un TAU que no sabía como atacar efectivamente la intrincada defensa del Maccabi y que se veía mermado por los problemas de faltas.

Calderón volvió a cancha en la reanudación, en una apuesta de Ivanovic por jugar con dos bases que permitieran descifrar la match-up-zone de Gershon. Baston cometió su primera falta tras empujar a Vidal en una acción ofensiva, pero la diferencia no hacía más que aumentar (16-30 tras un jugadón de Parker). Otra circunstancia negativa para los de Vitoria era sus malos porcentajes en triples, que permitían a los amarillos cerrar más su defensa sobre los interiores.

Dusko pedía un tiempo muerto tras el que el TAU comenzó a ver agujeros en la telaraña amarilla, pero Kommatos (el tapado del Maccabi durante el primer tiempo) con dos triples consecutivos hacía que la diferencia no disminuyese (20-36), y a pesar de las penetraciones de Calderón y los tiros libres de Vidal, el 6 de 6 en triples del Maccabi tras un nuevo lanzamiento de Burstein complicó mucho las cosas para el Baskonia antes del descanso.

A pesar de todo, la obtención de faltas y la mejora defensiva baskonista, unidas a dos triples, de Calderón y Hansen, permitieron que el TAU se fuera al descanso con una diferencia de sólo once puntos, tras una última defensa en la que salieron Gabini y Betts para hacer faltas personales aprovechando que el equipo no estaba en bonus, pero que no consiguieron evitar una última jugada provechosa para Kommatos.

Nada más comenzar la segunda parte, Jasikevicius cometía su tercera falta tras un robo de Hasen, que anotaba un tiro en suspensión en el ataque correspondiente. Calderón con un triple colocaba a su equipo a 8, y entre Hansen y Scola desperdiciaban un contraataque con superioridad que se perdió por la línea de fondo. El propio Scola era protagonista de lo segundos posteriores, tras sacar dos puntos en el poste bajo, cometer una personal sobre Vujcic y perder otro balón importante tras intentar un cambio de mano por la espalda en otra contra que acabó en una antideportiva de Splitter cuando intentaba evitar el mate de un Baston que estaba esperando solo en campo rival.

Splitter estaba defendiendo muy bien las acometidas de Vujcic buscando la línea de fondo, pero el Baskonia no rentabilizaba sus recuperaciones de balón cuando llegaban al otro lado de la pista (hasta Macijauskas fallaba tiros libres). Pero la falta de acierto del TAU no estaba siendo normal, y cuando Calderón y Hansen conectaron con la red, el conjunto alavés se puso a 7 puntos (52-59), que Jasikevicius convirtió en 10 anotando tres tiros libres correspondientes a una dudosa falta de Calderón sobre el lituano en acción de tiro triple.

Saras y Parker eran los únicos que dieron la cara en este tercer cuarto, ya que Splitter se estaba comiendo a Vujcic (que recibía un nuevo tapón) en defensa. Tras un tiempo muerto Hansen colocó a cinco puntos a su equipo con un triplazo, y Macijauskas anotó dos más tras recibir la falta de Burstein. Jasikevicius, sustituido poco antes, volvía a cancha para perder un balón, y tras dos fallos, uno por bando, Splitter recibió la tercera falta de Parker de la que sacaba un punto más (62-60).

Un triple de Saras fue contestado por la canasta de Scola tras pase de Hansen, y la última jugada de Parker volvía a ser detenida por un poderoso Splitter que se marchaba al banquillo cojeando ostensiblemente. Después del complicado partido que tuvo en los cuartos anteriores, el Baskonia llegó con solo tres puntos de desventaja a los últimos 10 minutos.

Scola anotó una suspensión y el TAU respondió con un mate deScolatras una posesión alargada tras una falta y dos rebotes ofensivos, y Calderón anotaba un canastón tras bandeja superando a Vujcic que contrarrestaba las canastas de Baston y Vujcic. Macijauskas salió a cancha y falló dos lanzamientos triples, mientras que el Macabbi volvía a escaparse en el marcador. Ivanovic no estaba dispuesto a echar por tierra el gran trabajo realizado y solicitó un tiempo muerto con el 74-66 en el marcador.

El Baskonia vivió las siguientes posesiones sobre la cuerda floja, intentando evitar que la desventaja pasase de 8 y consiguiéndolo durante algunos minutos hasta que una falta de Hansen (cuarta) permitió a Parker anotar dos tiros libres que colocaban un 66-76 que duró hasta 2:45 antes del final, cuando Saras y Baston conectaron para un alley-oop que dejaba prácticamente sentenciado el encuentro.

En los minutos finales, la sucesión de tiros libres y canastas ante la falta de intensidad defensiva, solo sirvió para definir la diferencia final de puntos, que quedó fijada en 12 puntos, ante las celebraciones de Gershon y sus ayudantes por un lado y Sarunas y los hombres en cancha por el otro.

Jasikevicius fue nombrado MVP de la final tras anotar 22 puntos, capturar 6 rebotes, repartir 5 asistencias y liderar a su equipo en todo momento ante la escuadra de Ivanovic. El Maccabi, de la mano de Gershon, se convierte en el primer equipo en reeditar el título desde 1991. Para Saras, este es su tercera Euroliga consecutiva.