El equipo murciano estuvo concentrado desde el inicio y basando su juego en el interior sacaron los dos primeros parciales 2-8 y 7-15 con elevada participación de Radovic en el aspecto ofensivo. El parcial siguió aumentando hasta el 7-21 cortado por un triple de Landry que escoltado por White consiguieron menguar la ventaja hasta que Toolson cerró el primer cuarto con un triple 21-25.

Fue un partido de muchas imprecisiones. Durante el segundo cuarto ambos equipos se negaron a ponerse por delante en el marcador de forma clara. Los rusos con sus fallos desde 6’75 parecían sentirse cómodos a menos de cinco puntos y los pimentoneros no terminaban de despegarse en el electrónico. De hecho, los equipos se fueron a las duchas prácticamente empatados si bien Baron en jugada personal ponía algo de terreno sobre la bocina 36-39.

Los universitarios siempre empezaron fuertes. En todos los cuartos los murcianos salieron a por el partido, el segundo no fue menos y arrancó con un parcial de 0-4 con canastas de Faverani, pero sendos triples de Toolson y Timma no sólo devolvían la igualdad, sino que ponían al equipo de San Petersburgo por delante por primera vez en el partido 44-43.

Las pérdidas lastraron a los murcianos, pero el desacierto local a pesar de su buen movimiento de balón, convirtió el partido en un cúmulo de despropósitos del que UCAM una vez más salía vivo, y por delante a final del tercer cuarto 54-55.

En el cuarto buen arranque universitario una batería de triples de Campazzo, escudado en Baron y Antello pusieron la máxima en el marcador a falta de 5:54 (57-68). Pero nuevamente las pérdidas permitieron a los locales recuperarse hasta que apareció estelarmente Markovic para apretar el marcador desde 6’75. White con un 2+1 dejaba el marcador en un emocionante 72-74. Murcia no aprovechó su ocasión y Timma empató, partido a la prórroga.

UCAM es Campazzo para lo bueno y para lo malo. Con el 72-74 Campazzo sale de un dos contra uno, Landry le sale al argentino liberando a Faverani y el cordobés intenta la bomba cuando una asistencia al pívot brasileño hubiera evitado la prórroga. Un fallo sí, pero el base es el líder del equipo, y robó un balón que tras el 74-74 hubiera supuesto un mal aún mayor. En la prórroga el motor murciano se hizo con las riendas y tras cuatro minutos de intercambio de canastas lanzó a su equipo con un estratosférico triple 81-84. El fallo de tres tiros libres, dos Delía y uno el propio Facu, sembraron incertidumbre, pero el propio Campazzo se encargó de cerrar el marcador 83-85.