Completando el pleno de victorias locales en este arranque del Top8, Laboral Kutxa Baskonia se ha llevado el primer choque de su serie frente al Panathinaikos, disputado esta noche en el Buesa Arena. Haciendo valer su condición de local, los de Velimir Perasovic han aguantado en el primer cuarto, se han estirado en el segundo, han machacado en el tercero y se han dejado llevar en el último. El PAO, liderado por "Sasha" Djordjevic, no pudo con el pundonor local, y solo sobrevivió durante la primera parte gracias a los 19 puntos del serbio Raduljica. El resto de jugadores verdes solo maquillaron su nefasto partido en el último cuarto, con todo ya decidido. Baskonia pone un 1-0, que estadísticamente es demoledor (el 84% de los equipos que ganan el primer partido llegan a la Final Four), dejando muchas dudas en el cuadro ateniense.
Lo único negativo, la lesión de Hanga. Se retiraba, a falta de un minuto de finalizar el tercer cuarto, con una clara cojera y yendo directamente a vestuarios acompañado del médico. Y aunque ha vuelto a banquillo unos minutos después, en la rueda de prensa Perasovic ha hablado de una posible rotura de fibras (aunque en zona mixta también se hablado de una simple contractura). Su posible baja el viernes, a falta de confirmarse o desmentirse, podría unirse a las de Causeur y Shengelia, completando un trío de bajas demoledor: escolta titular, alero titular y ala-pívot titular. Todo un reto para los baskonistas.

Hablando propiamente de lo ocurrido en la cancha, el choque arrancaba con un Panathinaikos valiente.Un triple de Williams abría el marcador, mientras que un 2+1 de Raduljica contrarrestaba el triple con el que Adams inauguraba la puntuación local: 3-6 en dos minutos llenos de intensidad. En unos minutos marcados por la igualdad Diop era incapaz de parar al serbioRaduljica, que ha terminado el primer cuarto con 9 puntos. Solo la salida de Bourousis detuvo la sangría. Con una defensa más incisiva y 6 puntos (un triple y un 2+1) del interior griego,Baskonia conseguía irse al descanso entre cuartos dos puntos arriba: 18-16. Un cuarto pleno de lucha como se merece un partido de Top8.

Aunque el segundo cuarto comenzaba con una nueva canasta de Raduljica para los griegos, el Baskonia respondía con un triple de Blazic. El intercambio de canastas continuaba con una nueva canasta del serbio del PAO, y un nuevo triple local, en esta ocasión de Hanga. Pero un triple más, de James, y una canasta, tras rebote ofensivo, de Corbacho cerraban el parcial de arranque azulgrana: 11-4 y un 29-20 que suponía la primera ventaja importante para los de "Peras". Panathinaikos deambulaba por la cancha, y solo Raduljica parecía estar centrado. Otras dos canastas más del pívot visitante (los 8 primeros puntos del PAO en este cuarto fueron suyos) no servían para detener el vendaval gasteiztarra. Otra triple de Blazic y tres tiros libres seguidos de Planinic dejaban en nada sus esfuerzos y daban la máxima ventaja de la primera parte al Laboral Kutxa: 13 puntos (37-24). Tres puntos de Gist, en el último minuto, recortaron un poco la desventaja de los atenienses, pero no consiguieron bajar de diez la diferencia al paso por vestuarios. Baskonia daba el primer golpe en el partido con un +11 al final del segundo cuarto: 39-28.

Volvió a anotar la primera del cuarto el PAO en el tercer cuarto, incluso la segunda (39-32), pero fue un espejismo. Tras un primer minuto poco acertado, comenzó el festival baskonista. Un parcial de 15-2 en cuatro minutos, coronado con un triple inverosímil de Adams, rompían definitivamente el choque y daban al Laboral Kutxa un +20 que resultó una lápida insalvable para los griegos: 54-34 en el minuto 5 del tercer cuarto. Panathinaikos se revolvería y trataría de volver al encuentro, pero los gasteiztarras estaban totalmente metidos en un partido que querían ganar si o si. Dos tiros libres de Bourousis, a falta de algo más de un minuto para cerrar el cuarto, ponía un +22 en el marcador (64-42) que marcaría la máxima diferencia del choque. Al final del cuarto, rematado con un nuevo triple de Adams, un 67-49 que dejaba sentenciado el choque. ¿El único lunar? La ya citada retirada, por lesión, de Adam Hanga.

Como se ha visto muchas veces esta temporada en el Buesa Arena, el último cuarto se jugó por obligación. Diez minutos que solo sirvieron para que jugadores como Vince Hunter o Haynes maquillaran su desastroso partido. Baskonia mantuvo el control durante medio cuarto, para después dejarse llevar. Un 5-0 final (con tres tiros libres de James y una canasta de Bertans) cerraban un choque que siempre tuvo dos colores: azulgrana. Fuerte golpe en la mesa de los de Perasovic, que volvieron a reivindicar el fortín en el que se ha convertido el Buesa Arena (12 victoria en 13 partidos disputados en esta Euroliga), y decepcionante puesta en escena de los de Djorjevic, que mostraron su peor versión y no parecieron tener claro que deben ganar un partido en Vitoria-Gasteiz. El viernes será la segunda cita. El PAO deberá mejorar, y mucho, ya que un 2-0 sería casi definitivo. Por su parte, Baskonia deberá seguir con la misma dinámica mostrada hoy. Si lo consigue, tendrá gran parte del billete a Milán en su bolsillo.
Destacar entre los baskonistas los 15 puntos y 6 rebotes para 21 de valoración del "rey" Bourousis, los 11 puntos, 2 rebotes y 6 asistencias para 19 de valoración de James, los 20 puntos y 4 asistencia para 15 de valoración de Adams y los 7 puntos y 11 rebotes (6 ofensivos) de Kim Tillie. Destacar también a Darko Planinic (7 puntos y 4 rebotes en 12 minutos), cuya irrupción, mediado el segundo cuarto, paró en seco la aportación de, la gran estrella de Panathinaikos esta noche, Miroslav Raduljica. El serbio finalizó el encuentro con 21 puntos y 6 rebotes para 28 de valoración, pero su aportación tras el descanso fue mínima.