Muy bien pintan las cosas en este Joventut que ayer perdió contra Estudiantes. Con un solo extranjero, tras la baja final de Shirley, y apoyados en el excelente trabajo de Radulovic, Tabak, Bueno (más de un madridista debe estar dándose de cabezazos contra la pared ante la pérdida de esta espectacular pareja), el conjunto de Manel Comas fue capaz de remontar una desventaja de dieciocho puntos en el segundo cuarto hasta poner en serios aprietos a los colegiales. A poco que se adapte Shirley, los verdinegros pueden ser la sorpresa de este final de temporada.

Por parte local, cabe destacar el excelso trabajo de Germán Gabriel, brillantísimo en el juego interior y Nacho Azofra que hizo y deshizo lo que quiso ante los bases verdinegros. Empezó el partido impreciso y equilibrado por ambas partes hasta que llegó el momento de Germán, al inicio del segundo cuarto. Tras la inteligente táctica de Pepu situando a Vidaurreta sobre Tabak (tres faltas del estudiantil en otros tantos minutos, compensadas sobradamente por el desgaste físico y psicológico del croata), empezó el espectáculo en Vistalegre. El duelo Germán- Antonio Bueno iría poco a poco decantándose del lado del poste colegial, mejor acompañado que el ex-madridista, que fue el único punto de apoyo del conjunto catalán en un segundo cuarto de zozobra. Al descanso, 46-28 para los madrileños en un partido sin color hasta ese momento.

La bronca del descanso del expresivo Comas debió hacer efecto en el alicaído Joventut, que salió al parqué dispuesto a todo, mientras que Estudiantes entró en una dinámica de relajo que pudo haberle costado muy cara al final. Entre Bueno y Espil, con la colaboración de un acertadísimo Radulovic, máximo anotador con 25 puntos , que aprovechaba su polivalencia abriéndose al juego exterior (4/6 triples) conseguirían remontar en este tercer cuarto hasta dejar en el luminoso un esperanzador 62-55.

Ante los nervios colegiales, el conjunto catalán fue capaz de remontar hasta llegar a situarse por delante en el marcador. Pero el Joventut pagaría caro el esfuerzo realizado. Las progresivas eliminaciones de Bueno, Tabak y Vázquez y la mayor profundidad de banquillo de los de Hernández, con un Nacho Azofra magistral en los últimos compases y Felipe Reyes, que volvió a ser decisivo, acabarían con los sueños de victoria de un bravísimo Joventut. Al final del encuentro, el conjunto colegial acabaría con victoria colegial por 86-77, ante el acaloramiento de Manel Comas, que se vería castigado con una justa técnica por protestar una clarísima falta antideportiva de Espil.

El técnico verdinegro cargaría en rueda de prensa contra el arbitraje, aduciendo la eliminación de tres de sus hombres contra ninguno de Estudiantes y el haber lanzado 25 tiros libres menos que Estudiantes. La verdad es que el juego del Joventut, arriesgándose al máximo en defensa para remontar el resultado, y cargando menos el juego interior que el colegial, ayudó mucho a esas eliminaciones y a esas diferencias en los tiros libres, bastante lógicas cuando se tiene enfrente a uno de los equipos que más cerca del aro juega de la liga.

El mejor del partido: Antonio Bueno

Impresionante el encuentro del joven poste, que aporrea con vehemencia las puertas de la selección. Un tipo duro, sin importantes carencias técnicas y con un buen tirito de cuatro metros, que debe ser el próximo “junior de oro” en vestir la elástica de la nacional. Poderoso en el rebote en ambos aros, expeditivo en defensa y decisivo en ataque, fue junto a Tabak el enganche al partido de un Joventut que acusó en demasía su falta de profundidad de banquillo y el mal juego de sus bases. 18 puntos y 14 rebotes que son indicativos del gran trabajo realizado por el pívot verdinegro.

Estadísticas:

Adecco Estudiantes, 86 (20/26/16/24): Brewer (14), Miso (3), Jiménez (14), Keefe (0), Reyes (14);Vidaurreta (0), Azofra (6), Gabriel (20), Iturbe (2), Jasen (2), Loncar (11).

Joventut, 77 (16/12/27/22): Jofresa (5), Vázquez (6), Radulovic (25), Bueno (18), Tabak (13); Marco (0), Espil (10), Drame (0), Labeyrie (0).