Resultado: Pamesa Valencia 95 – Unicaja 71

95 – Pamesa Valencia (28+19+25+23): Popovic (5), Rigaudeau (7), Kammerichs (6), Dikoudis (15), Oberto (11) -cinco inicial- Paraíso (12), Montecchia (5), Abbio (13), Tomasevic (8), Asier García (8) y Luengo (5)

71 – Unicaja Málaga (23+10+14+24): Cabezas (14), Sonko (12), Herrmann (19), Phillip (7), Alexander (9) -cinco inicial- Gabriel (4), Bullock (-), Rodríguez (4) y Risacher (2)

Arbitros: Llamazares, Pérez Pérez y Bulto. Eliminaron por faltas personales al visitante Rodríguez (m.39).

Incidencias: partido correspondiente a la cuarta jornada de la Liga ACB disputado en el pabellón de la Fuente de San Luis ante 8000 espectadores.

Crónica

"¡Ha sido increible!", le comentaba Paco Olmos a Sandro Abbio al salir juntos de la rueda de prensa que ambos acababan de conceder a los medios de comunicación. Se refería, claro está, a esa jugada a falta de 36 segundos del final del primer cuarto en la que Abbio, tras saque de fondo, encestaba un magnífico triple desde tres cuartos de cancha sorprendiendo a propios y extraños, primero por haber realizado el tiro y segundo por haberlo convertido de manera limpia. "Quedaban dos segundo para el final de la posesión de Unicaja cuando Dimos ha hecho falta" -proseguía Olmos- "y ese es el reloj que has visto tú, pero quedaban más de treinta segundos de cuarto".

La cara de Montecchia que esperaba el pase para subir el balón era la mejor definición de sorpresa que se ha visto nunca, seguida por una sonrisa que mostraba que acababa de presenciar algo increíble, al igual que el público que estalló en una enorme carcajada al ver que el despiste del bueno de Abbio acababa en tres puntos. A su vez Popovic lo celebraba en el banquillo como si se hubiera conseguido la canasta del millón.

Esta fue la anécdota del partido, pero también refleja la realidad del mismo. Al Pamesa le salió todo y al Unicaja nada.

El festival anotador de los locales tuvo su equivalente recital defensivo y les salió un partido redondo. Por fin Montecchia ha disipado las dudas que estaba dejando al principio de temporada, que hacían incluso dudar de la marcha de Rodilla, y se convirtió en el gran director de juego que todos esperan de él. Con tan sólo dos tiros a canasta y cinco puntos alcanzó 21 de valoración.

De los nuevos, Dikoudis estuvo sensacional sobre todo al principio del partido, cuando aún era partido, sin embargo, Rigaudeau sigue desaparecido en combate y no debió causar muy buena impresión al periodista de L’Equipe que había venido a verle. Popovic regular.

Por parte de los visitantes, tan sólo Cabezas mantuvo el tipo y a su equipo en el partido durante el primer cuarto, justo hasta que apareció Montecchia, mientras que Herrmann y Sonko se dedicaban al final del partido a maquillar estadísticas y los casi 40 puntos de desventaja que llegaron a tener en contra (83-47 al comenzar el último cuarto).

Pese a las bajas de Weiss y Kornegay a los malacitanos se les tiene que pedir más. Entregaron el partido nada más comenzar el segundo cuarto y fueron incapaces de superar la intensísima defensa que planteó Pamesa, con continuos 2 y 3 contra uno a los hombres interiores de Unicaja, que no veían más que un auténtico muro. Muro que, sin duda, ha ayudado a construir el recuperado Abbio.

La clave: 11 de 13 triples. Fue algo increible, desde todas las posiciones y en todas las situaciones posibles, hasta 7 jugadores del Pamesa anotaron desde más alla del arco de 6.25

El mejor: Montecchia Hizo, quizás, su mejor partido como jugador del Pamesa, liderando a una plantilla que por primera vez apareció consolidada en equipo. 8 asistencias, 3 recuperaciones, 1 tapón, 2 faltas recibidas y tan sólo una pérdida de balón como aspecto negativo del juego.