Empezó la temporada como un auténtico ciclón. En los primeros partidos, espectaculares estadísticas anotadoras que confirmaban que Carl English era uno de los mejores encestadores de la ACB. Un cañonero puro y duro que con sus actuaciones iniciales era uno de los principales responsables del gran comienzo de temporada de los suyos. Y sin embargo, un día la pólvora se mojó y parece que la efectividad del alero se ha visto resentida

En Manresa ya se le fundieron los plomos, con un partido en el que no le entró ningún triple de cuatro intentos y en el que acabó con un -9 de valoración, algo sorprendente e inusual para un jugador de su talla. Después, frente al Bruesa, correcto acierto en tiros de dos (6/12) pero de nuevo agua en los triples. Parecía atascado más allá de la línea de tres. Y los peores temores se confirmaron ayer por la mañana en Madrid, cuando English solo pudo aportar un punto a la suma total de su equipo. Su 0/8 en tiros de campo habla por sí solo. “Está atravesando por una mala racha, algo que suele ocurrirle a los grandes tiradores” comentaba su técnico Salva Maldonado en la rueda de prensa posterior al choque. No obstante, la poca efectividad que ha mostrado en los últimos encuentros uno de sus referentes en ataque, no hace saltar las alarmas “Me tiene relativamente preocupado, aunque para mí su desacierto no es un gran problema. Quiero que tire, le digo que tire”.
 

Es cuestión de que una de las sensaciones en este arranque liguero vuelva a entonarse. Entonces, regresará el espectáculo.