La pretemporada tiene estas cosas. Plantillas sin conjuntar, necesidad de ajustes, sistemas por desarrollar. En este contexto se presentaba el encuentro que decidiría el campeón del trofeo madrileño. Quien más provecho sacó a la situación fue el Real Madrid, cuya defensa ahogó desde el salto inicial al Estudiantes, lo que se tradujo en un primer parcial de 9-0. Mariano de Pablos colocó en el quinteto inicial al joven Daniel Clark, que no defraudó al técnico estudiantil. Los primeros seis puntos de los colegiales fueron del pívot inglés. Sin embargo, el atasco ofensivo estudiantil era monumental y el Madrid abría hueco: 26-13 y 30-15. Los del Ramiro, doblados en el marcador, eran incapaces de superar la defensa dispuesta por Plaza. Mientras, los blancos iban a los suyo, pero sin alardes. Les bastó con ajustar las líneas defensivas para despegar en el electrónico. Bien dirigidos por Tunceri y Llul y ayudados por unos buenos minutos de Felipe Reyes y del conjunto en general, los actuales campeones de la ACB se movían cómodamente por el parquet, manejando ventajas de diez puntos que les permitían jugar sin demasiados sobresaltos (36-25 al final de los dos primeros cuartos)
Después del descanso, el Estu, con un valeroso y peleador Sergio Sánchez (18 puntos) arremetió contra la muralla defensiva. Merced a ello, el Estudiantes cercó al conjunto dirigido por Plaza (43-38), que resolvió su pequeña crisis con tres contraataques consecutivos tras robo de balón para dejar las cosas en su sitio (49-38) o no. Porque el Estu, lejos de rendirse, le endosó otro parcial a los blancos (11-3) y de nuevo se situó a cinco puntos (64-59). Sin embargo, hasta ahí llegaron sus fuerzas. Sergio Sánchez seguía en su empeño, pero estaba demasiado desasistido. El trío interior Pietrus- Lewis- Torres sumó dos puntos en todo el partido, paupérrima aportación para un equipo que tiene como objetivo los play-off. De Pablos, buen conocedor de lo que tiene entre manos, sin duda que sabrá sacar mejor provecho de tres jugadores que pueden aportar muchísimo cada jornada.
Por parte del Madrid, destacar el debut de Pelekanos y la presencia en la cancha del joven Bogdanovic, que se mostró algo nervioso en determinados momentos. El griego cumplió con su cometido, esto es, no desagradar en su debut con la camiseta blanca.
El Real Madrid, con el torneo de la CAM en sus vitrinas, centra ahora sus vistas en Bilbao, donde se celebrará la Supercopa, título que aún no ha conquistado.