El Real Madrid se recupera paulatinamente de la depresión que le asoló en el mes de diciembre. Si el final de 2009 fue desastroso para los blancos, el inicio de año está siendo algo más feliz para los hombres de Messina. Y para Felipe Reyes. El cordobés se perdió los duelos frente al Regal Barça y al Asefa Estudiantes por culpa de una lesión en la cara. Recuperado, luciendo una máscara que le asemeja a los jugadores de hockey, Reyes ya dio muestras el pasado miércoles de que volvía con ganas. Contra el Oldenburg alemán firmó 7 puntos y 5 rebotes más 8 faltas recibidas.
“Me he encontrado bastante bien. Tenía miedo de perder todo lo que gané en las semanas previas a mi última lesión, pero no ha sido así. Lo único malo es que jugar con máscara es bastante incómodo”, nos comentaba tras ese enfrentamiento.
Cómodo o no con la protección facial, Felipe ha demostrado en dos partidos que está para lo que le necesiten. Mucho se ha hablado de que con su entrada en la rotación tras la baja por los problemas en el gemelo, el Madrid perdía su sentido de juego.
También se ha dicho que Reyes no pega con el sistema de Messina y sin embargo, él, a lo suyo, se ha encargado hacer su labor y paulatinamente la importancia del pívot se debe revalorizar dentro de la rotación madridista.
Ayer disfrutó de 22 minutos en los que anotó 11 puntos y capturó 5 rebotes. Todavía se encuentra algo lejos del nivel que le dio el MVP de la Liga Regular de la ACB la temporada pasada y lejos también del soberbio Lavrinovic, que cuando se entona es un armario imparable, capaz de llegar a todos los rebotes, de desesperar a sus rivales con sus eternos brazos y de hacer dobles dígitos, con 18 tantos 12 rebotes y 4 tapones.
Messina ya destacó el pasado miércoles tras el duelo de Euroliga que una de las mejores noticias de ese partido gris que se acabó llevando el Madrid era la vuelta de Felipe. El jugador debe seguir creciendo esta temporada. Con él en plena forma y la posible llegada de un pívot de refuerzo, más toda la batería de jugadores de la que dispone el Madrid, los blancos tendrán mucho que decir.
Y es que las sensaciones de su enfrentamiento contra el Suzuki Manresa volvieron a ser las de un equipo solvente, con capacidad para apuntillar al rival cuando es preciso. Novena victoria seguida para los de la capital en el feudo de los manresanos. Y con Felipe, de ahora en adelante.