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El Ayuda en Acción Fuenlabrada sufrió la octava derrota de la temporada al caer en el otrora inexpugnable Fernando Martín en la decimotercera jornada de la liga ACB por un ajustado 81 a 84.

La contienda resultó igualada, intensa y con dos equipos que no bajaron los brazos en ningún momento y entre los que no hubo grandes diferencias… a excepción del rebote.

El Suzuki Manresa fue superior al Fuenla en este sentido durante todo el partido, a pesar de que Ahmad Nivins, su tercer jugador interior en la rotación, sufrió uan aparatosa lesión que lo obligó a salir del pabellón en camilla.

Todavía se reconoce el alcance de la lesión de Nivins, pero sus gestos de dolor y la tensión de la espera hasta que los servicios médicos pudieron retirarlo del parqué hacen presagiar que el americano pueda que el alcance de un mal aterrizaje tras un poderoso vuelo sea grave.

Pero ahí estaban Kaloyan Ivanov (9 rebotes), Brian Cusworth y los suyos para capturar 36 rebotes (por 23 del Fuenla). De hecho, la real diferencia fueron los 15 rebotes ofensivos que se llevaron los de Jaume Ponsarnau, 15 nuevas oportunidades de lanzar, 15 posesiones extra que fueron demasiado para el equipo local.

El mal partido de Esteban Batista fue otro lastre importante. Ni sus números (6 puntos, 2 rebotes) ni su actuación global (tercera falta personal en el minuto 5, sólo jugó 18 minutos) fueron dignas de un jugador de su talla.

Chus Mateo dijo de él que tiene antes de esperar que los árbitros le respeten debe respetarse a sí mismo. "Esto lo logrará saliendo concentrado al partido, dando un paso adelante en agresividad para que no le piten dos faltas muy pronto y dejando de hablar con los árbitros".

También es destacable el gran encuentro que se marcó Román Montáñez, que cumplía su partido número 100 defendiendo la "samarreta" manresana y lo celebró con 25 puntos (4 de 6 en triples).

Con esta victoria el Suzuki Manresa puede soñar con la Copa del Rey, ya que se sitúa con 7 victorias, una más que un Unicaja que viene fuerte desde abajo reclamando una plaza en Bilbao.

Por su parte, el Fuenla ve cómo la reacción que tuvo en Gran Canaria se apaga a pesar de los buenos números de Tskitishvili, y con sólo una victoria de ventaja sobre el segundo equipo en descenso.