Empezó Blusens dominando los primeros minutos del cuarto mostrando su seña de identidad, intensa defensa con continuos cambios de hombre en cortes y bloqueos que desorientaba el ataque taronja. El entramado defensivo de Moncho Fernandez surgía efecto y les permitía correr y anotar en transición, cuando Perasovic detuvo el encuentro el marcador reflejaba un 6-0 y los platos rotos los pagaron los interiores valencianos. Mejri dominaba ambas zonas ante la pasividad del rival, pero los visitantes comenzaron a encontrar el camino gracias al acierto en el tiro exterior de Kelati y Ribas que enganchaba a Valencia al encuentro. Corbacho cerraba el cuarto con una canasta memorable sobre la bocina que adelantaba a Obradoiro 18-17. La aparición de Doellman y Faverani en el juego interior terminó de adaptar a Valencia al encuentro. Las situaciones con Doellman abierto y Faverani en la zona junto a la amenaza exterior de San Miguel y Kelati comenzaron a crear serios problemas a la defensa gallega. Empezaba a fraguarse el festival ofensivo de Doellman que comandaba el parcial valenciano, mientras el ataque gallego se volvía largo y espeso. La falta de acierto de Hummel lastraba el ataque gallego y Valencia abría brecha en el marcador con un parcial de 0-11 que daba ventaja de seis puntos a los visitantes en el ecuador del cuarto.Doellman continuaba con su particular “suma y sigue” y terminaba el cuarto con quince puntos que otorgaban ventaja a su equipo en la visita a vestuarios, 33-39.
Doellman comenzó en la reanudación en plena forma, seis puntos de forma consecutiva aumentaban todavía mas la diferencia toronja y forzaba el tiempo muerto local. Blusens no lograba frenar la sangría de puntos que le llegaban desde las situaciones de bloqueo directo en cabeza. Con los triples de Kelati y San Miguel el equipo de Perasovic alcanzaba la máxima diferencia, catorce puntos a menos de tres minutos. Las quejas sobre las decisiones arbitrales empezaban a aflorar y el cuarto se cerraba con un triple de Hummel que ni siquiera tocaba el aro, 53-61. Blusens encontró en el tiro exterior la forma de hacer daño a la defensa naranja. La aparición estelar de Corbacho liderando cada uno de los ataques de Blusens culminándolos con un 3/8 desde la línea de tres puntos hizo posible la remontada gallega a menos de dos minutos. Pero otra vez más Justin Doellman rescató a su equipo con dos tiros libres y un triple en los instantes finales que finiquitaban las esperanzas gallegas.