El Lucentum Alicante se ha impuesto por 60 a 64 en Fuenlabrada, sobreponiéndose a una dura prueba en su camino hacia la Copa del Rey y remontando un resultado adverso, tras conceder hasta 10 puntos de ventaja.
El hecho de que Kaloyan Ivanov no haya tenido su mejor partido de cara al aro ha influido en el devenir del encuentro. Sin embargo, el búlgaro no ha dejado de aportar en otros aspectos, insuflando ánimo a los suyos y capturando cada balón suelto -acabó con 17 rebotes-.
El Fuenla tuvo un buen comienzo, con Quino Colom al mando de las operaciones y Saer Sené ocupando la pintura por completo. El senegalés ha sido un ciclón defensivo que ha puesto hasta 6 tapones y ha dficultado otros tantos tiros, condenando el ataque de un Lucentum que llegó con sólo 27 puntos al descanso.
Sin embargo, Sené no ha tenido la misma aportación en ataque, y el Fuenla se vio atascado en el tercer período, anotando sólo 10 puntos y permitiendo que el Lucentum se acercara peligrosamente.
El partido desembocó en un final de infarto en el que Pedro Llompart primero puso a los suyos al borde del abismo, al serle señalada una técnica tras lanza el balón contra el suelo como muestra de frustración tras unos pasos, y luego sentenció el choque con un triple y un tiro libre que estableció la diferencia definitiva de 4 puntos.
Kirk Penney asumió el protagonismo ofensivo que ha dejado huérfano la salida de Gustavo Ayón. En la primera parte Penney estuvo acertado, pero en los minutos finales se convirtió en la única alternativa que buscó el Fuenla y la ausencia de acierto en esos instantes supuso el fin de las esperanzas de los de Fisac.