La marcha del pívot estadounidense, antes del quinto y decisivo partido de la semifinal de la ACB que le enfrentaba al Real Madrid, a su casa por una supuesta enfermedad grave que sufría su padre ha provocado el enfado del entrenador y de la entidad vitoriana.

Después de la derrota de los vitorianos que les costó la eliminación, Ivanovic expresó su descontento con la actitud del jugador y declaraba que en esas condiciones no le interesaba que continuase la temporada que viene en su equipo.

El técnico matizaba incluso que entendería que por una causa grave se fuera pero siempre avisando al club con antelación, hecho que no se produjo que por lo que incluso dudaba que la razón de su marcha fuera real.