El Barça Basket sigue acumulando contratiempos. Durante el partido de cuartos de final de la
Copa del rey de baloncesto ante La Laguna Tenerife,
Kevin Punter tuvo que abandonar la pista tras sufrir una lesión en el hombro izquierdo. Un golpe durísimo para los azulgranas, que no solo vieron cómo se les escapaba el partido (91-86), sino que ahora enfrentan la incertidumbre sobre el estado físico de uno de sus jugadores más importantes.
LA LESIÓN DE KEVIN PUNTER EN LA COPA DEL REY DE BALONCESTO
El incidente ocurrió apenas unos segundos después de comenzar la segunda mitad. Punter, que tenía el balón en una acción ofensiva, intentó dar un pase y, de inmediato, hizo un gesto de molestia. El escolta estadounidense notó el problema al instante y solicitó atención médica. Punter, que
llegaba a las islas muy entonado,
se retiró con el brazo en cabestrillo rumbo a los vestuarios.
La preocupación en el banquillo culé era evidente.
Joan Peñarroya, al ver la escena, se llevó las manos a la cara con gesto de resignación, sabiendo que la situación no pintaba bien. Tras el partido, el técnico confirmó la gravedad del asunto:
“Le tienen que hacer pruebas. Está preocupado”. Ahora, el Barça Barça espera los resultados de las pruebas médicas para conocer el alcance de la lesión de Punter. Su baja, de confirmarse como algo serio, supondría un problema aún mayor para un equipo que ya ha sufrido numerosas ausencias esta temporada.
UN ANTES Y UN DESPUÉS PARA PEÑARROYA Y EL BARÇA BASKET
Hasta el momento de la lesión, el Barcelona mantenía una de siete puntos ventaja en el marcador, con el control del ritmo del juego. Sin embargo, la salida de Punter coincidió con un
cambio drástico en la dinámica del encuentro. En palabras de Peñarroya: “
Las pérdidas nos castigaron mucho y coinciden con la baja de Kevin Punter. Enlazamos tres o cuatro pérdidas seguidas y Tenerife empezó a coger la iniciativa”.
Sin su escolta estrella, el Barça Basket perdió fluidez ofensiva y vio cómo su rival remontaba en la segunda parte. La
ausencia de revulsivos en el banquillo y la falta de reacción ante la adversidad dejaron en evidencia una fragilidad que el equipo ha mostrado en varios momentos de la temporada. El golpe de la eliminación y la lesión de Punter dejaron un ambiente de frustración en la zona mixta.
Joel Parra, visiblemente afectado, lo resumió con crudeza: “Estamos muy jodidos. Hay que hacer autocrítica”.