Mirza Teletovic llegó de puntillas al Baskonia, a priori como cuarto pívot. Sus primeras referencias eran un tanto confusas, puesto que aunque tenía medidas de cuatro, sus números eran los de un alero. Ayer ante el Murcia demostró sus mejores cualidades, y la principal es el tiro exterior.

El bosnio de Mostar disfrutó de 32 minutos en la victoria de su equipo, un tiempo que aprovechó a la perfección, aprovechando la ausencia de sus compañeros Splitter y Scola. Anotó cinco de sus siete triples intentados, además de dos canastas de 2 y otros dos tiros libres, en una exhibición de puntería digna de escoltas especialistas.

En el lado murciano sobresalió Juanjo Triguero. A sus 22 años, superó a sus defensores en todo momento, castigando los aros del pabellón baskonista con cinco mates, intimidando con sus tres tapones, capturando ocho rebotes -máximo reboteador junto a Peker- y anotando nueve de diez lanzamientos de dos.

El partido no pareció demasiado complicado para el Baskonia, que se aseguró la victoria con su ya típico sprint en el último cuarto, pero lo más importante de los 40 minutos vividos ayer fue el certificar que la ACB alberga un prometedor futuro en su interior.