El Barcelona llegó al Palacio de los Deportes con la baja de Navarro y en una situación algo menos límite después de la victoria ante el Pamesa, pero que no deja de ser precaria. Sin embargo, un gran final de primer cuarto por parte de Lakovic (que se multiplicó junto a Basile para sustituir al lesionado campeón del mundo) y Marconato pronto permitió a los de Ivanovic encarrilar la contienda.

El Estudiantes no hacía aguas en defensa merced a la aportación de McDonald en la pintura y el tiro exterior de Iturbe, pero el segundo cuarto dejó a la vista la debilidad de su defensa ante el poderoso ataque blaugrana, que consiguió una efectividad del 50% desde detrás del arco y del 77% desde dentro antes del descanso.

En el tercer cuarto Pedro Martínez vio como la casta estudiantil afloraba encarnada en la figura de Hernán Jasén, que a base de sus típicas penetraciones kamikaces, intensidad buscando el rebote y toques de calidad individual rompió el entramado defensivo de Dusko y lideró la remontada.

Pero la pasión debe ir acompañada de acierto, y fue el francotirador Marlon Garnett el que lo aportó, con dos triples que apuntillaron al Winterthur Barcelona. El primero de ellos dio la vuelta al partido (78-79). El segundo, en el último instante del choque, sirvió para establecer la diferencia en los 10 puntos finales.

No menos destacada fue la actuación de Will McDonald. El ala pívot estuvo intenso en el ataque y fue la referencia durante los minutos iniciales, y al final del partido estuvo siempre atento para asegurar rebotes y capturar balones divididos que podrían haber dado vida al Barcelona.

El MMT Estudiantes sella su buen inicio de temporada con el 3-1 que refleja su balance en la clasificación, mientras que con esta derrota el Barça vuelve a la dinámica perdedora que lleva desde el inicio de esta campaña. Esta vez el ataque no fue malo, pero la defensa -a pesar de tener a De la Fuente sólo 18 segundos en el banco- hizo aguas cuando más falta hacía.