La intensidad de Jeff Taylor en la marca sobre Askia Booker aceleró el ritmo inicial de partido. Un arma de doble filo para el Real Madrid: las imprecisiones cortocircuitaron también el ataque de Pablo Laso. Campazzo intercalaba errores con canastas en el perímetro (20 puntos). Doyle aprovechó el espacio para sumar de dos en dos y alimentar el sueño de la victoria (10-5).

Tavares no tardaría en intimidar la apuesta local. Su presencia compensó las pérdidas de balón de sus compañeros y el acierto exterior de UCAM Murcia (10-11). La velocidad del juego se había desplomado. Ni siquiera el ambiente del Palacio de los Deportes parecía el de otras ocasiones. El intercambio se mantuvo hasta la conclusión del primer cuarto (18-19).

Manu Lecomte comandó a los suyos frente a la irrupción de Rudy Fernández y Jaycee Carroll (23-28). Sería la segunda unidad pimentonera la que amenazara la dinámica madridista. Hunt y Radoncic aportaron intangibles defensivos y un buen puñado de puntos. El rebote ofensivo era para los de Sito Alonso. Parcial de 8-0. Solo la falta de acierto de Booker limitó las opciones universitarias. La conexión entre Campazzo y Ayón mantendría la distancia antes del obligado paso por vestuarios (37-39).

La reanudación sería testigo del resurgir de Booker. La confianza del norteamericano no para de crecer. 8 puntos en serie para contrarrestar un mayor equilibrio blanco (48-49). El empuje visitante crecía gracias al ímpetu de Facundo Campazzo. La facilidad del argentino para atacar el 2 contra 2 azotó el choque (48-56).  Ovie Soko y Kyle Hunt tuvieron que duplicar su esfuerzo para evitar la supremacía interior del rival (52-63). La osadía mereció la pena. El duelo revivía antes de abordar el último periodo (56-63).

La esperanza se disparó en la grada gracias a la pausa de Brad Oleson y Manu Lecomte (64-65). Oxígeno para el irregular modelo de Sito Alonso. Rojas, infatigable en ambos lados de la pista, alteró una vez más la indiferencia merengue. La afrenta rescató a Sergio Llull, que inventó un 3+1 descomunal (66-73).

UCAM no se rendía. El control de los tableros y la paciencia de Lecomte castigaron la indiferencia de los madrileños (74-73). Murcia había volteado el marcador con Askia Booker en el banco. Walters Tavares se erigió entonces en la referencia ofensiva de su equipo sumando 4 puntos decisivos (74-78). El small ball local resistió con un portentoso 2+1 de Ovie Soko (78-77). No fue suficiente. Facundo Campazzo no perdonó desde el tiro libre y selló el triunfo del Real Madrid (80-82).