Regresaba el baloncesto a Sevilla tras la Copa del Rey y las ventanas internacionales con un atractivo partido entre Coosur Betis y Bilbao Basket. Para los béticos, otro partido más en casa con el objetivo entre ceja y ceja de seguir escapando de Montakit Fuenlabrada y Movistar Estudiantes, ahora en descenso. Por su parte, los bilbaínos llegaban a San Pablo tras plantar cara al Real Madrid en la Copa y con la sensible baja de Alex Bouteille, quien fichó por Unicaja hace pocas fechas.
Para arrancar, dominio de los hombres de negro aunque por distancias cortas en un arranque donde ambos quintetos se mostraban más cómodos en defensa que en ataque (7-9). Jerome Jordan y Andrej Balvin, pívots iniciales de ambos equipos, se ahogaban ante la presión propuesta por Curro Segura y Álex Mumbrú desde sus pizarras. Pasaban los minutos del primer cuarto y la igualdad se mantenía con alternancias en el marcador, con Erick Green enchufado desde el principio con ocho puntos y dos rebotes (16-16). Un empate que se acabaría manteniendo al final de los primeros diez minutos (22-22).
Arrancó el Betis con más acierto el segundo cuarto aunque sin terminar de despegarse de su rival (27-24). Los bilbaínos se encontraban además con el contratiempo del golpe sufrido por Ben Lammers –y con Mamadou Petite Niang también siendo atendido en el banquillo bético- y que lo llevaba al vestuario de forma temporal. Aún así, los de Mumbrú asumían de nuevo el control del marcador (31-36). Con Green de nuevo en pista, los béticos daban la vuelta al partido con un parcial de 6-0. Los de Mumbrú voltearon de nuevo el marcador antes de que el “22” verdiblanco diese al descanso un +1 para los andaluces (43-42).
Al descanso, la actuación de Erick Green en un partido igualado y tenso. El californiano se iba al vestuario con 14 puntos con 6/7 en tiros de campo, dos triples, 4 rebotes y 16 de valoración a sus espaldas. Green era el mejor de un Betis que solo logró anotar desde fuera del perímetro mediante el californiano y Nacho Martín. Por parte de Bilbao Basket, los máximos anotadores al final de los dos primeros cuartos eran Sergio Rodríguez (8) y Jonathan Rouselle (7). Por otra parte, el cuadro de Álex Mumbrú dominaba el apartado de rebotes al descanso (23-17).
El brillante AJ Slaughter de las ventanas internacionales aparecía tiraba del carro para tratar de dejar la victoria en casa (48-42). Mientras tanto, Green seguía erigiéndose como figura de la tarde. Al equipo de Mumbrú no le bastaba la superioridad reboteadora para voltear una desventaja cada vez más grande a favor de los verdiblancos (54-45). A cada intento de los hombres de negro por darle la vuelta a las cosas, el Betis golpeaba de nuevo la moral de Bilbao Basket (59-50). Una ventaja que en un abrir y cerrar de ojos estrecharon los hombres de negro (59-56). Al final de la tercera manga, el Betis se iba por delante pero con un Bilbao Basket que tenía mucho que decir aún (64-60).
La zona planteada por los vascos daba efectos y metía en apuros al Betis, que sufría con el juego interior de Bilbao (72-70). Pese a errar en lanzamientos que les permitiría ponerse por delante, el equipo vasco iba acercándose cada vez más en el marcador (72-72). Bilbao se ponía por delante y AJ Slaughter devolvía la igualdad a 4:17 por jugar (75-75). Erick Green seguía capitaneando al Betis hacia un vital triunfo (80-75). Balvin dejaba a Bilbao a un punto con menos de dos minutos por jugar y el mal ataque del Betis le daba bola para ponerse por delante con menos de dos minutos por jugar (80-79). Unos y otros erraban y la ventaja verdiblanca era mínima a falta de 21,3 segundos. Jordan dejaba a Bilbao con vida para ir a la prórroga o llevarse un triunfo de oro para tierras vascas. Quedaban 3,9 segundos y Bilbao Basket dejó en Rafa Martínez un lanzamiento definitivo que Jordan taponó para dejar la victoria en casa y poner más distancia respecto al descenso.