Duelen las derrotas, pero más la manera en las que se pierden. Minnesota Timberwolves tenían el reto de los Playoffs marcado como logro de la temporada. Su principal aval era la recuperación física de su estrella, Kevin Love, quien ya tiene su lugar en el firmamento NBA. La confianza estaba también depositada en Ricky Rubio, también ya recuperado de su lesión de ligamentos.
Sin embargo el invento no funciona. Los T-Wolves son unos gatitos en los minutos finales. Hasta el punto de haber perdido todos los partidos con final ajustado. Un 10-0 que asusta y que ha puesto nervioso, primero, a Kevin Love, y, segundo, a la prensa local.
Las redes sociales españolas amanecían esta mañana siendo testigos del primer puñetazo sobre la mesa de la crítica especializada. JimSouhan, columnista de The Tribune Star, se carga el colectivo para apuntar, amenazante, a un único culpable:
“Rubio está matando a los Wolves”. Con esta lapidaria frase remarca el escaso protagonismo /liderazgo que ha tenido el base de El Masnou en los momentos delicados. Ricky no está teniendo su mejor temporada. Así como en otras temporadas ha ido puliendo sus carencias, en el actual curso, éstas se han manifestado con una mayor evidencia. Su escasa aportación en el lanzamiento ha acabado derivando en una “falta de respeto”, dicho por Souhan, por parte del base rival. Esto, seguimos el hilo argumental del crítico, impide a los Wolves desarrollar variantes de ataque que no son posibles cuando se estrecha tanto el campo en la zona baja. Situaciones como “pick and rolls” con Love o Pekovic. Reflexión durísima: “Kevin Love no puede crear sus tiros y Ricky no puede hacer ni uno” .
"Ricky tiene el peor promedio en tiros de campo entre los bases titulares"
El periodista exculpa a Love de algún mal partido porque siempre ha mostrado su disposición –exitosa- para su mejora. Perdiendo peso, primero, labrándose un buen tiro de tres, después. A Ricky le acusa –no es la primera voz- de no haber pasado este verano practicando el lanzamiento de larga distancia. El base internacional formó parte del combinado español que disputó el pasado Eurobasket. Es una afirmación que se ha podido leer también en España, por parte de los aficionados (redes sociales, comentarios en artículos publicados en internet….). Ricky ya mostró mejoras en el tiro libre y en el triple durante los últimos años ACB. Salvo en su último año como blaugrana, que coincidió con la defunción del 6.25.
La crítica es todavía más feroz cuando se le califica como uno de los errores –han sido muchos- en las elecciones de draft de los Timberwolves. Souhan habla de fracaso cuando se dejó pasar a jugadores como Stephen Curry o Ty Lawson. Rubio fue la gran apuesta de David Kahn y no hace mucho era objeto de veneración en Minneapolis. Como lo fue Pau Gasol en Memphis. Y en Lakers.
Tras este directo a la mandíbula, hay una pequeña grieta por la que entra un rayo de esperanza para el columnista: “Rubio es la clave. Si se convierte en una amenaza ofensiva, los Timberwolves podrían jugar los playoffs”. Rubio, in you we trust (aunque sea un poco). Pero espabila.
Los Timberwolves han pasado por un calvario de lesiones y decisiones desacertadas en los despachos en los últimos años. El trueque Roy-Foye pesa mucho en el historial de la franquicia ( a pesar de la retirada por lesión de Brandon) al igual que selecciones como las del Jonny Flynn o la actual de Muhammad. Pero también hubo aciertos como el cambiar a O.J. Mayo por Kevin Love. En esta temporada, a la nulidad de la segunda unidad, hay que añadir el escaso compromiso defensivo de los interiores Love-Pekovic, la ausencia de intimidación y, claro, los problemas en el tiro de Ricky Rubio, que está en un 35% en tiros de campo. Dato determinante ya que es el peor base titular en este aspecto te toda la NBA y también es su peor porcentaje de acierto. Por otra parte, está en un 33.9% en triples, mejor que el pasado curso aunque lanza menos de dos triples por encuentro. Esto se traduce en 8.8 puntos por partido, casi dos menos que en sus dos años anteriores. Pero en el global, una ausencia de mordiente ofensiva que es la que necesita su equipo de su base titular.
El remate nos lo aclara el blogger Enrique García (@D_Mavs):
Ricky Rubio tiene un porcentaje de acierto del 18.2% en los últimos cuartos. Ha anotado 8 canastas en últimos cuartos esta temporada
— Enrique García (@D_Mavs) enero 10, 2014
Qué lejos parece que queda aquel inicio de curso brillante del Big Three de los T-Wolves.
Conjunto de mejoras y punta de iceberg. Trabajo, trabajo y trabajo. Ya está demostrado que funciona.