El legado que dejará Gregg Popovich en la NBA será incalculable. Desde que asumió como head coach de San Antonio Spurs en diciembre de 1996 posicionó a la franquicia como una de las más importantes de la NBA, consiguiendo 5 títulos. A nivel personal, se convirtió esta temporada en el único entrenador en romper la barrera de 2000 partidos dirigidos con un mismo equipo (2.045) y en el coach con más victorias en la historia con 1.344, superando a Don Nelson.
Cuando hablamos del legado del entrenador de 73 años no sólo hacemos mención al éxito dentro del parqué, sino en la cantidad de conocimiento que transmitió a lo largo de 26 temporadas ininterrumpidas en San Antonio, por las que pasaron una gran cantidad de jugadores, asistentes y colaboradores. La influencia es tal que cuatro de sus pupilos llevaron a sus equipos a las dos últimas finales de la NBA.
dos finales con 4 entrenadores made in pop
En 2021, Mike Budenholzer llevó a Milwaukee Bucks a conseguir el segundo anillo en la historia de la franquicia, consolidando todo lo aprendido con Pop en sus 17 años como su asistente. Derrotó a otro aprendiz del legendario coach, Monty Williams, quien jugó en los Spurs desde 1996 hasta 1998.y cayó en las finales del año pasado por 4-2 dirigiendo a Phoenix Suns.
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Este año, los dos equipos que lucharán por el título en la Final NBA 2022 también serán dirigidos por entrenadores made in Pop. Ambos, Ime Udoka y Steve Kerr fueron dirigidos por Gregg Popovich y luego fueron sus asistentes, por lo que adoptaron estrategias, métodos de comunicación, hábitos y, por supuesto, su ética de trabajo.
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ime udoka y steve kerr tienen mucho en común
Udoka transita su primera temporada en la NBA como head coach y no pudo haber tenido un mejor debut llevando a Boston Celtics a sus 23° finales de la NBA. El coach debutante de 44 años fue dirigido por Popovich entre 2007 y 2009. Antes de retirarse fue a jugar al UCAM Murcia y en 2011 recibió el llamado de su exentrenador para sumarse como asistente. Trabajó junto a él en el banquillo entre 2012 y 2019, por lo que sabe lo que es salir campeón de la liga (lo consiguió en 2014).
Por el lado de Kerr, fue dirigido en dos etapas por Greggy: la primera entre 1998 y 2001, y la segunda en su último año de carrera, en la campaña 2002-2003 cuando tenía 37 años. Logró los campeonatos del 1999 y 2003 jugando en los Spurs. Ya en su rol de entrenador, el head coach de Golden State Warriors fue asistente de Popovich durante cuatro años en Team USA, antes de asumir como entrenador en jefe el 20 de diciembre de 2021.
ime udoka: defensa y compromiso
Tras ocho temporadas al frente de los Celtics, Steve Kerr dejó el cargo de head coach para asumir como General Manager. Una de sus primeras decisiones fue contratar a Ime Udoka como entrenador del equipo. Las dudas sobre su inexperiencia fueron de a poco eliminadas este año. En diciembre del 2021, el equipo estaba por debajo del 50% de victorias y concluyó la Fase Regular por encima del 60%, con el segundo mejor balance del este y posicionando a Boston como la mejor defensa de la NBA (106,2 de ratio).
Es que esa fue la principal razón que explica el éxito de su equipo: la defensa. Si bien esa era la mayor preocupación de Stevens (se mantuvo entre las diez mejores defensas en cuatro de ocho campañas), con Udoka pasaron al siguiente nivel. Estableció nuevas normas como la importancia de Robert Williams III en la pintura, acompañado por aleros ágiles y dinámicos como Jayson Tatum y Jaylen Brown en los costados. Confió en la experiencia de Al Horford y en el liderazgo de Marcus Smart.
El séptimo entrenador en disputar unas finales con Celtics llevó a sus dirigidos la ética de trabajo de su maestro, Popovich y el compromiso con la defensa y el trabajo duro. En muchas ocasiones se lo vio molesto por algún desajuste defensivo o por alguna desconcentración, fiel al estilo Pop. Su mayor defecto, sin embargo, es su inexperiencia.
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steve kerr: experiencia y confianza
No hace falta hablar de los galardones de Kerr, una de las personas más exitosas que hayan pasado por la NBA, con 5 títulos como jugador y 3 como entrenador. Cuando parecía que la época de oro de Golden State había pasado, el coach de 56 años da un golpe sobre la mesa para demostrar que nunca hay que dar por vencido a los Warriors.
No fue la temporada más fácil para el oriundo de Beirut, Líbano. Las lesiones de Steph Curry, Draymond Green y James Wiseman complicaron la campaña, pero como siempre, Kerr tenía un plan B. Confió en Andrew Wiggins, Jordan Poole, Gary Payton II y les transmitió una confianza como para conquistar el mundo. No decepcionaron, levantaron su nivel y se consolidaron en la alineación titular. Cuando Curry y Green regresaron, se posicionaron como la mejor defensa de la NBA hasta diciembre. Si a eso le agregamos el regreso de Klay Thompson en enero, los Warriors se convirtieron en un equipo temible.
Sin embargo, el nivel del equipo fue de menor a mayor incluyendo los Playoffs NBA. Supieron controlar a Nikola Jokic, sufrieron pero salieron victoriosos ante la juventud de los Grizzlies y barrieron con contundencia a los Dallas Mavericks de Luka Doncic. Todas las victorias tuvieron el mismo denominador común: una defensa asfixiante y hasta llevó al estrellato a Kevon Looney, un jugador trabajador y sacrificado. ¿Made in Popovich? Probablemente.
Se enfrentan dos grandes equipos, quizás, con las mejores defensas que se han visto en los últimos años en la NBA. Sea quien sea el ganador de la Final NBA 2022, tendrá el gen de Gregg Popovich, el entrenador más influyente de la historia.