Sin dudas Miami Heat estuvo a la altura de las expectativas. Junto a jugadores jóvenes pero conocidos como Tyler Herro y Duncan Robinson, estrellas como Bam Adebayo y Jimmy Butler, especialistas defensivos como PJ Tucker, Markieff Morris y jugadores de buen nivel como Max Strus, Caleb Martin y Gabe Vincent. Todos liderados por un Kyle Lowry marcando los tiempos del equipo y sumando su experiencia de 15 temporadas en la liga. Sin mencionar la vuelta de Victor Oladipo, buen anotador y mejor defensor.
Los de Florida armaron un equipo para volver a las finales después de 2 temporadas. Con un récord de 47-25, liderando la difícil y pareja Conferencia Este, la más complicada de la NBA. Son el equipo más constante y regular junto con Phoenix Suns. A pesar de haber sufrido lesiones en varios de sus jugadores, las bajas por protocolo y las ausencias por gestión de cargas no han afectado en el rendimiento colectivo. Los jugadores secundarios estuvieron por encima de las expectativas. No es casualidad que el buen presente se deba a que tiene uno de los mejores bancos de suplentes de la NBA.
Sin embargo, en las últimas semanas, los dirigidos por Erik Spoelstra comenzaron a mostrar algunas grietas, especialmente en el clutch. No es un error menor para un equipo con intenciones de ganar un anillo. Saber cerrar partidos parejos en Playoffs es un requisito indispensable y como evidencia de eso sobran los ejemplos, sin ir más lejos lo que pasó con Toronto Raptors y Philadelphia Siers en la temporada 2018/2019. Más de un aspirante que dominó en la Fase Regular no logró salir campeón debido a este defecto.
De los diez últimos partidos que el Heat tuvo que resolver en el clutch, es decir, los últimos cinco minutos con un marcador de 5 puntos abajo o arriba, Miami sumó dos victorias y tres derrotas. Lo más preocupante no fue el nivel mostrado en esos últimos segundos en los que se debe controlar la presión, sino las estadísticas que el equipo registra en ese lapso.
A lo largo de los casi 85 minutos disputados, Miami Heat ha sido la sexta peor ofensiva en el clutch. Un récord bastante malo para un equipo contendiente. Suma apenas 97,8 puntos por cada 100 posesiones. Sumado a esto, la defensa del equipo fue ineficiente en los cierres de partido, concediendo 141,9 de ratio defensivo. Es el segundo peor dato de la liga, solo superado por unos Chicago Bulls que siguen de mal en peor. Esta mezcla de ambos ratios entrega el resultado de que Miami sea el peor equipo de la NBA en los últimos diez encuentros disputados. Cinco de esos partidos se resolvieron en el clutch, con un net rating de -51,3.
Se sabe que a lo largo de los 82 partidos que tiene la temporada, es común que los equipos tengan vaivenes y altibajos. Sin embargo, esto no parece ser solamente un mal momento en ese apartado, ya que Miami es uno de los conjuntos que peor rendimiento tuvieron hasta el momento en los cierres en toda la temporada.
En lo que va del torneo, se enfrentaron a 18 ocasiones en las que se encontraron con estas situaciones del clutch. En total, suman 20 victorias y 14 derrotas, es decir, un 58,8% de triunfos, lo que los ubica como el quinto mejor. Sin embargo, esta estadística no revela un panorama completo. Su productividad fue la más que pobre gracias a tener el quinto peor ataque (100,0) y la decimoctava peor defensa (105,3), dejando un net rating de -5,3.
Los problemas en el clutch del Heat pudieron comprobarse en las últimas semanas con mayor notoriedad. Tuvieron serios problemas para afianzar victorias en los instantes finales, cayendo ante dos rivales directos como Bucks y 76ers además de Timberwolves. También vencieron a Pistons, Spurs y Nets, todos equipos que están fuera de la zona de Playoffs.
El ejemplo más notorio y reciente ocurrió en Philadelphia, cuando cayeron 113 a 106 ante los Sixers, que sin Joel Embiid ni James Harden lograron conseguir la victoria en los instantes finales del duelo. La estrategia planificada por Doc Rivers fue atacar a Tyler Herro, quien tiene como punto débil la defensiva, aunque cabe destacar que es uno de los candidatos a Mejor Sexto Hombre de la liga.
La estrategia del coach Rivers fue la más acertada. De los jugadores de Miami que más tiempo jugaron en el clutch, Herro es quien peor +/- por cada 100 posesiones registra con un -8,8. Su fragilidad defensiva lo convierte en un objetivo prioritario del ataque rival, haciendo que estos lo busquen en los mismatch para atacar el aro o forzar faltas. Spoelstra debe elegir entre el aspecto defensivo del de Wisconsin o priorizar su gran nivel ofensivo.
Fue Tyrese Maxey, el jugador de Sixers que explotó esta temporada, quien expuso las falencias defensivas de Herro en los minutos finales. Es una cuestión importante que Erik Spoelstra deberá prestar atención en los Playoffs. Si bien Herro es un gran anotador, otra de sus falencias en el cluth es que su eficiencia cae. Promedia solamente un 36,2% de acierto siendo el que más lanza.
Por supuesto, El 14 no es el único responsable de los malos números del Heat en el clutch. La estrella del equipo, Jimmy Butler, está lanzando con un promedio del 30,4% en esos últimos 5 minutos finales, lo que es una clara muestra del bajo nivel del equipo en ese apartado. Aún así, el escolta tiene un +/- de 4,3.
Si Miami quiere aspirar a ganar el campeonato, debe resolver este problema antes de los Playoffs. Es posible que en la primera fase enfrente a rivales complicados. Hasta el momento, podría enfrentar a uno de los siguientes equipos: Raptors, Hornets, Hawks o los poderosos Nets. Eso sí se libran de los Cavaliers, el equipo revelación de la temporada que quiere seguir dando que hablar.