Según informa Ronald Tillery en el Memphis Commercial Appeal, Pau Gasol ha sido traspasado a Los Angeles Lakers, a cambio de Kwame Brown y Javaris Crittenton, además de dos primeras rondas, las del 2008 y 2010.

Según el mismo medio, Stromile Swift también ha sido traspasado a los New Jersey Nets, a cambio de Jason Collins.

Con esta operación, los Grizzlies renuncian al que ha sido el mejor jugador en la corta historia de la franquicia, a cambio de flexibilidad salarial, en lo que puede entenderse como una operación de Michael Heisley, propietario de los Grizzlies, en su intento de vender la franquicia

***Actualización de las 22:45***

Según informa ESPN, la operación del traspaso de Pau Gasol a Los Angeles Lakers incluirá también los derechos de su hermano Marc. Además, se especula con que los Lakers deben firmar a Aaron McKie, jugador retirado pero cuyos derechos son poseídos por la franquicia angelina, para posteriormente mandarle testimonialmente a Memphis con el fin de igualar salarios. Por su parte, Memphis también manda a Los Angeles una segunda ronda del draft.

Analicemos el traspaso por cada una de las dos partes:

Parece difícil entender este traspaso por la parte de los Grizzlies: se libran del mejor jugador de la historia de la franquicia y adquieren un pívot de muy segunda fila y un base novato, posición en la que tienen dos de sus más prometedores jugadores (Conley y Lowry). Sin embargo, desde la perspectiva económica, el traspaso es entendible. Memphis se libra del cuantioso contrato de Gasol, que llevaba tiempo a disgusto en la franquicia, a cambio de los nueve millones de dólares que liberará Kwame Brown en junio, cuando su contrato finalice. También consiguen jugadores jovenes, materializados en Jarvis Crittenton, Marc Gasol y las dos primeras rondas del draft de 2008 y 2010.

Es mucho más fácil ponerse en la piel de Mitch Kuptchak. Kobe Bryant está en el mejor momento de su carrera deportiva y necesita mimbres para que sus mejores años no se vayan en balde. Con Gasol obtienen un excelente anotador interior que liberará de mucha atención defensiva a Bryant, y puede formar un dúo demoledor ofensivamente con Andrew Bynum. No echará en falta Phil Jackson ni a Brown ni a Crittenton, que estaban lejos de ser decisivos; es una operación redonda en lo deportivo para los de oro y púrpura.

Individualizando en los españoles, Pau cambia de aires, por fin, hacia un equipo aspirante a todo, lo que indudablemente repercutirá de manera positiva en su juego y su motivación en la cancha. No será la referencia ofensiva del equipo, algo a lo que se tendrá que acostumbrar, pero quizá el rol de segunda espada beneficie su juego, sin la presión de tener que sostener por sí solo al equipo. Marc, por su parte, se ve inmerso en un pantano de difícil solución deportiva. Sin embargo, el aspecto positivo es que tendrá poca competencia en las posiciones interiores y gozará de minutos y protagonismo desde el primer día.